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La nueva vida del rey del bitcoin: del Caribe a pagar en la cárcel con conservas de caballa
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La nueva vida del rey del bitcoin: del Caribe a pagar en la cárcel con conservas de caballa

Sam Bankman-Fried, el fundador de FTX, aprende que la caballa es moneda de cambio en prisión y comparte dormitorio con otros acusados de alto perfil

Foto: Dos personas compran bitcoins en un evento. (Getty/Marco Bello)
Dos personas compran bitcoins en un evento. (Getty/Marco Bello)
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Sam Bankman-Fried, condenado por fraude en el hundimiento de FTX, ha cambiado las criptomonedas por una nueva moneda: la caballa.

El caído rey de las criptomonedas, que se encuentra en el Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn a la espera de una sentencia por siete delitos graves, ha aprendido los fundamentos de la economía carcelaria compartiendo dormitorio con un expresidente hondureño a la espera de juicio y un expolicía mexicano recientemente condenado, según personas familiarizadas con el asunto.

La caballa ha sustituido a los cigarrillos como moneda de cambio en las cárceles federales después de que los funcionarios prohibieran fumar, y los reclusos a veces utilizan bolsas de pescado en conserva compradas en un economato para pagar los servicios que se prestan unos a otros. Bankman-Fried entregó algunas bolsas de macks (del inglés mackerel, caballa), como se les conoce, a un compañero de prisión a cambio de que, antes del juicio, le cortara su característico pelo rizado, según una de las personas consultadas.

El fundador de FTX ha estado en la cárcel desde que un juez federal revocó su libertad bajo fianza en agosto, tras encontrar una causa probable de que intentara intimidar a los testigos, una afirmación que Bankman-Fried negó. A principios de este mes, un jurado tardó solo unas horas en declararle culpable de robar miles de millones de dólares a clientes de FTX y de estafar a inversores y prestamistas. Está previsto que sea sentenciado el 28 de marzo, tras lo cual se trasladará a una prisión federal para cumplir su condena.

Foto: Sam Bankman-Fried. (Reuters/Eduardo Muñoz)

El centro de detención de Brooklyn está muy lejos del ático de 30 millones de dólares en las Bahamas que Bankman-Fried consideraba su hogar. Se le permiten visitas de personas que no sean abogados una vez a la semana y tiene acceso a un ordenador portátil especializado que le permite revisar material jurídico, dijo la persona familiarizada con el asunto. Según esta fuente, él y otros reclusos pueden utilizar los ordenadores en una sala con mesas separadas por tabiques de plástico. Aunque los días en que Bankman-Fried invertía miles de millones de dólares en nuevas empresas y comerciaba con tokens digitales han quedado atrás, ha estado dando consejos sobre criptomonedas a los guardias.

Un portavoz de la Oficina Federal de Prisiones de EEUU declaró que la oficina no podía hacer comentarios sobre las condiciones de cualquier individuo bajo su custodia por razones de privacidad y seguridad. La oficina hace todo lo posible para garantizar la seguridad de los reclusos, al tiempo que proporciona un entorno seguro y humano, dijo. "Sam lo está haciendo lo mejor que puede dadas las circunstancias", declaró Mark Botnick, portavoz de Bankman-Fried.

En el juicio, Bankman-Fried testificó que, aunque lamentaba no haber tenido una mejor gestión de riesgos en el criptointercambio, no cometió fraude. Sus abogados han dicho que Bankman-Fried tiene intención de apelar la condena, que podría llevar a una sentencia de prisión de décadas.

Foto: Sam Bankman-Fried podría pasar décadas en prisión (EFE/Peter Foley)

Una vez que Bankman-Fried sea trasladado a una prisión federal para cumplir su condena, es probable que tenga más libertad de movimiento, además de un mejor acceso a la programación educativa y la recreación, explica el consultor de prisiones Bill Baroni, un abogado que fue condenado por su papel en el escándalo Bridgegate de Nueva Jersey, en el que asociados del exgobernador Chris Christie fueron acusados de crear atascos de tráfico para la retribución política. "Cuando sea condenado, su vida mejorará", afirma Baroni, cuya condena por fraude fue posteriormente anulada por el Tribunal Supremo. "Ya no estará en el mismo centro que la gente más violenta".

