China va a probar su gran portaaviones Fujian, y no solo es una amenaza para EEUU

La Marina China está a punto de poner a prueba su nuevo portaaviones denominado CV-18 PLANS Fujian. Después de casi dos años de su botadura, el coloso de la clase Type 003 está más cerca de abandonar el abrigo del astillero en el que fue construido para dirigirse a las aguas del mar de la China Oriental donde llevará a cabo sus primeras navegaciones. Cuando entre en servicio, será un gran punto de inflexión en la zona. Primero, porque será el primer gran portaaviones chino con tecnología similar a los estadounidenses. Segundo, porque los países de la zona, como Japón, no se van a quedar de manos cruzadas.

Aunque la Marina de guerra china no suele utilizar las fechas emblemáticas, había ciertos rumores de que el pasado día 23 de abril, aprovechando el 75 aniversario de su creación, el Fujian podía comenzar sus pruebas de mar. Sin embargo, no fue así, el buque todavía está recibiendo algunos retoques. Fue construido en el astillero de Jiangnan sito en la isla de Changxing en la desembocadura del río Yangtsé, justo al norte del casco urbano de Shanghai.

Se espera que, en esta fase previa a su entrega a la Marina, se evalúen las capacidades dinámicas del buque, es decir, navegaciones a máxima velocidad, giros de máximo rendimiento, etcétera, e incluso, se realicen las primeras tomas y despegues en su cubierta de vuelo.

Desde hace varios años, su Marina está experimentando un crecimiento exponencial. Tanto es así que cada año introduce en servicio varios destructores y fragatas. A parte de estos buques de primera línea, también están construyendo buques auxiliares como los de investigación acústica Type 927 o de reabastecimiento en la mar Type 903A.

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Este esfuerzo, que comenzó con los presidentes Jiang Zenmin y Hu Jintao, está alcanzando su máxima plenitud con Xi Jinping. No obstante, dicho impulso también es responsabilidad del almirante Wu Shengli, uno de los mandos más brillantes de su fuerza naval.

Desde 2015, la Marina trabaja en la aplicación del concepto Defensa de Mares Cercanos y Protección de Mares Lejanos. Esto se ha traducido en aumentar el número de despliegues a mayor distancia, consolidando su presencia en la primera cadena de islas —desde las islas Kuriles hasta Singapur— y fortaleciéndola en el mar de Filipinas. Así, el país asiático ha incrementado el número de ejercicios y patrullas en las cercanías de Taiwán, ya sea junto a la Marina de la Federación Rusa como mediante grupos de combate liderados por sus dos portaaviones, el CV-16 Liaoning y el CV-17 Shandong.

Además, desde 2008, China envía grupos de superficie -normalmente compuestos por un destructor Type 052D, una fragata Type 054A y un buque de reabastecimiento Type 903A- al golfo de Adén para combatir la piratería. Aunque no es su cometido primario, estos despliegues también sirven para adiestrar a las dotaciones en navegaciones largas.

Ambos portaaviones tienen como misión principal proporcionar paraguas aéreo a la flota y llevar a cabo misiones de ataque a tierra como rol secundario. Se cree que serán indispensables en el caso de que la República Popular de China decida lanzarse sobre Taiwán, pudiendo perpetrar ataques contra el flanco este de la isla.

Actualmente, la Marina China se estructura en tres flotas, la Flota del Teatro Norte, la Flota del Teatro Este y la Flota del Teatro Sur. Aunque, el Ejército Popular de Liberación se divide militarmente en cinco Mandos de Teatro, solo los tres mencionados tienen flota. El Mando de Teatro Central, a pesar de estar bañado por las aguas del mar Amarillo, no tiene flota; puesto que esa zona es responsabilidad de la Flota del Teatro Norte. Se desconoce bajo qué Mando operará el CV-18 PLANS Fujian. Por descarte, quizá sea bajo el Mando de Teatro Este, pero es algo que está por confirmar, pues en esa zona no existe tanta infraestructura como en las otras dos regiones. Sus hermanos, el Liaoning y el Shandong, operan bajo el Mando de Teatro Norte y Sur, respectivamente. La base naval del CV-16 estáen Qingdao y la base del CV-17 enYulin, en la isla de Hainan.

Radiografía del Nuevo Portaaviones

Hasta ahora, los portaaviones chinos derivan de la clase Kuznetsov, de diseño soviético. Su principal característica es la prominente rampa de proa, también conocida como ski-jump, que permite reducir la distancia de despegue de los aviones.

No obstante, el nuevo Type 003 o CV-18 Fujian, a pesar de mantener cierta herencia en el diseño no contempla dicha rampa y en su lugar, se han incorporado tres catapultas electromagnéticas, que lanzarán rápidamente a los cazas. Gracias a esto, se espera que puedan generar un mayor número de salidas durante los despliegues. Según informes del Ministerio de Defensa japonés, el Liaoning alcanzó 20 salidas por día en diciembre de 2022, mientras que el Shandong superó las 60 por día en noviembre de 2023. Es razonable pensar que el Fujian será capaz de generar entre 100 y 150 salidas diarias.

En el apartado técnico, ronda las 80000 t a plena carga. Tiene una eslora de 320 m, una manga de 76 m y un calado de 11 m. Su propulsión está compuesta por turbinas de vapor con 8 calderas que arrojan una potencia de 160 MW. Cuenta con cuatro hélices, que podrían desarrollar una velocidad máxima de 30 nudos.

