El demoledor dato de Kylian Mbappé, el líder un PSG que asusta en la Champions

Si Old Trafford es el Teatro de los Sueños, Kylian Mbappé es el delantero soñado por la mayoría de directores deportivos del mundo. El francés lo tiene todo: es rápido, es potente, tiene gol, va sobrado de técnica, es joven... Y tiene una capacidad reservada a los más grandes: aparece cuando tiene que hacerlo. Este martes, en la ida de octavos de final de la Champions League entre el PSG y el Manchester United, sin Neymar ni Cavani, era una de esas ocasiones en las tenía que ser importante. Y lo fue. Marcó el segundo gol en la victoria por 0-2.

Mbappé brilla justo donde más le cuesta al resto de delanteros. Desde que debutara en la Champions League en la temporada 2016-2017, el francés ha marcado siete goles en los nueve partidos de eliminatorias que ha jugado. Y ha marcado en cuatro de los cinco partidos que ha jugado fuera de casa en esos cruces. Empezó metiendo un gol a domicilio al Manchester City. Siguió con un doblete en el Signal Iduna Park de Dortmund. Y cerró ese primer curso en la máxima competición europea marcando a la Juventus en Turín. La única ocasión en la que se ha quedado sin marcar fue hace un año en el Santiago Bernabéu, en el cruce de octavos de final contra el Real Madrid.

Este martes anotó el segundo gol en la victoria en Old Trafford, un triunfo que demuestra que quizá por primera vez desde que Qatar desembarcara en el Parque de los Príncipe el PSG tiene argumentos para aspirar al título. El cambio no tiene que ver con los jugadores, que forman una plantilla espléndida desde hace varias temporadas, sino con el entrenador. Casi tantos méritos como Mbappé y el resto de jugadores tuvo Thomas Tuchel en el triunfo en Manchester. Una de las mejores actuaciones colectivas en la Champions que se le recuerdan al PSG llevó el sello del entrenador alemán. Puso a Marquinhos sobre Pogba para desactivar al francés, resucitado tras la marcha de José Mourinho del United y la llegada de Solskjaer.

El United ha mejorado mucho sin el portugués, pero por lo visto este martes aún está lejos de los equipos que van a luchar por la Champions. Le falta calidad en el centro del campo y contundencia arriba. También evitar errores como el del primer gol. De Gea, que realizó varias paradas espectaculares, no salió en un córner, el marcador de Kimpembe falló en su marcaje. Resultado: gol a placer tras el saque de Di María.

El argentino, tan sobreexcitado en un Old Trafford en su contra como incisivo por la izquierda, le dio el pase a Mbappé para que marcara el segundo. En la siguiente jugada, el delantero estuvo a punto de marcar de nuevo en un mano a mano, pero De Gea lo evitó. Puede que al PSG le falten dos de las tres piezas de su tridente, pero con una, Mbappé, le ha bastado para ganar la United en Inglaterra y encarrilar el pase a cuartos.