El Gobierno dará los 5.500 M de déficit extra a las comunidades y la Seguridad Social

El Gobierno ya ha decidido cómo repartirá los 5.500 millones de euros extra que ha concedido Bruselas para la reducción del déficit público en 2019. El presidente, Pedro Sánchez, anunciará en su comparecencia del martes que una buena parte de ese déficit adicional conseguido, en torno a 2.500 millones, irá a las comunidades autónomas. Un guiño del Gobierno con las regiones, que así podrán triplicar su déficit público en el próximo ejercicio. Hasta ahora, su senda de déficit obligaba a las comunidades a recortar su desfase presupuestario hasta el 0,1% del PIB, y con esta nueva senda, podrán elevarlo hasta el 0,3%.

Se trata de un gesto de Sánchez con las regiones para asegurarse la aprobación del reparto de los objetivos de estabilidad y el techo de gasto en el Congreso y el Senado. ¿Qué partido se opondrá ahora a esta nueva senda de déficit? El PP, que pensaba votar en contra de la nueva senda de ajustes, ahora tendrá mucho más difícil argumentar ante el público que no se han podido cambiar los objetivos de estabilidad por su voto negativo. Esto afectaría también a las comunidades gobernadas por el Partido Popular, lo que todavía complica más el veto de los populares al techo de gasto. En definitiva, se trata de una 'jugada' política que ya utilizó en el pasado el exministro de Hacienda Cristóbal Montoro para garantizarse la aprobación del techo de gasto.

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Con esta medida, el Gobierno compensa el retraso de la reforma de la financiación autonómica y permitirá a las regiones que incrementen sus presupuestos destinados al gasto social. El mayor margen presupuestario —unido a la financiación extra que quiere aprobar el Ejecutivo y al incremento de la recaudación gracias al ciclo económico— permitirá a las regiones incrementar sustancialmente sus presupuestos para el ejercicio 2019.

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El resto del margen presupuestario irá a la Seguridad Social, explican fuentes de Hacienda. Esto es, el sistema de pensiones se quedará con casi tres décimas del PIB de déficit extra, más de 3.000 millones de euros en 2019. Así, su desfase presupuestario pasará del 0,9% del PIB hasta el entorno del 1,3%. Una noticia preocupante para la Seguridad Social, ya que confirma que el déficit del sistema tampoco se reducirá el próximo año. Al contrario, el agujero de las pensiones seguirá agrandándose, y con él, el endeudamiento de la Seguridad Social.

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Será la Administración pública quien tenga mayor déficit el próximo año. En total, se comerá casi dos tercios del nuevo margen presupuestario para 2019, que es equivalente al 1,8% del PIB. Datos que reflejan cómo el Gobierno ya ha renunciado a corregir el déficit de la Seguridad Social en el corto plazo. La propia ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, reconoció la semana pasada ante el Congreso de los Diputados que el objetivo con el que trabaja el Gobierno es alcanzar el equilibrio financiero de la Seguridad Social dentro de cuatro o cinco años. Esto es, las reformas para elevar los ingresos del sistema y reducir los gastos serán lentas y tardarán en surtir efecto.

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, informará a las comunidades autónomas de los nuevos objetivos de estabilidad en la próxima reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) que se celebrará el jueves 19 de julio. Ahí se debatirá la nueva senda de consolidación y el ministerio confía en una aprobación mayoritaria por parte de las regiones. Posteriormente llevará estos nuevos objetivos al Consejo de Ministros del viernes, en el que aprobará el nuevo techo de gasto para 2019 y la senda de reducción de la deuda pública.