Colgar las botas y sacar la chequera: en qué invierte la generación de oro del deporte español

La vida de un deportista profesional trasciende al terreno de juego, especialmente cuando sus ambiciones van más allá de los resultados deportivos y abarcan el mundo empresarial en el sector que los vio triunfar cuando estuvieron en activo. En ese mundo es el que ahora se mueven algunos de los grandes espadas del deporte español: Pau Gasol, Iker Casillas, Xavi Hernández, Emilio Sánchez Vicario… La lista cada vez es más larga. Pero, ¿en qué segmento del deporte invierten los atletas una vez se retiran?

Pau Gasol lleva años trabajando en su legado más allá de las pistas, lo que le llevó a crear junto a su hermano Marc Gasol Foundation, una entidad que busca combatir el sedentarismo infantil y favorecer estilos de vida activos y saludables entre los más pequeños. Esa inversión de impacto social confluye con otros proyectos que se han sumado a su cartera en los últimos años, coincidiendo con el final de su carrera.

El doble campeón de la NBA ha invertido en las pistolas de masaje Theragun; en la compañía de análisis de datos de los aficionados del deporte Sports Innovation Lab; en la agencia de marketing y contenidos deportivos Overtime Sports; los anillos inteligentes Oura; y, recientemente, lo ha hecho también en la WNBA, la NBA femenina. Todas estas inversiones las canaliza a través de Pau Gasol Enterprises. Es el resultado de 18 temporadas jugando en la NBA, donde acumuló un salario de más de 200 millones de dólares brutos.

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Iker Casillas es uno de los futbolistas españoles retirados que más activos se ha mostrado en esta faceta. El meta, que tanteó la posibilidad de rivalizar con Luis Rubiales por la presidente de la Real federación Española de Fútbol (RFEF), finalmente se retiró de la carrera y se centró en impulsar Sportboost, la aceleradora de 'startups' vinculadas a la industria deportiva.

A través de este vehículo inversor ha destinado recursos a Idoven, proyecto de cardiología aplicada al deporte y digital en remoto basada en inteligencia artificial para ayudar a prevenir infartos y otros problemas cardiacos en personas que practican deporte, que acaba de captar 6,5 millones de euros de la Comisión Europea.

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Más allá de esta empresa emergente del sector médico, el deporte ha copado la mayoría de las inversiones de Casillas: es accionista minoritario en los drones Fly-Fut, en la que también ha invertido Fernando Hierro. Esta compañía graba los entrenamientos y partidos, ofreciendo información de valor a los cuerpos técnicos.

Siguiendo por la senda del videoanálisis, Casillas ha entrado en el capital de Kognia, otra start up en la que también ha invertido Xavi Hernández, entrenador del FC Barcelona, y que desarrollado un software de inteligencia artificial que analiza tácticamente el juego, de manera automática y a tiempo real.

Andrés Iniesta aún sigue en activo, pero desde hace años ha trabajado lejos del terreno de juego. Ha invertido en la agencia NSN, anteriormente conocida como Sports&Life, un proyecto que surgió de su agencia de representación y que tras invertir en la creación de contenidos vinculados a la industria del deporte recientemente ha diversificado hacia el sector del 'gaming', el entretenimiento en directo, la producción audiovisual, el turismo deportivo a través de la agencia Sports & Travel y la marca de calzado deportivo Mikakus.

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De un ex del Barça, a uno del Real Madrid: Esteban Granero ha invertido en Olocip, una tecnológica que con los datos del juego y la inteligencia artificial abordaba dimensiones predictivas y prescriptivas, aportando respuestas a través de modelos científicos en el futbol profesional. El sistema llegó a aplicarse incluso en épica de pandemia, pues con los datos de contagios de covid-19 y el uso de la inteligencia artificial se predecía el pico de contagios por coronavirus y ofrecía información sobre el momento oportuno para levantar restricciones.

En el mundo del tenis la mayoría de las inversiones han ido dirigidas a crear academias enfocadas al alto rendimiento. Es lo que proponen Juan Carlos Ferrero, que en su academia ha formado a Carlos Alcaraz, o Emilio Sánchez Vicario, cuyo centro de entrenamiento en El Prat de Llobregat (Barcelona) se ha expandido por Estados Unidos y China. Por sus pistas han pasado figuras como Andy Murray y Grigor Dimitrov.