Dormir menos de siete horas hace que ganes mucho más peso

Malas noticias para aquellos que llevan un tiempo intentando perder peso, pero a la vez no consiguen conciliar del todo bien el sueño. Un nuevo estudio publicado en el 'Journal of the Academy of Nutrition and Dietetics' ha demostrado que las personas que duermen menos de siete horas al día tienen una menor probabilidad de cumplir con sus objetivos de pérdida de peso. Y viceversa: aquellos que suelen comer más alimentos ricos en grasas, carbohidratos y azúcares también tienen más riesgo de padecer insomnio o no dormir lo suficiente.

Los investigadores analizaron los datos dietéticos y de hábitos del sueño de 20.000 adultos estadounidenses, encontrando una llamativa y determinante relación entre la falta crónica de sueño (concretamente dormir menos de siete horas) con ingerir alimentos y productos ricos en grasas, azúcares, carbohidratos y cafeína. En resumen, los científicos demostraron que la ingesta excesiva de calorías también está reñida con períodos esporádicos o crónicos de insomnio.

Una dieta cargada de grasas y azúcares no solo evita que puedas perder peso satisfactoriamente, sino también que no descanses como deberías

Para realizar el estudio, se tomaron los datos nutricionales emparejándolos con una encuesta sobre la cantidad de sueño promedio que obtenían los participantes durante los días laborables de una semana. Los resultados fueron claros: una dieta poco equilibrada o bien cargada de grasas y azúcares no solo evita que puedas perder peso satisfactoriamente, sino también que no descanses como deberías. De ahí la importancia de apostar por una dieta sana, no solo con vistas a mejorar el aspecto físico, sino la calidad del sueño en general, ya que dormir menos de lo recomendado (unas seis horas) acaba aumentando el riesgo de sufrir muerte prematura.

Los autores del estudio dividieron a los participantes en dos bloques según los resultados de las encuestas de hábitos de sueño: aquellos que dormían más de siete horas y aquellos cuyo tiempo de descanso estaba muy por debajo. Después, revisaron los datos de la Encuesta Nacional de Examen de Salud y Nutrición, lo que les ayudó a revisar los datos relativos a la dieta que seguían los encuestados. Así, el 95% de ellos tomaban al menos un 'snack' al día, teniendo en cuenta que este término alude al consumo de productos como refrescos, bebidas energéticas, patatas fritas, galletas o dulces.

Dormir bien, vivir más

La conclusión fue clara: aquellos que no cumplían con la cantidad de horas de sueño recomendada tenían más probabilidades de picar entre horas (ya fuera por la mañana o por la tarde) y, sobre todo, de consumir productos con una mayor carga calórica y poco valor nutricional, tal y como recoge 'The New York Post' en un artículo reciente. "Cumplir con las recomendaciones sanitarias en torno a las horas de sueño nos ayuda a satisfacer esa necesidad específica de descanso que viene tan bien a nuestra salud, pero también se relaciona con desarrollar hábitos poco saludables si no las cumplimos", asevera Christopher Taylor, profesor de la Ohio State University (OSU), dietista y autor principal del estudio.

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"Cuanto más tiempo estemos despiertos, más ocasiones tendremos para comer", prosigue Taylor. "Y, por la noche, esas calorías de más suelen provenir de 'snacks' y dulces que, al ingerirlas, estamos introduciendo elementos cuyo consumo se relaciona con una mayor probabilidad de desarrollar enfermedades crónicas, al contrario que si apostamos por cereales integrales, frutas y verduras".