El Getafe amarga una noche histórica al Atlético de Madrid con un gol en el minuto 93 (3-3)

Noche épica en el Civitas Metropolitano. El Atlético de Madrid, con diez jugadores desde el minuto 38 por la expulsión de Stefan Savic, estuvo cerca de doblegar al Getafe de José Bordalás (3-3). A pesar de la diferencia numérica y la entidad de un rival muy peligroso, los rojiblancos mandarían por 3-1 hasta el minuto 86 con el doblete de Griezmann y el gol Morata. Sin embargo, cuando el partido parecía perecer, Óscar Rodríguez marcó en el minuto 86 y Borja Mayoral, que ya había marcado hizo el definitivo 3-3 tras transformar el penalti por mano de Rodrigo Riquelme en el minuto 93.

El Getafe salió en tromba al Metropolitano. Los azulones, con la moral por las nubes después de la goleada al Sevilla en el Ramón Sánchez-Pizjuán, salieron dispuestos a repetir el asalto a uno de los campos más complicados de LaLiga. La presión alta de los pupilos de José Bordalás ahogó al Atlético de Madrid en los primeros pases hasta forzar pérdidas sensibles.

Un cabezazo tibio de Juanmi Latasa anunció que el Altético estaba sufriendo. Los visitantes se lanzaron a la yugular del Atlético, que solo encontraba piernas en Rodrigo Riquelme. Con todo el equipo agazapado y sin amenaza al espacio por la presencia de Memphis Depay en el frente de ataque, sería Riquelme quien estrellaría la pelota en el travesaño.

El Atlético tembló en defensa con Mario Hermoso y Stefan Savic, quien vería la primera amarilla, tras un error de Depay. Así las cosas, el Getafe volvió a la carga a través de los centros laterales de Diego Rico y los remates de Juanmi Latasa. Tuvo que aparecer Witsel, puro pegamento, para apagar fuegos. Los azulones llegaban más y mejor, con Greenwood muy activo.

En el minuto 30, Jaime Mata pudo ser expulsado por un pisotón sobre De Paul que tanto el árbitro como el VAR se tragaron. Munuera Montero sí que sacaría la segunda tarjeta amarilla a Savic después de un codazo del montenegrino a Mata. Cuando el encuentro pintaba a drama, con el Getafe oliendo el primero, Simeone sentó a Depay por Azpilicueta, mandó a Riquelme a la derecha y Griezmann marcó al filo del descanso al rematar un gran centro suyo.

El VAR, protagonista de nuevo

La segunda parte inició con la entrada de Damián Suárez por Juan Iglesias en el Getafe. Los azulones pudieron anotar el tanto del empate nada más salir del túnel de vestuarios, cuando Latasa desperdició una ocasión clarísima tras un embrollo en el área rojiblanca. Con el Getafe arriba, el Atlético intentó matar el encuentro al contragolpe, pero Lino estaba en fuera de juego.

En el minuto 52, el Getafe replicó con dureza, cuando Greenwood encaró y rompió a Lino, sacó un centro potente, Oblak despejó al medio y Mayoral, en estado de gracia, remató de cabeza al fondo de la red. Simeone quiso revitalizar a su equipo y mandar un mensaje al rival con la entrada de Morata por De Paul. El delantero español entró como un ciclón al encuentro y rozó el 2-1 en posición ilegal. El Getafe pidió un penalti de Hermoso que Munuera Montero no vio.

Solo diez minutos más tarde, en una jugada maravillosa de Marcos Llorente al espacio, el jugador español colocó un gol en bandeja de plata a Morata y el '9' rojiblanco no perdonó para hacer el 2-1. El Metropolitano estalló en una noche que podría haber sido muy fría y los jugadores se abrazaron en una piña. Greenwood sembró el pánico de nuevo, esta vez sin éxito.

El partido enloqueció, con un posible penalti de Damián Suárez a Hermoso tras un manotazo en la cara del uruguayo. Después de haber consultado el VAR, Munuera Montero señaló penalti. Griezmann cogió la pelota con confianza, golpeó con clase y batió a David Soria para hacer el 3-1 e igualar a goles a Luis Aragonés.

Los azulones no se rindieron y Latasa buscó el segundo tanto visitante, invalidado. En el minuto 86, Óscar Rodríguez pondría emoción al tramo final del encuentro al marcar el 3-2 tras impactar en la bota de Griezmann. Ya en el descuento, Riquelme tocó con la mano el centro de Damián y Munuera Montero, tras consultar el VAR, señaló penalti. Borja Mayoral transformó la pena máxima y logró el 3-3 final. Los azulones estuvieron muy cerca del 3-4, pero el marcador ya no se movería.