Un robot chino impulsado por IA puede producir oxígeno respirable en Marte

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La NASA y compañías privadas como SpaceX tienen pensado llevar al ser humano a Marte lo antes posible. Eso sí, una misión de esas características se enfrentaría a multitud de desafíos, como sería el de transportar una reserva de oxígeno suficiente como para una estancia prolongada. Sin embargo, gracias a un nuevo robot creado por investigadores chinos y basado en el uso de inteligencia artificial (IA), la cantidad podría ser mucho menor. De hecho, solo haría falta la correspondiente al viaje de ida.

El estudio ha sido publicado por en la revista Nature Synthesis y en él se muestra la capacidad de este robot impulsado por IA para extraer el oxígeno del agua de Marte. No olvidemos que, aunque la atmósfera marciana apenas contiene un 0,2 % de oxígeno (el ser humano necesita en torno a un 18-19 % para vivir con normalidad), el planeta rojo alberga grandes depósitos de agua helada bajo su superficie.

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María del Pilar Díaz

La técnica necesaria para extraer el oxígeno del agua en la Tierra se conoce desde hace tiempo. Sin embargo, no es válida en Marte, ya que en este planeta no es posible encontrar los mismos catalizadores que causen la reacción química necesaria. Este es el motivo por el que los científicos de la Universidad de Ciencia y Tecnología de China liderados por el doctor Qing Zhu utilizaron restos de meteoritos marcianos analizados previamente con láser. Durante este proceso descubrieron que estaban formados de forma mayoritaria por magnesio, aluminio, manganeso, calcio, níquel y hierro.

El robot, gracias a su software de inteligencia artificial, logró desarrollar un catalizador adecuado a partir de estos seis elementos. Pero no solo eso. Su algoritmo también lo ajustó para que fuese efectivo a temperaturas de -37 grados centígrados, lo que sería indispensable en la superficie del planeta rojo. El conjunto del sistema logró producir 3,7 millones de moléculas de oxígeno a partir del agua, lo que demostró sobradamente su capacidad al respecto. Para hacernos una idea, el dispositivo llevó a cabo en seis semanas un trabajo que hubiese requerido 2.000 años a los seres humanos utilizando técnicas de cálculo y experimentación convencionales.