El mosqueo con Lemar en el Atlético de Madrid (el enchufado de Simeone)

El señalado en el Atlético de Madrid se llama Thomas Lemar. El fichaje de los 70 millones de euros no marca las diferencias ni transmite entusiasmo. Sigue desilusionando un jugador con el que Simeone quería modificar su estilo para subir la velocidad en ataque, ganar en profundidad y conseguir mayor contundencia. Son ya seis meses esperando para saber qué tiene de especial este futbolista que sobresalía en el Mónaco de Mbappé y que en el equipo rojiblanco acumula más partidos discretos que brillantes.

Simeone se empieza a quedar cada vez más solo en su apuesta por Lemar. El fichaje más caro de la historia del Atlético de Madrid no tiene enamorado a sus aficionados y en el club tampoco encuentran explicaciones al bajo rendimiento. Le señalan como uno de los culpables de la derrota en el derbi y dudan de que tenga que ser titular en el partido de ida contra la Juventus. El Cholo también empieza a flaquear. Le ha sustituido en los dos últimos encuentros por Vitolo con el objetivo de que el canario aportara la energía que no da el francés. Ni en ataque y tampoco en defensa. El juego de Lemar se apaga en el discurrir de los partidos. Es irrelevante y no se trata de un jugador cualquiera. El club se ha gastado una millonada y tiene privilegios en el once del Cholo.

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La desconfianza aparece a medida que se acerca la visita de la Juventus en la Champions. Para enfrentarse al conjunto de Cristiano Ronaldo, en el club señalan que deben tener colmillo y ser muy competitivos. Lemar no destaca por esto, precisamente. Da motivos para sentirse señalado por las críticas y como uno de los culpables en las dos últimas derrotas –Betis y Real Madrid–. Un futbolista que ha tenido más oportunidades que otros fichajes en su primera temporada y con el que Simeone se arma de paciencia. El entrenador insiste en ponerle en el once y demostrar que puede ofrecer algo diferente a lo que hay en la plantilla. Pero el mosqueo aparece cuando se comprueba que le falta contundencia ofensiva, atrevimiento, liderazgo y es frágil en defensa.

Necesita clases particulares

Esos motivos por los que Lemar no rompe a figura o tiene actuaciones destacadas, fuentes del Atlético no lo achacan a un proceso de adaptación, sino a una personalidad introvertida y tranquila en un estilo de juego –el ‘Cholismo'– que tiene más éxito con jugadores de fuerte carácter e intensidad. Lemar recibe habitualmente clases particulares de Simeone. El técnico le explica después de los entrenamientos cuál es la forma correcta de interpretar lo que necesita el equipo y cómo tiene que ser más práctico. Hay una frase que define lo que no le convence a Simeone de Lemar. “Debe entender que el fútbol no es sólo visual, sino que también debe ser concreto”, manifestó el Cholo en una entrevista a 'France Football'.

Se ha acabado el tiempo del aprendizaje y la adaptación para Lemar. Llegan los partidos en los que hay que resolver y elegir a los más competitivos. A esos jugadores que devuelvan al equipo la agresividad e intensidad que ha perdido. De Lemar se destaca en el Atleti que tiene mucho talento y que es, junto con Griezmann, el futbolista con más calidad, también que es muy buen chico. Callado, humilde, tranquilo y familiar. Que hace grupo y que Griezmann está pendiente de él. Pero sólo lleva dos goles esta temporada –Getafe y Sant Andreu– y no da muestras de haber encontrado su sitio en el césped.