Los inversores apuestan por Pink Floyd, Bowie y batallas judiciales para huir de la recesión

Los inversores de renta variable están buscando rendimientos en los rincones más recónditos del mercado mientras se pararan para la posible recesión que vaticinan algunos expertos.

Según calcula Bloomberg, apostar por el trabajo pasado de los músicos o financiar demandas, con la esperanza de obtener ganancias de las disputas en los tribunales, pude ofrecer rendimientos de entre el 10 y el 14%. Estas conclusiones llegan del estudio que ha realizado Rede Partners que, encuestando a más de 50 inversores británicos, consideró las finanzas especializadas como el campo más interesante para los inversores de crédito privado.

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Según los autores del documento, "la protección asimétrica a la baja y una correlación reducida con rendimientos más amplios del mercado", son los ingredientes que hacen a esa clase de activos atractiva.

En una situación donde el fantasma de la recesión asoma cada día en titulares, telediarios y artículos de los medios y expertos, los inversores tratan de refugiarse con activos que no 'siguen al rebaño'. Así, toman fuerza las regalías farmacéuticas, los derechos de flujos de efectivo futuros de los medicamentos o las musicales, poseer efectivamente los derechos de las canciones y beneficiarse de las ventas o la cantidad de veces que las canciones se transmiten en línea.

David Bowie o Pink Floyd

Previendo los rendimientos futuros que ofrecería su trabajo, la conocida estrella del rock David Bowie emitió valores de sus composiciones hace 25 años. Desafortunadamente, el 'crack' de las tiendas de discos en los 2000 y el nacimiento de internet y de la piratería musical, hizo que el valor de sus canciones cayera en picado. Sin embargo, con la irrupción de plataformas de streaming como Spotify, se está revalorizando y alcanzando cotas de mercado deseables para los inversores.

Esto lo conoce de primera mano el fondo Blackstone, que ha decidido apostar por el mercado apostando por algunas canciones de Pink Floyd. De hecho, aunque las negociaciones se encuentran en fase preliminar, el grupo musical confesó que el fondo ya había puesto una cantidad sobre la mesa para su catálogo valorado en más de 500 millones de dólares. Aun así, según informó Pink Floyd a la prensa: "Se trata de un primer contacto y todavía hay un largo proceso por delante".

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Para esta inversión, Blackstone se habría aliado con los estudios Hipgnosis que están dirigidos por Merck Mercurandis, exmánager de Elton John.

Así, los conocidos músicos estarían deseando vender su catálogo, puesto que Es más fácil que hereden el dinero a que tengan que lidiar durante años con difíciles temas legales para gestionar estos derechos de autor.

Esta maniobra de venta de catálogos hacia inversores que piensan sacar rendimiento futuro de la obra de los músicos ya la han puesto en práctica anteriormente iconos como Bob Dylan, Bruce Springsteen o Neil Young.