Es noticia
Diario de un ángel del Infierno (II): "Han disparado a uno de los nuestros"
  1. España
JUICIO EN LA AUDIENCIA NACIONAL

Diario de un ángel del Infierno (II): "Han disparado a uno de los nuestros"

El Confidencial accede al sumario que explica los enfrentamientos y alianzas de la banda de moteros durante su desembarco en Mallorca

Foto: Las fotografías de los hermanos Khalil y Abdul Youssafi que la Policía maneja en 2013.
Las fotografías de los hermanos Khalil y Abdul Youssafi que la Policía maneja en 2013.
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

La carta anónima llega a la cafetería en diciembre de 2012. Va dirigida a Khalil Youssafi, uno de los jefes de los Ángeles del Infierno en Mallorca: "Hola, Khalil. Tenemos un trabajo para ti". Sus autores quieren que secuestre y robe a un narcotraficante. Si no lo hace, amenazan con delatarle: “Tenemos tanta información sobre ti que te podríamos meter en la cárcel”.

Khalil debe cumplir sus órdenes antes de final de año: "El día 31 de diciembre de 2012, enviarás a una de tus chicas. Habrá una linterna debajo de una piedra. Tienes que traer una bolsa con 60.000 euros en billetes pequeños metidos en plástico transparente para que podamos verlos". La carta indica el lugar exacto en el que debe dejar el dinero e incluye una última advertencia: “No hables con nadie, te tenemos vigilado”.

Foto: El líder de los Ángeles del Infierno en Alemania (i), Turquía (c) y Luxemburgo (d).

Sin embargo, Khalil no tarda en saltarse esta regla: "Voy a coger la pistola y voy a subir ahí a esperar a ver quién aparece", asegura a su hermano pequeño. “Lo arreglaremos nosotros mismos, te juro que no importa quiénes sean”. "Han nombrado al club, no solo a mí. Vengamos con 80 personas y tengamos una guerra".

El intento de extorsión también llega a oídos de los jefes de la banda en Alemania. "Si necesitas a alguien para propinar un ajuste de cuentas, solo tienes que decirlo". Todavía no saben quiénes son los responsables, pero eso es lo de menos: "Si tú estás en lo correcto o no, en este caso da lo mismo".

placeholder Vigilancia a Abdull Youssafi en la cafetería a la que llegó la nota anónima.
Vigilancia a Abdull Youssafi en la cafetería a la que llegó la nota anónima.

Khalil sospecha que tras el intento de extorsión se encuentra un policía local que ha prestado servicio nocturno en la playa de Palma. "Hermano, deberíamos ir a buscarlo", le dicen desde Alemania. El líder de los Ángeles del Infierno descarta esa idea y comienza a pensar que son simples aficionados.

Esa carta era cosa de críos”, concluye. El intento de extorsión cae en el olvido, pero Khalil no sabe que para entonces la Policía Nacional y la Guardia Civil están escuchando todas sus conversaciones.

placeholder

Diez años después de recibir esta amenaza anónima, el líder de los Ángeles del Infierno en Mallorca alcanzó este lunes un pacto con la Fiscalía. Frente a los 33 años de cárcel que pedían para él, ahora se enfrenta a 12. Organización criminal, blanqueo, coacciones, prostitución, detención ilegal... El acuerdo implica admitir un amplio abanico delictivo, pero tiene letra pequeña: al reconocer los hechos, Khalil puede cambiar cada día de prisión por "dos días de multa a cuota diaria de cuatro euros".

Otros 32 acusados siguieron sus pasos y solo una decena se negó a pactar este lunes con la Fiscalía. En este segundo grupo se encuentra el propio hermano de Khallil, que mantiene el pulso y se enfrenta a una petición de 38 años de prisión.

placeholder Los hermanos Abdul (i) y Khalil (d), este lunes, en La Audiencia Nacional. (EFE/Zipi Aragon)
Los hermanos Abdul (i) y Khalil (d), este lunes, en La Audiencia Nacional. (EFE/Zipi Aragon)

El juicio pondrá el punto y final a una historia que arranca en 2011, cuando los hermanos Khalil y Abdul comienzan a establecer en Mallorca una nueva base de operaciones para los Ángeles del Infierno. "Izaremos la bandera en El Arenal. La bandera de los Ángeles del Infierno"

El sumario, al que ha tenido acceso El Confidencial, explica que los Ángeles del Infierno persiguen tres objetivos en Mallorca: ocupar el vacío existente frente a otras organizaciones criminales, utilizar la isla como vía de escape para los miembros en apuros y reforzar sus actividades ilegales aprovechando la movilidad de los moteros. Los hermanos Youssafi deben proteger el nuevo territorio para lograrlo.

placeholder

Entre sus enemigos destaca la banda de los Bandidos. El 24 de febrero de 2013, sus moteros vuelven a atacarles en la ciudad alemana de Duisburgo. Los Ángeles del Infierno dan la voz de alarma y comienzan a movilizarse. “Voy para arriba con dos coches”. “Han disparado a uno de los nuestros", avisan a los jefes en Mallorca.

Los Bandidos les están dando caza y cuatro meses después llegan a la isla, donde protagonizan una pelea en una discoteca de El Arenal. "Eran seis rusos e hicieron jaleo en el Megapark". "Realmente con mucha sangre". Khalil ni siquiera se encuentra en la isla en ese momento, pero sus hombres le mantienen informado. "A mediodía los estuve buscando y no los encontré...".

placeholder El líder de los Ángeles del Infierno en Alemania (i), Turquía (c) y Luxemburgo (d).
El líder de los Ángeles del Infierno en Alemania (i), Turquía (c) y Luxemburgo (d).

