La defensa del Barça se rompe, Koundé vuelve a donde no quiere y Joao Cancelo se pierde

El Barça hace agua en defensa esta temporada. El conjunto de Xavi Hernández, cimentado de atrás hacia adelante la pasada temporada, ha convertido en una norma no escrita el encajar gol en cada partido. Aunque el técnico del FC Barcelona "busca la excelencia", el equipo comete los mismos errores colectivos en la presión pospérdida y queda vendido con espacios y al contragolpe. Xavi no da con la tecla pese al baile de nombres en posiciones defensivas y los continuos fallos en cascada están costando una gran cantidad de puntos.

En un equipo que cuenta todas sus victorias en LaLiga por la mínima tras el 5-0 al Real Betis, la defensa debería ser crucial para amortizar al máximo los goles a favor anotados. Sin embargo, los azulgranas solo han logrado mantener el cero en su portería en 6 de 13 partidos. Números muy distintos a los de la temporada pasada, donde el equipo salió campeón de LaLiga gracias a su contundencia en ambas áreas.

En el curso 2022/2023, el Barça logró 26 porterías a cero y únicamente encajó 20 tantos en todo el campeonato. Esta temporada ya lleva 13 goles en contra en 13 partidos, lo que demuestra una clara involución en la solidez defensiva. La fragilidad en área propia y la descoordinación en la presión atormentan a Xavi y le eliminan uno de sus principales pilares ganadores.

"Estamos regalando muchísimas cosas. Hemos perdido puntosen Mallorca, en Granada... ahora llevaríamos muchos más. Esto genera una inseguridad en los jugadores que no es buena", afirmó el técnico, muy preocupado, tras la victoria por los pelos contra el Deportivo Alavés en Montjuic, donde el público silbó a los jugadores al descanso.

Errores que matan al equipo

Declaraciones muy similares a las realizadas tras el empate a dos en Mallorca a inicios de curso:"Son errores impropios que no deben ocurrir, y más en este tipo de partidos, trabados e intensos. Hemos tenido ocasiones claras, pero hemos concedido demasiado, dos errores clamorosos. Nos llevamos un empate insuficiente para nosotros. Hemos tenido que remar demasiado. No nos llevamos la victoria por errores nuestros", añadió.

"Debemos mejorar en defensa. El año pasado, nos dio mucha solidez. No hemos estado mal, pero son dos errores puntuales que no deben ocurrir. Por esos errores, perdemos dos puntos"; siguió Xavi Hernández. Unas palabras muy lejanas a las que pronunció tras levantar LaLiga: "los jugadores han priorizado el trabajo de equipo a la individualidad. Hemos sabido ser un bloque". Este año han llegado dos individualidades muy potentes como Joao Félix y Joao Cancelo, las cuales no se implican tanto tras perder la pelota.

Lío en el lateral derecho

El Barça incorporó a Joao Cancelo en este pasado mercado para, por fin, tener un lateral derecho de élite. En el último encuentro, sin embargo, el defensor portugués pasó por tres posiciones distintas: lateral derecho, interior y extremo izquierdo. Y esta temporada ha jugado incluso de extremo derecho. El embrollo defensivo se plasmó en el primer gol de Samu Omorodion, donde Cancelo estaba cerrando como tercer central junto a Jules Koundé, mientras Ronald Araújo ejercía como lateral derecho.

Con Alejandro Balde por debajo del nivel del año pasado y Joao Cancelo fuera de la que debería ser su posición natural, las puertas del lateral derecho se abren de par en par para Jules Koundé. El problema para el Barcelona es que el francés no quiere jugar en esa posición y solo lo aceptó el año pasado por el boquete que había en el sector derecho.

"Estoy contento porque estoy jugando en mi posición. El año pasado estuve de lateral derecho. Hablamos al final de temporada porque quería jugar en mi posición, donde me siento más cómodo y donde puedo aportar más. Nunca me negaré a jugar de lateral derecho", reveló el francés en la previa del encuentro contra el Shakhtar Donetsk. Xavi tiene que resolver el entuerto defensivo que lastra al Barça y amenaza con una crisis profunda a la entidad.