Así aprieta Camavinga a Ancelotti y el frente abierto del Real Madrid en el Clásico

Eduardo Camavinga pone a Carlo Ancelotti en una situación comprometida para el Clásico. El francés dio una exhibición de poderío físico como mediocentro en el partido contra el Sporting de Braga y el entrenador, que tiene un frente abierto en el lateral izquierdo, elogió el rendimiento del joven francés en la posición de pivote. Dio un recital por delante de la defensa, ubicado como el ancla del equipo. Con acciones de agresividad y contundencia para ganar balones divididos, ir al choque, meter la pierna, rascar y marcar territorio. En defensa, recordó al mejor Casemiro. Y en ataque generó peligro.

Este es el Camavinga que reclama jugar en su posición natural de centrocampista. Poderoso, dinámico y vertical. Cada oportunidad que le dan para hacer de muro por delante de los centrales la aprovecha y convence. No es peor que Tchouaméni. Se podría debatir quién de los dos franceses da más soluciones en un puesto clave, en el que hay que meter músculo, repartir juego y llegar al área. Camavinga es energía y va sobrado de fuerza. Tiene ida y vuelta. Tchouaméni es más posicional.

Pero esta no es la principal preocupación de Ancelotti. El entrenador afronta el primer Clásico de la temporada con dudas en la posición del lateral izquierdo. Fran García fue titular contra el Sporting de Braga y no acabó el partido. Por su banda llegó el gol del equipo portugués, lo que provocó que Ancelotti entrara en modo pánico. Fortaleció el costado izquierdo quitando a Fran, metió a Ferland Mendy y situó a Camavinga en esa zona para hacer más sólido al equipo.

Camavinga tiene la virtud de ser un futbolista versátil, al que puedes poner de pivote, lateral izquierdo y de interior. Esto es una bendición para Ancelotti, pero un problema para él. Ya ha dejado claro, más de una vez, que no le gusta ser lateral, pero si tiene que jugar por necesidad no le importa. Ancelotti habló de tirar de él en esta posición en caso de urgencia. Con el regreso de Fran García y la recuperación de Mendy parecía que este asunto estaba cerrado.

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No es así. Camavinga se ha marcado un partidazo en Braga como mediocentro y es una opción para ocupar el lateral izquierdo en el Clásico. La idea de Ancelotti es poner a los mejores jugadores y de Camavinga se fía, ya sea de pivote o lateral. Como defensa da solidez por su contundencia, velocidad y energía. Tiene, además, habilidad con la pelota y mucho descaro. Es una solución para sacar el balón jugado y meterle profundidad. Entre él y Mendy estará el puesto de lateral zurdo para el partido contra el Barcelona.

Juega en las citas claves

Lo que hace diferencial a Camavinga es su personalidad y fuerza física para imponerse en la zona del campo que le toque jugar. Lo que tiene que mejorar es su exceso de ímpetu, que le perjudica en acciones donde puede medir en el choque y le cuestan tarjetas. Esto tiene que ver con la experiencia y el oficio, pero lo que trae de serie el joven francés (20 años) es un talento competitivo superior. Un diamante de esos que todavía hay que seguir puliendo, con un enorme potencial y muy necesario para los entrenadores.

La prueba de la confianza que tiene Ancelotti en Camavinga es que ha recurrido a él en el once para los tres partidos más exigentes en lo que llevamos de la temporada. En el derbi le puso de mediocentro y contra el Girona y el Nápoles como lateral izquierdo. Va de un puesto a otro por las garantías que ofrece y las que se ganó la temporada pasada en partidos brillantes, como la goleada (0-4) en la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey contra el Barcelona en el Camp Nou.

Camavinga no es solo un futbolista que aporta vigor y que sobresale por su físico de atleta. A Ancelotti le encanta el carácter, la intensidad y la concentración para estar enchufado en el partido. No regala nada, muerde, se impone en los balones divididos. Todo esto le convierte en un jugador incómodo para los rivales. Son factores que le han ayudado a subir escalones en las preferencias del entrenador y le hacen dudar de su posición en el Clásico.

Ancelotti, con sus decisiones, no oculta que le preocupa la fragilidad defensiva del equipo por la banda izquierda. En el Clásico tiene la idea de poner un centro del campo con Tchouaméni, Kroos, Fede Valverde y Bellingham. No hay sitio para Camavinga y encontrarle un hueco en el once sería como lateral o sacrificar un delantero y jugar con cinco centrocampistas.