Otros reclusos de guante blanco han cumplido condena en centros que están cerca de sus familias u ofrecen más programación. La fundadora de Theranos, Elizabeth Holmes, que fue condenada por estafar a los inversores de la empresa de análisis de sangre, se encuentra actualmente en el campo penitenciario de mínima seguridad solo para mujeres de Bryan, Texas, ubicado entre Austin y Houston.

El centro de detención de Brooklyn ha sido criticado por los abogados defensores y por el sindicato que representa a los guardias de prisiones por sus malas condiciones y por una grave falta de personal que se ha prolongado durante años. El portavoz de la Oficina Federal de Prisiones declaró que mantener las instituciones con todo su personal es una prioridad clave para la oficina.

Foto: El fundador de FTX, Sam Bankman-Fried. (Reuters/Eduardo Munoz)

Personas familiarizadas con el asunto afirman que entre los compañeros de unidad de Bankman-Fried se encuentra Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública de México, que fue condenado a principios de este año por ayudar al poderoso cártel de Sinaloa a introducir más de 50 toneladas de cocaína en EEUU. García Luna está a la espera de sentencia. Otro recluso de la unidad es el expresidente de Honduras Juan Orlando Hernández, que está a la espera de juicio por cargos federales de tráfico de drogas y armas de fuego. Hernández se declaró inocente tras ser extraditado a Estados Unidos en 2022.

El abogado defensor de Hernández, Raymond Colon, cuenta que su cliente y Bankman-Fried han mantenido conversaciones cordiales en la cárcel. Colon explica que la escasez de personal puede conducir a la cancelación de las horas de visita, pero Hernández generalmente no se queja de las condiciones. "Desde luego, no es un hotel", dice Colon.

Al principio, Bankman-Fried subsistía a base de mantequilla de cacahuete, pan y agua, porque la cárcel no se adaptaba a su dieta vegana, según declaró uno de sus abogados en una comparecencia ante el tribunal a finales de agosto. También tuvo problemas para conseguir la dosis adecuada de Adderall, según el abogado.

Foto: Imagen: EC Diseño.
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Su acceso a la comida y a la medicación —que toma para el trastorno por déficit de atención con hiperactividadse ha resuelto desde entonces. Recibe comida vegetariana en la cárcel, según una persona familiarizada con el asunto.

Los reclusos del centro de detención suelen estar confinados en su unidad y no se mueven libremente por las instalaciones. En lugar de comer en una cafetería común, como en algunas prisiones, las comidas se entregan en unidades individuales, señala Christine Dynan, consultora de prisiones que trabajó anteriormente en el centro y en otras instalaciones federales.

Muchos reclusos prefieren comprar alimentos, así como ropa y artículos de aseo, a través del economato de la cárcel de Brooklyn. Una lista de artículos del economato muestra que la mantequilla de cacahuete cuesta 4,15 dólares; un par de zapatillas deportivas, 79,95 dólares; y un reproductor MP3, 88,40 dólares. Una bolsa de filetes de caballa cuesta 1,30 dólares, un 30% más que en 2020. Baroni, el consultor de negocios penitenciarios, comenta que, cuando Bankman-Fried se traslade a una prisión federal, es probable que lleve consigo sus paquetes de caballa. Baroni asegura que pagó cuatro dólares por su propio corte de pelo mientras estaba en prisión. "El sistema de la moneda mack es mucho más estable que el cripto".

*Contenido con licencia de The Wall Street Journal

Sam Bankman-Fried, condenado por fraude en el hundimiento de FTX, ha cambiado las criptomonedas por una nueva moneda: la caballa.

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