El sorprendente alimento que esta mujer dejó de comer para adelgazar 12 kilos

Cuando se trata de adelgazar y perder peso, no todo vale. Muchas personas apuestan por las conocidas como dietas milagro, planes de adelgazamiento que prometen perder muchos kilos en poco tiempo, aunque suelen terminar provocando el conocido como efecto rebote: eso supone que, cuando se deja de seguir la dieta, se recupera todo el peso perdido e incluso más.

Por eso, siempre se recomienda ponerse en manos de expertos para que nos guíen en un proceso para perder peso. Suelen recomendar una mezcla de dieta y ejercicio como la mejor forma de adelgazar a largo plazo, pero lo cierto es que cada persona es diferente y lo que puede sentar bien a alguien, puede ser perjudicial para otra persona.

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Eso es, precisamente, lo que le ha pasado a una mujer india. Se llama Julietta John, tiene 30 años y mide 1,60 de altura. Llegó a pesar 73 kilos, una cantidad excesiva para su tamaño, aunque eso no significa que fuera obesa, sino que siempre había tenido sobrepeso. Sin embargo, cuando esa situación comenzó a afectar a su salud decidió ponerle freno y actuar.

Perder peso no fue fácil

El problema es que adelgazar no fue tan fácil como Julietta esperaba. Probó varios métodos para perder peso, pero no fue hasta que cambió su dieta y decidió llevar una alimentación baja en carbohidratos cuando funcionó. Ahí tomó la decisión de eliminar de su día a día dos de sus alimentos favoritos: el arroz y el roti, un pan sin levadura típico de India.

"La pérdida de peso es un 95% dieta y solo un 5% ejercicio"

Julietta asegura a Times of India que, para ella, "la pérdida de peso es un 95% dieta y solo un 5% ejercicio". Por eso, cuando comenzó a recibir insultos por su sobrepeso, decidió actuar buscando ayuda y, finalmente, comiendo mejor. Su sobrepeso había afectado a su salud, teniéndose que someter a dos operaciones de rodilla, lo que también le hizo engordar más.

Pero cuando la báscula marcó 73 kilos, cinco más de lo normal en ella, se plantó. Instauró el ayuno intermitente en su vida y comenzó a adelgazar poco a poco. En los primeros dos meses perdió entre 5 y 6 kilos, antes de unirse a "una comunidad 'Svasthya' que ayuda a las personas a perder peso de forma natural".

Con ellos adelgazó otros 5 kilos en un solo mes, gracias a que eliminó de su dieta el arroz y el pan roti, centrándose en los huevos, las verduras y comidas muy variadas. Al mismo tiempo comenzó a hacer deporte: primero con clases de baile y, más adelante, con pesas. Y aunque durante el confinamiento no pudo ir al gimnasio, se dedicó a entrenar en casa y a salir a correr por los alrededores.

Dieta equilibrada

Su dieta en un día normal durante su periodo de adelgazamiento comenzaba con un desayuno a base de una tortilla de 2 huevos con verduras salteadas. A la hora de comer elegía pollo o pescado a la plancha acompañado de verduras y, para tomar entre horas, escogía frutos secos, cuajadas y semillas de chía y girasol. Y como seguía el ayuno intermitente, se saltaba la cena.

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Julietta reconoce que desde que hizo este cambio de vida, rara vez ha comido alimentos poco saludables. Pero lo cierto es que durante ese proceso, nunca ha tenido que contar calorías, por lo que pudo volver a su dieta habitual sin problema. Ahora, se muere por el pollo frito con verduras, las cuajadas y los batidos de fresas naturales, pero se sigue cuidando de comer pocos carbohidratos.

Esta mujer asegura que "está científicamente comprobado que solo necesitamos 30 minutos de ejercicio al día", por lo que ella no le dedica más tiempo del estrictamente necesario. Eso sí, utiliza su propio truco para adelgazar que es hacer deporte una hora después de desayunar, de tal manera que le ayude a bajar lo que se ha comido a primera hora.

Siempre hace deporte una hora después de tomar el desayuno

Ahora, Julietta presta mucha atención al deporte y se ha decidido a trabajar en ese sector, lo que le ayuda a "mantener un estilo de vida saludable". Cuando comenzó este proceso, tenía un objetivo en mente y "estaba decidido a alcanzarlo". Y aunque al principio le costó conseguirlo, llegó un momento en el que fue capaz de perder casi 200 gramos diarios, logrando su fin. Ahora, es una mujer mucho más feliz que no volverá a sentirse mal por su físico.