La tecnológica Novanet: así se monta y funciona un chiringuito federativo para mover el dinero

A la espera de lo que dicte la magistrada del Juzgado de Primera Instancia número 4 de Majadahonda, quien justo dentro de una semana tomará declaración a Luis Rubiales, si algo está quedando demostrado con el llamado caso Brody es que la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) lleva años más pendiente de abrir vías de negocio para sus gestores, que de gestionar el fútbol español. Lo que coloquialmente se conoce como un chiringuito federativo.

Pues bien, tal y como puede comprobarse en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME), el 19 de noviembre de 2021 la RFEF se convirtió en socio único de la sociedad de capital Novanet Automation Consultants SL. Como presidente fue nombrado José Ramón Cuetos Lobo, presidente a su vez de la Real Federación de Fútbol del Principado de Asturias (RFFPA). No en vano, uno de los barones más fieles a Rubiales, incluso después su caída por el famoso piquito a Jenni Hermoso.

Además, y una vez modificado el artículo 24 de los estatutos de la mercantil para la remuneración del mencionado Lobo, se produjeron los nombramientos como consejeros de Novanet de José María Timón, Jefe de Gabinete de Rubiales en la RFEF en sustitución de su tío Juan, y Eduardo Bandrés, tesorero de la RFEF. Así como de consejero y secretario en la figura de Andreu Camps, el que fuera secretario general de la RFEF, despedido sin necesidad de ser detenido, como sucedió con Tomás González Cueto.

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El guipuzcoano Manuel Díaz de Marcos, consejero

También fue nombrado consejero Manuel Díaz de Marcos, presidente de la Federación Guipuzcoana de Fútbol (FGF) y vocal de la Junta Directiva de la RFEF, quien recientemente se quejó a través de una carta colgada en su cuenta de Linkedin por "la generalización indiscriminada y la estigmatización de todas las personas que tenemos responsabilidades federativas". Evidentemente, de su cargo en Novanet no comentó nada, aunque alguna explicación deberá dar.

"Dentro de mi inocencia, esa que da el llevar solo tres años presidiendo una federación, creo que el cambio se puede conseguir sin llegar a tales extremos", añadió Díaz de Marcos sobre la posible intervención de la FIFA. De ahí que el presidente de la Liga Nacional de Fútbol Sala (LNFS), Javier Lozano, le respondiera a través de la misma red profesional. Sin necesidad de nombrarle, pues todo el mundo entendió a quién se refería, le recordó que "a veces, llegar tarde es peor que no llegar".

Por su parte, José Ramón Cuetos Lobo siempre ha negado que él tuviera algo que ver con la modificación del artículo 18 de los estatutos de la RFFPA y que fue la Asamblea la que aprobó dicha modificación. Sin embargo, en la reunión de dicha asamblea, celebrada el 22 de noviembre de 2021, fue él quien incluyó en el orden del día y firmó dicha modificación, para de este modo poder cobrar de Novanet.

Paco Díez y la profesionalización de las territoriales

"Lo del tema de los 100.000 euros lo veo muy bien para profesionalizar todo. Yo lo hago y ya no cobro mi pensión. Estoy 24 horas en exclusividad", llegó a confesar sin rubor alguno Paco Díez, presidente de la Real Federación de Fútbol de Madrid (RFFM). A diferencia de su homólogo asturiano, el madrileño sí cobra la mencionada subvención con la que Rubiales es evidente que tenía la buena voluntad de los barones. De ahí su nombramiento en Novanet.

Sobra decir que a Lobo, quien está al frente de la RFFPA desde octubre 2021, no se le conoce ninguna formación que lo capacite para presidir una empresa tecnológica. De hecho, desde el 1 de abril de 2005 hasta agosto de 2018, es decir, al poco de llegar Rubiales a la presidencia de la RFEF, estuvo desempleado. Es por ello que los alrededor de 150.000 que cobra en Novanet explicarían su lealtad a Rubi, por los 50.000, según fuentes bien informadas, del resto, aunque alguno lo desmienta.

Lobo ofrece servicios a la federación de Lobo

Claro que lo más rocambolesco es que, como quiera que Novanet presta servicios tecnológicos a las federaciones territoriales, entre ellas la RFFPA, una empresa que preside Lobo tiene como cliente a una federación que preside Lobo. Lo mismo que no hay que olvidar que Rubiales estuvo cobrando, además de su generoso sueldo, el 0,15% de todos los ingresos que percibiera la RFEF, entre los que lógicamente se encontraban los que generara esta empresa tecnológica.

Como quiera que el expresidente no cobraba los ingresos provenientes de subvenciones, el modus operandi es muy sencillo. La RFEF subvenciona a las territoriales a través del llamado Plan Evolución, que en 2021 destinó más de 35 millones a dichas federaciones para la financiación del Plan Estratégico. Según dijo el propio Rubiales, "con la dotación de este fondo se da respuesta a una desigualdad histórica", para añadir nada menos que "es el día más importante de mi mandato".

Tal y como anunció la RFEF, las acciones de este plan incluyen desde la amortización de los préstamos pendientes por la construcción de sedes, hasta bolsas de financiación por conceptos relacionados con la mejora competitiva y la digitalización, donde entra en juego Novanet. Las territoriales contratan sus servicios, por lo que el dinero público vuelve a la RFEF convertido en privado y Rubiales podía cobrar su porcentaje, hasta que la Asamblea le permitió convertir el variable en fijo.

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Para acabar con Cuetos Lobo, cabe recordar que, como ya informamos en este diario, está imputado por el Juzgado de Instrucción Número 1 de Gijón tras la denuncia presentada por Gonzalo de Azkarate Gaztelu. El presidente de la Plataforma 2030 contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada en el Fútbol ve "indicios de abusos de funcionarios, tráfico de influencias, malversación de caudales públicos, prevaricación y cohecho".

Por su parte, la Fiscalía Superior del Principado de Asturias abrió diligencias por "incumplir el artículo 18 de los estatutos de la RFFPA, que prohíbe presentarse a las elecciones a cualquier persona que tenga beneficios del fútbol". Sin embargo, dada la estrecha vinculación de Lobo con Rubiales, no sería de extrañar que el chiringuito federativo de Novanet acabara en el Juzgado de Primera Instancia número 4 de Majadahonda. Al tiempo.