Feijóo mantiene sus planes de investidura pese a la desbandada de sus posibles socios

"Lo que le puedo decir es que Sánchez hoy no tiene más apoyos que Feijóo para la investidura". Con esa frase se ha despachado este martes Elías Bendodo en una entrevista en Telecinco para dar cuenta de cómo el PP mantiene su empeño en que Alberto Núñez Feijóo tiene los números para ir a la investidura. El intercambio epistolar del domingo entre el líder popular y Pedro Sánchez dio pistas sobre este empecinamiento, pero el problema para los intereses del gallego es que los potenciales socios que lo acercarían a la cifra mágica del 176 empiezan a alejarse.

El “derecho” a presentarse a la investidura, ha continuado Bendodo, es del ganador de las elecciones. Y el PP ganó el 23 de julio con 137 escaños (incluido ya el voto exterior) por los 121 del PSOE. Pero es cierto que la nómina de socios con los que puede contar Feijóo es pequeña y, además, se encoge por momentos. Tanto es así que ya se han caído dos posibles apoyos que el propio presidente del PP citó el pasado lunes en la Junta Directiva Nacional del partido. Y un tercero, el PNV, cerró la puerta estruendosamente horas después de que Feijóo anunciase que había contactado con los jeltzales.

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“Vamos a trabajar para una investidura de Feijóo y que se produzcan esos apoyos”, ha insistido Bendodo en la entrevista. Es la misma idea que trasladó el expresidente de la Xunta de Galicia hace ya ocho días. Y desde entonces su posición se ha debilitado aún más. Muy llamativo es el posicionamiento de Javier Esparza, presidente de Unión del Pueblo Navarro (UPN). A pesar de que el PP se ha llevado a sus dos diputados de la pasada legislatura, expulsados por transfuguismo tras votar en contra de la reforma laboral, la formación había comprometido sus votos al gallego en caso de investidura.

El propio Feijóo dio por hecho el acuerdo con los navarros, pero el lunes Esparza reconoció las dificultades que tiene el popular para conseguir más votos a favor que en contra. “No se puede estar engañando a la gente”, zanjó el dirigente de UPN, que en campaña aseguró que un voto para su partido era “un voto para Feijóo”. “La realidad política es otra”, abundó el líder de UPN, que no fue tajante en su rechazo al popular ni abrió la puerta a apoyar a Sánchez, pero sí dio pistas de hacia dónde está virando el tablero.

Quien sí puede estar en el desempate es la diputada canaria Cristina Valido. La heredera de Ana Oramas como representante de Coalición Canaria en el Congreso ya habla de la posibilidad de investir a PSOE o PP indistintamente. Eso sí, solo habla de investidura, nada de acuerdos de legislatura. Es lo que ha defendido este martes en Onda Cero después de que 24 horas antes, en la SER, admitiese que no le gustaban ni Vox ni Sumar, pero que con los de Yolanda Díaz habían llegado a algún acuerdo en las islas. Hacia dónde se mueva la diputada isleña es clave, ya que si acaba en el bloque de Sánchez, su voto a afirmativo, a cambio de asuntos relacionados con Canarias, permitiría al PSOE más margen de maniobra con Junts, ya que solo sería necesaria la abstención de los neoconvergentes.

Acercarse o alejarse de Vox

La cercanía a Vox es precisamente uno de los principales problemas a los que se enfrenta Núñez Feijóo en este intento por armar una investidura. El rechazo del PNV viene directamente de las relaciones de los populares con el partido de Santiago Abascal, como explicó el propio Andoni Ortuzar en El País. Y lo llamativo es que Vox, a pesar de que insisten en que no serán un obstáculo, mantiene la dureza en sus declaraciones sobre el PP. Es hasta cierto punto lógico si se tiene en cuenta que Juanma Moreno, en el pleno del Parlamento andaluz del pasado jueves, echó directamente a Vox la culpa de la reacción del PSOE. Moreno aludió a las declaraciones de Vox sobre violencia de género, sobre la situación política en Cataluña y sobre el colectivo LGTBI.

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“No vamos a estar haciendo hipótesis sobre algo que no ha pasado y no va a pasar”, apunta una fuente de Vox en relación con su postura en una hipotética investidura de Alberto Núñez Feijóo. Este lunes se hizo público que el líder popular y el de Vox mantuvieron una reunión la pasada semana después de que el gallego anunciase su intención de verse con Abascal. El análisis de resultados del 23-J fue también una constatación de la dificultad de Feijóo para ser investido.

La suma de PP y Vox alcanza los 170 escaños después de que los populares arrebatasen un diputado al PSOE en Madrid en el recuento del voto CERA. Es el mismo número que suma la actual mayoría de la investidura de Sánchez (PSOE, Sumar, ERC, Bildu, PNV y BNG). Con Coalición Canaria en juego y UPN en una versión pragmática, todo queda en manos, como se hizo patente el 23-J, de Junts. Y el PP, tras un flirteo inicial destapado por Pedro Rollán, ha vuelto al rechazo a los de Carles Puigdemont.

El tiempo corre camino ya del 17 de agosto, día de conformación de las Cortes y de la elección de los miembros de la Mesa. Para entonces debe haber ya pistas sobre si Sánchez ha sido capaz de congregar una mayoría y es el socialista quien acude a la investidura. Hasta el momento, Feijóo no ceja en su empeño, pero los socialistas ya están moviéndose para seducir a sus socios.