El plan de Feijóo para Igualdad: nueva ley trans, abolir la prostitución y "ajustar" aborto y sí es sí

Alberto Núñez Feijóo ha comenzado a encarrilar ya junto a su equipo los puntos clave de su programa electoral y a resolver las incógnitas que rodean a un futuro —y aún hipotético— Gobierno del Partido Popular. Y su intención de suprimir el Ministerio de Igualdad no ha pasado desapercibida. En Génova plantean volver al modelo de Mariano Rajoy e integrar esta cartera como "un departamento dentro de otro ministerio", un criterio que, aseguran, solo responde a la intención del líder popular de recortar gasto político y reducir la "gigantesca estructura" del Ejecutivo de Sánchez, compuesto por 22 ministros fruto del pacto de coalición con Unidas Podemos. "No hay piel azul para tapizar tanto sillón", ironizan en la dirección de los populares.

Las mismas fuentes inciden en que el criterio de Feijóo no implica que el líder popular vaya a descuidar las políticas de Igualdad durante la próxima legislatura, en caso de que consiga hacerse con la Moncloa tras el 23-J. Lo que se busca, añaden, es aparcar debates que "no necesita" la población y que "infantilizan y caricaturizan" a la mujer. "España no necesita un ministerio que hable de menstruación y de prácticas sexuales", resumió Borja Sémper el pasado miércoles. Pero, más allá de este tipo de cuestiones, lo cierto es que los planteamientos que maneja el PP en materia de Igualdad pueden abrir una enorme brecha política con Vox, el aliado que Feijóo necesitará para superar una eventual investidura.

Opinión

TE PUEDE INTERESAR

Feijóo presidente y Sánchez opositor malhumorado: el marco de campaña del PP

Josep Martí Blanch

Feijóo lleva meses apostando por la derogación de la ley trans aprobada hace unos meses por el departamento que lidera Irene Montero. Pero ello no implica que no vaya a existir una legislación específica para "proteger" a este colectivo en España. Fuentes cercanas al líder nacional aseguran que el partido está trabajando ya en un texto de sustitución a la norma vigente, en la que el PP recuperará los postulados del llamado feminismo clásico, con cuyas asociaciones llevan trabajando los populares durante meses para combatir el llamado "borrado de mujeres" y eliminar de la legislación el concepto de la "autodeterminación de género".

El PP busca recuperar controles para iniciar un cambio registral de sexo, especialmente en el caso de los menores. Feijóo devolverá a la ley el requisito de contar con informes médicos o psicológicos que acrediten disforia de género, además de rescatar el consentimiento paterno como condición indispensable para este tipo de procedimientos en el caso de los menores de edad. No se permitiría en ningún caso prácticas de modificación genital en los menores de 16 años.

Vox, por su parte, avanza ya que no avalará la ley que Feijóo pretende poner en marcha y se levanta en armas contra la llamada "ideología de género" que, a su juicio, "adoctrina" a los niños y les "arrebata" de sus padres. Y la nueva ley trans no es ni el único ni peor punto de desencuentro que tendrán que desenredar PP y Vox en pocos meses. El PP cree que hay debates que ya están "superados", como es el caso de la ley del aborto, que Feijóo no se plantea derogar.

El tardío fallo del Tribunal Constitucional avalando la ley de plazos de José Luis Rodríguez Zapatero llevó al líder del PP a protagonizar un cambio de postura histórico en el Partido Popular y a reconocer la interrupción del embarazo como un derecho de la mujer. Génova mantendrá la ley del aborto, y solo plantea "ajustes" casi exclusivamente en el capítulo de las jóvenes: Feijóo planteará que las menores de edad vuelvan a requerir del permiso paterno para abortar. Hay otros asuntos de la ley que aún no se han tratado en los órganos de dirección de los populares, como las bajas laborales por regla dolorosa.

Otra de las prioridades del PP en cuestiones de género será la de recuperar en el Congreso uno de los grandes compromisos de Sánchez para la presente legislatura, pero que nunca logró llevar a término: la abolición de la prostitución. La normativa para perseguir el proxenetismo, que abrió grietas en la coalición gubernamental durante el intento de tramitación en la Cámara Baja, quedó aparcada tras el estallido del caso de Tito Berni y decayó definitivamente tras la disolución de las Cortes y la convocatoria electoral.

TE PUEDE INTERESAR

Feijóo diseñará el programa del PP sin consultar sobre el aborto o vientres de alquiler

Ana Belén Ramos

En los últimos meses, el PP ha convertido también la batalla contra la ley del solo sí es sí de Irene Montero en una de las principales vías de desgaste contra el Ejecutivo de Sánchez. Los miles de rebajas de penas a agresores sexuales derivadas de la norma —y avaladas este mismo miércoles por el Tribunal Supremo— han permitido al PP amarrar la bandera del feminismo para captar masa crítica procedente del PSOE, y aprobó junto a los socialistas la contrarreforma para endurecer la normativa del Ministerio de Igualdad y frenar la sangría de atenuantes para condenados por delitos sexuales.

Pero la ley del solo sí es sí —o más bien la contrarreforma actualmente vigente— no está en la lista de leyes del sanchismo que se compromete Feijóo a derogar. Los populares apuestan por que el consentimiento "continúe en el centro" y su planteamiento pasa por endurecer el Código Penal, pero no regresar a la anterior redacción en la que se separaban los delitos de abuso y agresión sexual. "Ese es un debate que ya está superado", sintetizan las fuentes consultadas.

TE PUEDE INTERESAR

Dolores Delgado se quedará sin Fiscalía si el PP gobierna tras el 23-J

Beatriz Parera

Alberto Núñez Feijóo participó este jueves en un foro de liderazgo femenino en el que ratificó su intención de no descuidar las cuestiones de género pese a la supresión del Ministerio de Igualdad, y planteó una legislación "en positivo" que "incentive la conciliación" y aminore la "brecha de género". El líder popular aprovechó su intervención para anunciar que apostará por la educación gratuita de cero a tres años cofinanciada entre el Estado y las comunidades autónomas "para favorecer la conciliación y los horarios laborales adaptados". El dirigente popular situó la maternidad como un "techo de cristal" para las mujeres, y se comprometió a equiparar la tasa de actividad femenina a la masculina. "Más mujeres con empleo significa más mujeres libres", sintetizó.

El líder popular apostó también por incentivar la presencia de mujeres en los órganos de dirección, si bien en las filas populares dudan si mantener o no la ley que impulsó Sánchez el pasado mes de marzo para garantizar la paridad en la política y en la empresa privada, que fuentes bien posicionadas del PP califican como "cortina de humo".