Los líderes europeos se muestran preocupados. Si quieren mantener la bandera de los Ángeles del Infierno en El Arenal, necesitan a todos sus hombres. "Mantén los ojos bien abiertos, ¿sí?”, avisa Khalil a uno de los suyos. "Yo soy un general, no soy un soldado".

Su asentamiento en la isla también implica aliarse con otros criminales. Entre ellos, el clan de los Osmani: "Esta organización está relacionada con diversas actividades criminales, como el tráfico de drogas, extorsión, blanqueo de capitales y actividades vinculadas a la prostitución, siendo considerada policialmente colaboradora de los Ángeles del infierno, especialmente en la ciudad de Hamburgo". El 30 de julio 2012, las vigilancias detectan la reunión de los moteros de Mallorca con un destacado miembro de este clan.

placeholder

Otra supuesta alianza llega ese mismo año de la mano de un ciudadano inglés: "Este individuo estaría relacionado con miembros de una organización criminal conocida en el Reino Unido como los Adams Family, una de las más poderosas del país y cuyos miembros son sospechosos de estar detrás de más de 30 asesinatos". También se les conoce como el Sindicato del Crimen de Clerkenwell o A-Team.

La policía sospecha que los Adams mantienen intereses en Mallorca y los moteros de Khalil se erigen como el complemento perfecto para lograr sus objetivos. Las reuniones con este ciudadano inglés son breves, en lugares controlados por la banda y bajo importantes medidas de seguridad.

placeholder

Los Ángeles del Infierno también se hermanan con bandas de moteros de menor envergadura. Los Bandidos son enemigos irreconciliables, pero otros clubs no dudan en ponerse a su disposición. La Policía detecta esta tendencia en noviembre de 2012: los Black Falcons de Tarragona planean extenderse a Mallorca y necesitan el visto bueno de los Ángeles.

La propuesta le llega a Khalil a través de otro ángel en España. "Me llamó un hermano nuestro de North East, del capítulo de North East de Tarragona, ellos tienen un club support que se llama Black Falcons, estos chicos tienen gente en Mallorca". Tras conocerles en persona, Khalil traslada la idea a sus superiores en Alemania: "Estuvimos en su fiesta, son los Black Falcons, gente simpática". "Nos apoyan, da igual para qué sea. Si hace falta ayuda, ahí están".

placeholder El líder de los Ángeles del Infierno Frank Hanebuth, en la Audiencia Nacional. (EFE/Zipi Aragon)
El líder de los Ángeles del Infierno Frank Hanebuth, en la Audiencia Nacional. (EFE/Zipi Aragon)

El clan Osmani, la Adams Family, los Black Falcons… Al arranque de 2013, los ángeles de Mallorca ya juegan en las grandes ligas criminales. Los moteros comienzan a ascender en el escalafón de la banda y los hermanos Youssafi son los principales beneficiados, pero prometen ascender a los suyos. "Eres mi favorito y te quedarás conmigo hasta el final. Te voy a hacer grande".

Si sus primeros hombres eran expertos en artes marciales, ahora comienzan a aparecer otros con adiestramiento militar. Sin embargo, ninguna habilidad queda por encima de la lealtad a los hermanos Youssafi. “Pregunta si puede hacerse un tatuaje de support y poner 1%”. “Abdul le dice que primero quiere ver el diseño”.

placeholder

La simbología es crucial para los Ángeles del Infierno. Con el 1% indican que se desmarcan del 99% de los clubs de moteros que cumplen la ley. A partir de ahí, la historia de un Ángel del Infierno puede leerse a través de su chaqueta: por matar en beneficio o en defensa el club, reciben el parche Filthy Few; por pelear, resistirse o agredir a la policía, el Dequiallo; por haber sido herido durante un enfrentamiento del club, el Corazón Púrpura, y por participar en un asalto de la banda, el martillo o la bola.

Cualquiera que luzca estos distintos sin habérselo ganado, se convierte en objetivo de los Ángeles del Infierno. Lo mismo ocurre con los parches que identifican sus cargos dentro de los capítulos, que es como se conoce a los grupos que controlan un territorio concreto. Dentro de cada capítulo, los puestos van desde presidente hasta sargento de armas.

placeholder

“La organización solo reconoce al capítulo como autoridad competente del lugar, ignorando a las instituciones públicas”, explica un informe policial. “Ejerce la potestad de un territorio, un dominio que incluso obliga al resto de miembros a solicitar permiso para estar en ese territorio o para poder realizar negocios”.

Esa es la misión de los hermanos Youssafi en Mallorca: fundar un nuevo capítulo para fortalecer sus redes criminales. Khalil ya lo ha reconocido en su pacto con la Fiscalía, pero su hermano Abdul aún se resiste.

La carta anónima llega a la cafetería en diciembre de 2012. Va dirigida a Khalil Youssafi, uno de los jefes de los Ángeles del Infierno en Mallorca: "Hola, Khalil. Tenemos un trabajo para ti". Sus autores quieren que secuestre y robe a un narcotraficante. Si no lo hace, amenazan con delatarle: “Tenemos tanta información sobre ti que te podríamos meter en la cárcel”.

Audiencia Nacional
El redactor recomienda