Las empresas aprovechan el calentón del mercado para vender ladrillo a ritmo récord

Nuevo récord del sector inmobiliario. En esta ocasión, derivado del creciente interés de las compañías no inmobiliarias por aprovechar el momento alto del ciclo para vender sus inmuebles y hacer una jugosa caja. Una creciente tendencia que se extiende por toda Europa y que permitió cerrar el pasado ejercicio con la cifra récord de 17.400 millones de euros transaccionados en este tipo de operaciones en el Viejo Continente, según el informe 'Raising capital from corporate real estate' elaborado por JLL.

Se trata de la cifra más alta registrada desde que se elabora este informe, hace 10 años, unos máximos que también se cumplen en el caso concreto del mercado español, que en 2018 vio cerrarse 31 operaciones por un total de 1.400 millones de euros, cifra que supone recuperar los niveles previos al estallido de la burbuja y que prácticamente duplica el volumen registrado un año antes.

Estos números subrayan el momento álgido que vive el sector, un mercado del que cada vez más voces advierten sobre la posibilidad de estar tocando techo. Sin embargo, el estudio puntualiza que son varias, y diversas, las razones que explican este nuevo récord.

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Al determinante contexto de bajos tipos de interés y bajo coste de capital, que favorecen las ofertas de compra, se unen algunos cambios contables que han entrado en vigor en 2019, como el registro de los alquileres como deuda, la evolución de los espacios de trabajo hacia una mayor flexibilidad, lo que aumenta el interés por el alquiler, la presión de los analistas para que las compañías vendan activos y se centren en el negocio, o la aparición de vehículos especializados.

Aunque, en términos europeos, el grueso de las operaciones se concentra en oficinas, con 7.700 millones de euros transaccionados, en España, el gran protagonista es el segmento comercial, con Inditex, El Corte Inglés, Eroski y Makro copando el 'top 4' de las mayores operaciones cerradas el pasado ejercicio. El dueño de Zara, además, se alzó con el galardón de haber protagonizado la principal operación de 'retail' de todo el Viejo Continente, con la venta de 16 tiendas en España y Portugal a Deka Inmobilien por 367 millones.

El 'retail', protagonista español

El siguiente en la lista es El Corte Inglés, con la venta de La Vaguada y Parquesur por 160 millones, operación a la que se suman dos que cerró con Corpfin por 90 millones cada una: el número 1 de la valenciana calle Colón, por un lado, y dos establecimientos en Madrid y Bilbao, por otro. Por encima de esta cifra, en 105 millones, Eroski vendió una cartera de seis supermercados a ICG, mientras que Makro se deshizo de tres centros en Madrid por 86 millones.

No obstante, todas estas cifras prometen quedarse pequeñas solo con la megaoperación que tiene en marcha El Corte Inglés, que ha lanzado el Proyecto Green para desprenderse de 95 activos por unos 1.000 millones de euros. Una cartera que ya ha despertado el interés de varios inversores internacionales, los cuales representaron el pasado ejercicio el 70% de las adquisiciones.

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Fuera de nuestras fronteras, la venta corporativa más icónica fue la protagonizada por la nueva sede de Goldman Sachs en Londres, que compró el Fondo Nacional de Pensiones de Corea del Sur por 1.200 millones de libras (1.385 millones de euros) y donde el banco estadounidense ha firmado un contrato de alquiler por 25 años. Y es que Reino Unido, a pesar del Brexit, ha sido la locomotora europea, con 66 ventas corporativas que sumaron 3.500 millones de euros; seguido de Alemania (2.800 millones) y Francia (2.700 millones).

Por número de operaciones, el segmento industrial fue la estrella europea, con 166 acuerdos cerrados en toda Europa que permitieron alcanzar los 3.600 millones, números en los que, como ocurre en todo el informe, no se incluyen operaciones de pequeñas naves, ya que JLL ha dejado fuera los acuerdos por debajo de cinco millones de euros.