Audi RS3, un compacto muy deportivo con la mejor motricidad para rodar en circuito
Emplea un innovador sistema de tracción a las cuatro ruedas con dos embragues en el eje trasero que permiten una conducción aún más radical y un potente cinco cilindros de 400 CV
Audi presenta a través de internet su nuevo deportivo RS3, un vehículo que busca posicionarse como el referente de deportividad en el segmento compacto. Para ello cuenta con un potente motor de 400 caballos y con un sofisticado sistema de doble diferencial trasero con el que quiere posicionarse por delante del Mercedes Clase A AMG y el BMW M2 CS. Su precio en España 77.500 euros en el caso del RS3 Sportback y de 78.600 euros para el Sedan. Las primeras entregas serán en otoño
Audi ha hecho un gran esfuerzo para el lanzamiento de este nuevo RS3, un vehículo que encarna la máxima deportividad en el segmento compacto. Por ello también es el modelo más accesible de la gama RS, pero con el mismo nivel de prestaciones y de exclusividad de sus hermanos mayores. Sobre todo por el desarrollo de un nuevo sistema de transmisión que le convierte en un vehículo único en el mercado.
Se trata del repartidor de par RS, situado en el eje trasero, que permite repartir la potencia directamente a una rueda o la otra en función de las circunstancias. Con ello también permite una conducción más radical. Incluyendo la opción 'drifting'. Es, por decirlo de una manera sencilla, el paso siguiente al diferencial autoblocante empleado en competición o al sistema 'torque vectoring' usado ya por muchos modelos. Este es un sistema aún más sofisticado. A la espera de poder probarlo de verdad, sin duda el sistema pinta muy bien.
Pero más allá de este innovador sistema de transmisión, que se puede considerar una evolución aún más deportiva, eficaz y sofisticada del concepto de la tracción Quattro de Audi que ya lleva 30 años en el mercado, el nuevo RS3 ofrece muchas más cosas. Para comenzar su diseño exterior, muy diferente al del modelo compacto de Audi o a su versión de carrocería berlina.
En este caso, su estética está marcada por unos pasos de rueda ensanchados para permitir mayor anchura de vías y proporcionar con ello una mayor capacidad de tracción y una mejor estabilidad. También su carrocería ha sido rebajada en altura para poder rodar más pegado al suelo. Su frontal también es totalmente nuevo, con una parrilla única en la gama del Audi A3, bastante más ancha. Sus llantas específicas de 19 pulgadas y otros detalles estéticos le proporcionan un aspecto muy diferente al Audi A3.
Este modelo se ofrecerá desde el principio con las dos variantes de carrocería, el Sportback, la versión de tipo compacto, y con la opción de tipo berlina, con maletero separado. En cualquier caso, se trata de la tercera generación del RS3 Sportback y la segunda del RS3 Sedán.
Interior
De la misma forma, también su interior ha sido completamente modificado para ofrecer un interior en el que la deportividad manda. Todo en su cuadro de instrumentos se adapta a esta variante, con nueva información disponible para el usuario, que siempre buscará una conducción mucho más radical. También sus asientos tienen un estilo muy deportivo y ofrecen una perfecta sujeción del cuerpo, y le proporcionan ese aspecto de coche de carreras. Además, cuenta con inserciones de color en algunas zonas del puesto de conducción y de los asientos. En función de la versión elegida pueden ser de color rojo, en el Sportback, o de color verde en el sedán.
Un detalle importante es el volante exclusivo de estas versiones. De serie es un volante achatado en su parte inferior y opcionalmente se ofrece uno redondo, más pequeño, pero en ambos casos destaca por incluir en el lado derecho el botón RS. Con este selector se activan de forma inmediata los modos de conducción RS Performance o RS Individual que permiten una conducción aún más radical.
Pero más allá de su estética muy llamativa, es un coche en el que las prestaciones son sin duda su punto clave, y para ello cuenta con un potente motor. Se trata de un cinco cilindros que proporciona 400 caballos y una cifra de par de 500 Nm. Este par máximo está disponible desde solo 2.200 vueltas. Con ello, permite una capacidad de aceleración realmente impresionante, de 3,8 segundos para pasar de 0 a 100 km/h. Y por lo que respecta a su velocidad máxima, está limitada a 290 km/h con el kit opcional RS o de serie a 250 km/h.
