El segundo Gobierno de Juanma Moreno tendrá casi una veintena de nuevos altos cargos

Un aumento "prudente" del número de altos cargos. El dato no está todavía cerrado, pero se puede afirmar que, por el momento, el organigrama del segundo Gobierno de Juanma Moreno tendrá 18 altos cargos más que el primero, sin contar a los consejeros. El crecimiento en el número de directivos todavía no está cuantificado y será el mínimo "imprescindible", según explicó el martes el consejero de la Presidencia, Antonio Sanz.

El Consejo de Gobierno, que ya se ha reunido en cuatro ocasiones desde la conformación del nuevo gabinete, dio el martes el visto bueno a los decretos de estructuras de las consejerías que forman el equipo. El aumento en el número de altos cargos se daba por hecho, ya que el número de departamentos creció de 11 a 13.

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El argumento de Juanma Moreno para esta ampliación era mejorar la gestión y evitar la existencia de macroconsejerías con un exceso de competencias. Y la explicación de la multiplicación de los segundos niveles es la misma. "Responde a las prioridades políticas que marcó el presidente en su discurso de investidura", apuntó Sanz en su comparecencia. El histórico dirigente popular explicó además que cada una de esas consejerías desgajadas cuenta con "la estructura mínima" que contempla cada departamento.

En total, según la referencia remitida por el propio Gobierno, son 123 los altos cargos de este primer nivel de la Administración. No se incluyen aquí estructuras de los entes instrumentales más allá del Servicio Andaluz de Salud (SAS). La mayor parte son secretarías generales y direcciones generales, que suman 107 puestos, a los que hay que sumar las 13 viceconsejerías y direcciones de organismos como la Intervención, la Oficina del Portavoz y el Gabinete Jurídico. Según los organigramas publicados en las webs de las distintas consejerías, hasta hace unas semanas eran 105 los cargos de esta primera línea del corpus de la Junta.

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El Ejecutivo andaluz cifra en cuatro el número de secretarías generales que se crean en el nuevo organigrama. Son las de Agua, Fondos Europeos, Formación Profesional y Administración Local, que atienden algunas de las prioridades esbozadas por Juanma Moreno para su segundo mandato. En las direcciones generales, el aumento es mayor, pero el movimiento de competencias entre las consejerías y los cambios de denominación dificultan el análisis.

Esta situación, que puede considerarse una cierta falta de transparencia, contrasta con lo que ocurrió cuando PP y Ciudadanos llegaron a San Telmo hace tres años y medio. El nuevo Ejecutivo, con mayoría absoluta del PP en Andalucía, ha tardado 20 días en alumbrar la estructura del Gobierno, pero no puede todavía dar datos sobre cuánto crecerá el gasto anual en altos cargos. El primer Gobierno de Juanma Moreno tardó 25 días en diseñar sus estructuras, pero el entonces portavoz, Elías Bendodo, ya fue capaz de cifrar la reducción del organigrama en un 13% y calculó un ahorro de 6,5 millones de euros en la legislatura.

Juanma Moreno aumentó la estructura provincial de la Junta en la pasada legislatura tras recortarla inicialmente de 65 miembros a 57

El argumento utilizado por Antonio Sanz para no detallar estas cifras responde a la necesidad de desplegar la estructura territorial del Gobierno andaluz. Según explican en San Telmo, esto no se prevé que ocurra antes de finales de agosto o principios de septiembre. La pasada legislatura comenzó con una reducción de esta Administración periférica, que pasó de tener 65 miembros a 57 en los primeros compases del primer mandato de Juanma Moreno.

El tiempo acabó por enmendar esta decisión y Moreno optó por disgregar delegaciones para agilizar la gestión. Al cierre del mandato, la estructura provincial estaba conformada por 89 altos cargos, más que en el último Ejecutivo de Susana Díaz. La socialista sí tenía más altos cargos en la Administración central y más eventuales.

La reducción de las estructuras de la Junta fue una de las principales banderas del PP en su etapa en la oposición. La hemeroteca permite leer declaraciones del ahora consejero de Presidencia, Antonio Sanz, reclamando a José Antonio Griñán una reducción del 50% de altos cargos hace más de una década. La experiencia de gobierno que acumulan los populares ha acabado por matizar estas críticas.

Avances en los entes instrumentales

El Consejo de Gobierno de este martes sirvió también para dar a conocer un avance en la reducción de los entes instrumentales. Antonio Sanz informó de que la Fundación Centro de las Nuevas Tecnologías del Agua (Centa) se integrará dentro de la Agencia del Medio Ambiente y Agua (Amaya), así como sus 15 trabajadores.

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Se trata de una de las indicaciones de las auditorías del sector público instrumental que el Gobierno de PP y Cs encargó en la pasada legislatura y que el nuevo Ejecutivo tiene previsto aplicar. Para ello, encargó a una empresa privada la elaboración de una estrategia, pero ante el retraso de este proceso, la intención es ir avanzando poco a poco en el proceso.

Este organismo acabará integrado en la Amaya, agencia de gestión compartida entre las consejerías de Agua y Sostenibilidad. Las competencias de la Fundación Centa irán para el departamento que dirige Carmen Crespo, que se ha quedado con la gestión del agua. La otra gran pata de la Amaya es el plan Infoca, el organismo de lucha contra los incendios de la Junta, que ha caído del lado del departamento de Ramón Fernández Pacheco, que se encargará del medio ambiente.