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Dispone de defensa antiaérea de punto, compuesta por cuatro contenedores de misiles antiaéreos HHQ-10 y cuatro cañones CIWS Type 1130. Dicha defensa está complementada por el ala aérea embarcada y los destructores y/o cruceros que forman el grupo de combate.

Con respecto a los hitos, su construcción comenzó en torno a 2017 y fue botado el 17 de junio de 2022. En noviembre de 2023 efectuó el primer lanzamiento de carga muerta para evaluar el correcto funcionamiento de la catapulta. Su entrada en servicio se espera para 2025, una vez concluya las pruebas de mar y supere la calificación operativa.

Al igual que sus hermanos, ha sido bautizado con el nombre de una provincia de la República Popular de China. No deja de ser curioso que se haya elegido justamente la que se encuentra al otro lado del estrecho de Taiwán.

Ala Aérea Embarcada

Las alas aéreas embarcadas de los portaaviones Liaoning y Shandong están compuestas por aviones de caza J-15, y helicópteros de alerta temprana Z-18J, antisubmarinos Z-18F, transporte VIP Z-18 y SAR Z-9S. El componente aéreo del CV-16 Liaoning está estacionado en Huangdicun, mientras que el del CV-17 Shandong está repartido entre Lingshui, donde se alojan los aviones, y Sanya, donde descansan los helicópteros.

Sin embargo, la del nuevo Fujian será diferente a la de sus dos predecesores. La incorporación de las catapultas electromagnéticas obligó a la Aviación Naval a modificar sus aviones. Para ello, el J-15 recibió un tren de aterrizaje reforzado. Además, la pata de morro cuenta con una barra para engancharse al carrito de la catapulta, encargado de impulsar el avión. Esta nueva versión se conoce como J-15T.

También se está trabajando en el desarrollo de otro caza, el J-35. Se trata del primer avión embarcado de baja observabilidad que entrará en servicio con la Aviación Naval.

Asimismo, para la misión de alerta temprana, la Marina tiene previsto incorporar el KJ-600, mucho más capaz que los helicópteros Z-18J. Se desconoce si la PLAN tiene pensado introducir un derivado del KJ-600 para transporte de piezas, similar al C-2 Greyhound, en proceso de sustitución por CMV-22B Osprey. Todos estos nuevos aviones fueron probados en Huangdicun, donde hay una catapulta electromagnética instalada en tierra.

Con respecto al resto del ala aérea, es decir, los helicópteros SAR y ASW, es bastante probable que dichas misiones sigan recayendo en los Z-9 y Z-18F, respectivamente. A fecha de hoy, no se sabe dónde estará basada dicha ala aérea embarcada. Una de las posibilidades es una nueva base aérea en construcción en Dachang.

EEUU y el Indopacífico

Estados Unidos también contempla esta nueva tecnología de catapulta electromagnética en sus últimos portaaviones, los de la clase Gerald R. Ford. Los buques de la clase Nimitz y anteriores contaban con catapultas de vapor, mucho menos eficientes. Al igual que los chinos, cuentan con sistemas de autodefensa, en concreto, dos lanzadores de misiles ESSM, dos lanzadores de misiles RAM, tres cañones CIWS Phalanx, 4 ametralladoras Mk 38 de 25 mm y 4 ametralladoras de calibre 50.

Sin duda, las naves estadounidenses todavía están un paso por delante de las chinas. Por comparar, durante la evaluación operativa del CVN-78 USS Gerald R. Ford, su dotación efectuó 170 lanzamientos y 175 aterrizajes en un lapso de 8 horas y media.

Actualmente, tienen diez portaaviones de la clase Nimitz en servicio y uno de la clase Gerald R. Ford. Según el fleet tracker de USNI News, hay dos grupos de combate (Reagan y Theodore Roosevelt) y uno anfibio (America) en la región.

Con respecto al resto de vecinos, Japón está modificando sus buques de la clase Izumo para embarcar a los potentes F-35B. Asimismo, India operó dos cubiertas de manera conjunta en las maniobras MILAN 2024. Una asignatura pendiente de China, pues todavía no hay constancia de que lo hayan llevado a cabo.

En la edición de 2023 de la feria MADEX, el astillero surcoreano HD Hyundai Heavy Industries (HHI) desveló la última iteración del programa CVX. Este portaaviones tendría una eslora de 270 m y un desplazamiento de unas 70.000 toneladas. Según la maqueta contaría con catapultas electromagnéticas y cables para frenado de los aviones embarcados. Sin embargo, apenas hubo referencias en el último documento publicado por el Ministerio de Defensa Nacional de Corea del Sur.

Futuro

Sin duda, la construcción del Type 003 está siendo todo un reto para el país asiático. Aunque sus astilleros producen los mayores barcos civiles del mundo, en el terreno militar, el CV-18 Fujian es el buque más grande y complejo que han construido hasta la fecha. Es muy probable que debido a la dificultad mencionada, las pruebas de mar se alarguen algo más de lo esperado.

El siguiente hito, en un horizonte temporal de cinco o diez años, es, indudablemente, la construcción de una serie de portaaviones con propulsión nuclear. Pues, a diferencia de los anfibios, cruceros, destructores, fragatas o corbetas, China todavía no ha construido más de un ejemplar por clase. Se cree que hasta que no consigan un diseño satisfactorio con propulsión nuclear no lo harán. Por lo pronto, el pasado mes de marzo, el Comisario Político de la Marina, Yuan Huazhi, confirmó, al ser preguntado por medios de Hong Kong durante las Dos Conferencias, que el próximo portaaviones, el Type 004, está en la mesa de diseño y pronto se dará a conocer el tipo de propulsión escogido.