Lo que le sienta bien a Carvajal para ser un lateral total (y no es todo por comer brócoli)

El excelente rendimiento de Dani Carvajal es una de las razones que explican que el Real Madrid, con bajas importantes en defensa y atascado en ataque, solo haya perdido un partido. El derbi contra el Atleti no lo jugó por tener una sobrecarga. Carvajal ha dado un paso al frente. Asume más funciones en situaciones de fragilidad atrás. El impacto que tiene arriba es inesperado. El Real Madrid no solo vive de Jude Bellingham. También ha encontrado a un lateral derecho total. Está en un nivel altísimo de forma física y confianza. Tiene todo. Solidez, agresividad, profundidad, remate con la cabeza y con el pie.

Carlo Ancelotti da vuelo a un futbolista en un pico de forma físico superior, que asombra a sus propios compañeros y no es habitual a estas alturas de la temporada. Este altísimo rendimiento se explica por tener una buena salud y poner fin a las lesiones. Se pone el foco en un cambio de dieta que le favorece y que consiste en eliminar el gluten, la leche de vaca y la carne roja. Cambiarlo por el pollo, pescado, verdura, fruta y leche vegetal. Se habla menos de su pundonor.

Carvajal no es más fuerte, ni más rápido, ni está más fino y preciso en sus pases y sus disparos por comer brócoli al horno. Tras el partido contra el Valencia en el Bernabéu, autor del primer gol con un soberbio zurdazo, reconoció que se da el capricho de cenar con un vino. "Hay que saber disfrutar en cada momento", comentó. Se puede saltar la dieta. La clave para ver la mejor versión de Carvajal está en su regularidad y carácter. El cambio de dieta influye en disminuir las lesiones, pero prima la fuerza de voluntad y su disciplina. Es un ejemplo de superación. Lo que destacan sus compañeros en el Real Madrid.

Hace algo más de dos años tocó fondo, precisamente en un partido contra el Valencia en Mestalla. Se lesionó en el gemelo derecho en el minuto 26. Estaba tocado. Arrastraba el calvario de las lesiones, le cortaban el ritmo, eran un freno y le traían de cabeza. Un duro golpe en lo psicológico. Venía de jugar solo 15 partidos en la temporada 2020-21. Carvajal entendió que para salir del túnel tenía que fortalecer el cuerpo y la mente. Las lesiones no eran consecuencia de una sola razón. Buscó soluciones en un momento delicado en el que todo se ve oscuro, con pesimismo y desesperación.

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"Si estás atravesando por un infierno, sigue caminando", es una frase célebre y que ha quedado para la historia del gran estadista británico Winston Churchill. Esta es la actitud de Dani Carvajal para salir del túnel en el que, como él ha reconocido públicamente, ha tenido momentos en los que no veía la salida. La lesión en el gemelo derecho le dejó asolado, pero con esa fuerza de voluntad que le caracteriza se propuso superar cualquier obstáculo. La temporada fue de menos a más. Sufrió en la eliminatoria contra el PSG, en el marcaje a Mbappé, y jugó todos los minutos de los partidos contra el Chelsea, Manchester City y la final contra el Liverpool. La remontada de Carvajal sirvió para ganar la Liga y la Champions.

Fuerza mental

Las lesiones, junto con la presión y la exigencia que exige el Real Madrid, han provocado que futbolistas como Bale y Hazard bajaran los brazos. El galés y el belga, desmoralizados, decidieron que lo mejor era retirarse. Dani Carvajal tiene algo especial, una fuerza mental y competitiva que no se consigue solo comiendo brócoli y bebiendo leche vegetal. Es una bestia competitiva. Tenaz e insaciable. Algo de esto se vio en último partido de Liga contra el Valencia, en el que las cámaras de televisión le pillaron gritando a sus compañeros que había que ir a por otro gol. Quería más.

Dani Carvajal tiene una cabeza privilegiada por cómo compite. Es ADN Real Madrid. Esta temporada va como un avión en defensa y en ataque. Ha tenido actuaciones sobresalientes: el gol de cabeza que marcó en Sevilla para empatar el partido, el que salvó bajo palos, el marcaje a Joao Félix en el Clásico, su acción para poner el centro que acabó en el gol de la victoria de Bellingham y el golazo al Valencia. No jugó el derbi en el Metropolitano y el equipo fue un coladero por la banda derecha que defendieron Lucas Vázquez, primero, y Nacho, después.

Igual de atrevido e intenso que es compitiendo en los partidos, llama la atención por no tener filtro. Forma parte de una personalidad de perfil alto. Es directo e incómodo para opinar de temas delicados: decir que hay que respetar la presunción de inocencia de Luis Rubiales en el caso Jenni Hermoso, discrepar de Aitana Bonmatí por señalar a los futbolistas de insolidarios o decir tras perder el Clásico de pretemporada en Estados Unidos que "en competiciones oficiales les vamos a pasar por encima". Carvajal, visto en ocasiones como arrogante, se moja en los micrófonos y apabulla en el césped.

Bellingham, en una entrevista reciente en France Football, comentó que "cuando te pones la camiseta del Real Madrid sientes que llevas un traje de superhéroe". Lo mismo que siente el inglés lo lleva en la sangre el canterano que estuvo en el acto de inauguración, junto con el difunto Alfredo Di Stéfano, en la que ya es la Ciudad Real Madrid Florentino Pérez. "No puede ser más merecido", dice Carvajal de su presidente. Esta temporada ha dado un paso al frente importante con las bajas en defensa de Courtois y Militao. Tapa muchas carencias atrás en una línea donde Alaba no está bien y el lateral izquierdo no ofrece el mismo nivel que el derecho.