Sin duda la clave de este modelo es su sistema de tracción, de momento único en el mercado. Explicado de manera lo más sencilla posible, a ese diferencial trasero llega el par desde el motor y a continuación hay dos embragues, uno para cada una de las ruedas, estando ambos conectados electrónicamente. Normalmente, en línea recta reparte el 50% sobre cada rueda. Pero cuando se producen pérdidas de tracción, o en una curva, un embrague se abre más y el otro se cierra con lo que el reparto del par es completamente variable y siempre el necesario para poder seguir avanzando con normalidad. Es como un autoblocante pero con un control máximo.
Con este sistema se pueden arañar décimas en cada curva cuando estamos rodando en un circuito. Pero también es importante para la seguridad el uso diario. En este caso, si rodamos por una carretera normal y aparece una zona con agua o con peor adherencia, automáticamente los embragues gestionarán ese reparto del par entre ambas ruedas, proporcionando una seguridad adicional. El resultado será un comportamiento dinámico excepcional, superior al que permite el sistema más utilizado, el 'torque vectoring'.
Dos diferenciales
Los técnicos de la marca aseguran que gracias a este 'torque splitter' se elimina completamente tanto el subviraje como el sobreviraje. Este 'repartidor de par' es un equipo muy sofisticado que se añade al sistema de tracción Quattro de Audi. Y lo más importante es que no requiere ninguna acción especial por parte del conductor, más allá de seleccionar el modo de conducción óptimo para cada circunstancia.
Lógicamente, la gestión del reparto de par depende siempre del modo de conducción seleccionado a través del selector de modos de conducción. En este caso, a los modos tradicionales del sistema, de Confort, Normal, Dynamic e Individual, se suman dos modos de conducción al límite, los RS Performance y RS Individual.
Cada uno de los embragues multidisco de esa transmisión trasera cuenta con su propia unidad de control, que utiliza los datos de los sensores de velocidad del control de estabilidad para controlar la velocidad de giro de las ruedas. Gracias a este reparto activo, que se ajusta de forma inmediata a las circunstancias, el coche se inscribe en la trayectoria de la curva y sigue con la máxima precisión el ángulo marcado por su conductor. También permite conseguir una mayor capacidad de aceleración al salir de la curva.
Para garantizar la máxima seguridad también su equipo de frenos ha sido reforzado al máximo. El nuevo RS3 dispone de serie de un equipo de frenos con pinzas de seis pistones, pero opcionalmente para el eje delantero se ofrecen unos cerámicos. Este equipo opcional no solo mejora la capacidad de frenada y sobre todo su aguante al sobrecalentamiento, sino que también es más ligero. Estos frenos suponen una rebaja de 10 kilos respecto a los de acero.
Audi abrirá los pedidos para el nuevo RS3 en sus dos variantes de carrocería a mediados del próximo mes de agosto, mientras que las primeras unidades llegarán a los concesionarios en el mes de octubre. Ambos modelos llegarán de manera simultánea, y en cuanto a sus precios, el Sportback cuesta 77.500 euros mientras que el Sedan sube hasta 78.600 euros. A cambio tendremos el que probablemente sea el modelo compacto más eficaz para rodar en un circuito... con el permiso del Mercedes Clase A AMG o el BMW M2 CS. Y también para conducir con la máxima seguridad en carretera.
Audi presenta a través de internet su nuevo deportivo RS3, un vehículo que busca posicionarse como el referente de deportividad en el segmento compacto. Para ello cuenta con un potente motor de 400 caballos y con un sofisticado sistema de doble diferencial trasero con el que quiere posicionarse por delante del Mercedes Clase A AMG y el BMW M2 CS. Su precio en España 77.500 euros en el caso del RS3 Sportback y de 78.600 euros para el Sedan. Las primeras entregas serán en otoño