Los sindicatos arrebatan a la oposición andaluza la iniciativa para desgastar a Juanma Moreno

El pasado 10 de enero, Juan Espadas propuso a Juanma Moreno un gran pacto por la Atención Primaria. Dos meses después, el líder del PSOE andaluz ha visto como el Gobierno andaluz ha pactado con la CEA, UGT y CCOO un acuerdo en ese sentido y que, además, supone la rectificación de la polémica orden que abre la puerta a la privatización de ese servicio que entró en vigor hace escasos 10 días. Este relato de la realidad política andaluza es la prueba de que el principal dolor de cabeza en San Telmo lo generan los sindicatos y no los partidos de la oposición, que sigue sin ser capaz de hincarle demasiado el diente a la mayoría absoluta del líder popular.

El acuerdo con los sindicatos, que Juanma Moreno ha celebrado por todo lo alto, enmienda la plana de la consejera de Salud, Lina García, ya que ha generado un paso atrás que en San Telmo no querían dar. Al menos no hace unas semanas, cuando la oposición comenzó a atizar al Gobierno andaluz con la orden tras la denuncia de Por Andalucía. El mensaje que salía del equipo del presidente es que no habría rectificación porque, aseguran, la orden de tarifación de los conciertos no va aparejada a una voluntad de privatizar la Atención Primaria. Desde entonces, ya se ha producido una reforma del texto y el Ejecutivo popular ha firmado con UGT, CCOO y la CEA una segunda rectificación, aunque todavía no tiene fecha, según ha admitido el consejero de Presidencia, Antonio Sanz.

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"Nuestro objetivo es influir en las políticas públicas, no hacer oposición", defiende una fuente sindical implicada en las negociaciones del acuerdo firmado el pasado lunes en San Telmo. Al mismo tiempo, esta fuente recuerda cuál es la consecuencia de cualquier incumplimiento en este acuerdo será una respuesta en la calle apoyada por CCOO y UGT. Es cierto que Moreno se garantiza la paz social con la firma, pero en los sindicatos están decididos a aprovechar la "coyuntura", que no es otra que la celebración de unas elecciones municipales el próximo 28 de mayo en Andalucía y las generales previstas para final de año.

Las organizaciones que han firmado este acuerdo miran ya precisamente a esa segunda mitad del año y al diseño de los Presupuestos de la Junta para 2024. Juanma Moreno tiene garantizada la aprobación de los próximos tres proyectos de cuentas gracias a la mayoría absoluta que logró el pasado junio. Eso deja a los partidos de la oposición fuera de juego y con poca capacidad de presión, como ha quedado demostrado en la tramitación del texto que entró en vigor el pasado 1 de enero. PSOE, Por Andalucía, Vox y Adelante Andalucía lograron incluir poco más de una decena de enmiendas de escasa entidad.

Por contra, el texto que se dio a a conocer el pasado lunes movilizará 8. 840 millones de euros entre gasto sanitario, ayudas a empresas y familias y planes de empleo y tiene una gran impronta de las propuestas de UGT y, sobre todo, CCOO. Hasta el 90% de las medidas de los sindicatos están reflejadas en el acuerdo, que tiene asociado un calendario de aprobación e incluso presupuestación para todas las iniciativas que incluye. Hubo propuestas que no pasaron por el filtro de Antonio Sanz, pero fuentes conocedoras de la negociación admiten que "habrá más guiños" del Gobierno andaluz con las exigencias de las centrales sindicales en los próximos meses.

El éxito es doble. Moreno logra esa paz social —condicionada al cumplimiento del pacto— que tanto le preocupa, como ha venido demostrando en sus años de gobierno. El acuerdo de este lunes es el tercero que firma con CCOO, UGT y la CEA, pero ha habido muchos sectoriales, la mayoría centrados en la sanidad pública. "Mantenemos el diálogo hasta la extenuación", dijo el presidente de la Junta en la noche del martes en un acto en Málaga. Pero los sindicatos también se apuntan el tanto de influir en las políticas públicas con la seguridad de que cualquier desvío del Gobierno andaluz tendrá una respuesta "en la calle". Hay que recordar que las protestas convocadas contra la orden del SAS se mantienen para este jueves frente a la sede del Servicio Andaluz de Salud y que hay una marcha de las Mareas Blancas prevista el 26 de marzo que CCOO y UGT siguen apoyando.

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La duda es si este fenómeno genera recelos en los partidos de izquierda, que mantienen una histórica relación con los sindicatos. Las organizaciones que dirigen Carmen Castilla (UGT-A) y Nuria López (CCOO-A), han mantenido comunicación con las fuerzas de la oposición durante los meses que han durado las negociaciones. Un dirigente de estos partidos llegó a dudar sobre la idoneidad del acuerdo con la Junta en plena campaña de la izquierda sobre la primaria. "Le habría gustado lograr la rectificación en el Parlamento", explican fuentes conocedoras de estas conversaciones. Esa posibilidad, a día de hoy, no existe. Juanma Moreno no va a conceder la misma victoria a la oposición que la que lograron los sindicatos con la firma del acuerdo.

El fuego de la Atención Primaria

El siguiente capítulo de este acuerdo está en el desarrollo de ese pacto por la Atención Primaria que debe ir aparejado al cambio la polémica normativa. En la Junta insisten en que los 3.370 millones que irán a este servicio serán básicos para su impulso y que ya se están produciendo reuniones para desarrollar la entente. Estos encuentros suelen darse en la mesa sectorial de sanidad, donde además de UGT y CCOO están CSIF, Satse y el Sindicato Médico Andaluz (SMA). Los representantes sindicales se quejan de que sus interlocutores, en muchas ocasiones, no tienen capacidad negociadora o son excesivamente "incendiarios".

La Junta seguía usando un decreto derogado en 2021 para los contratos de emergencia de Salud, pero cambiará la fórmula el próximo junio

Existe la sensación, expresan fuentes sindicales, de que es posible que haya cambios en la Consejería de Salud, aunque no hasta el punto de un cambio en el titular de la cartera. Incluso en el seno del PP ya hay cierto runrún. Y no ayuda a apagarlo la segunda rectificación del departamento que dirige Lina García tras la orden de la Atención Primaria. A raíz de las publicaciones de eldiario.es, el Gobierno andaluz ha anunciado que en junio se centralizará toda la contratación de la sanidad pública andaluza para acabar con los contratos de emergencia que se siguen haciendo con la excusa del Covid.

El problema es que estas contrataciones se amparaban en un decreto estatal que se derogó en 2021. La Consejería de Hacienda que dirigía Juan Bravo ya advirtió entonces que este tipo de prácticas debían ser "residuales", pero en Salud se mantuvieron amparadas por las necesidades derivada de la pandemia. El portavoz del Gobierno andaluz, Ramón Fernández-Pacheco, defendió el martes que todos los contratos y sus prórrogas, que incluyen más de 200 millones para clínicas privadas, han pasado por el filtro de la Intervención General de la Junta.