El dueño de Loro Parque compra el campus de la Universidad Europea en Alcobendas

A pocos días para tomarse las uvas, el grupo frances Primonial REIM ha cerrado la venta del campus de la Universidad Europea en Alcobendas, municipio madrileño que acoge a elitistas urbanizaciones como La Moraleja y que presume de tener una de las mayores rentas per cápita de España.

El comprador es el family office de Wolfgang Kiessling, dueño del famoso Loro Parque de Puerto de la Cruz, en Tenerife. Con una fortuna estimada en 350 millones de euros por la revista Forbes, hace tres años, el empresario el hispano-alemán constituyó la sociedad Activos Inmobiliarios Familia Kiessling, para canalizar sus inversiones en el sector.

El inmueble ha sido adquirido por algo más de 37 millones de euros y la operación ha estado asesorada por BNP Paribas Real Estate y CBRE. Con esta transacción, se ha puesto el broche de oro al boom que vive el sector educativo en nuestro país, y que este campus refleja perfectamente, al haber cambiado de manos dos veces en apenas cinco años.

Fue en 2018 cuando Primonial adquirió este complejo educativo a Montepino, que lo había desarrollado cuatro años antes, específicamente, para atender las necesidades de la Universidad Europea. A pesar de haber sido promovido hace casi una década, el edificio se entregó ya entonces con la certificación Silver LEED.

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Ruth Ugalde Infografía: Rocío Márquez

El complejo educativo cuenta con 14.896 metros cuadrados, distribuidos en cuatro plantas, un semisótano y dos sótanos con 477 plazas de aparcamiento. Destinado a posgrados y grados de Empresa, Derecho, Criminología, Relaciones Internacionales, Ingeniería, Diseño y Arquitectura, entre otras carreras. En las 54 aulas de este edificio, también imparte clases la escuela de negocios IEDE Business & Law School. En total, el campus de Alcobendas tiene capacidad para más de 2.000 estudiantes.

El sector educativo se está convirtiendo en uno de los principales protagonistas del sector inmobiliario, con Madrid como clara locomotora, gracias a su creciente atractivo para estudiantes de todo el mundo. Un contexto que ha desatado un auténtico boom de entidades educativas privadas interesadas en instalarse en el corazón de la capital.

El caso más paradigmático, probablemente, sea el desembarco del Instituto de Empresa (IE) en Torre Caleido, uno de los cinco rascacielos levantados al final del paseo de la Castellana, en el nuevo distrito financiero de la ciudad, mientras que Cunef ha protagonizado el otro gran movimiento, al haber alquilado a Merlin Properties el parque empresarial Churruca, junto a Ciudad Universitaria, para abrir su nuevo campus. Pero ejemplos hay muchos, y cada vez más.

Solo en los últimos tres años, la escuela de negocios EAE ha alquilado 1.050 metros cuadrados en Príncipe de Vergara; Global Alumni Education se ha instalado en Acanto 11-13; ESCP ha dado un primer mordisco con el alquiler de 2.856 metros cuadrados en María de Molina 4, mientras sigue buscando espacio para un gran campus; Schiller University ha abierto en Recoletos 35; la Universidad Alfonso X El Sabio se ha quedado Arapiles 13 y UNIE (Grupo Planeta), el vecino Arapiles 14; la Universidad Camilo José Cela ha desembarcado en el edificio KOI, junto a Cuzco, y ESNE, en el número 44 de la calle Colombia.

También la Universidad Pontificia Comillas ha sabido jugar sus cartas y ha comprado a Brookfield el edificio de oficinas que anexo al Hotel Princesa, donde el fondo canadiense había proyectado hacer medio centenar de apartahoteles de lujo, y que ha terminado vendido a la institución de los jesuitas para ampliar el campus de Icade que tienen en la zona, previo pago de 44 millones de euros.

Rally de fin de año

La compra del campus de Alcobendas de la Universidad Europea, no solo pone el broche de oro al sector educativo, sino que también confirma el rally de fin de año que, tras un ejercicio en barbecho, está experimentando el sector. Solo en el último mes, BNP Paribas Real Estate ha asesorado la venta de un edificio de oficinas de Generalli en Fuencarral a un family office, la compra de Ibervallés a Allianz de un inmueble en el corazón financiero de Madrid, y esta transacción de la Universidad Europea, operaciones que se suman a la venta del edificio de Colonial en Arroyo de la Vega a Inmocaixa.

Según los cálculos de CBRE, el mercado ha registrado en los nueve primeros meses del año una inversión de 7.513 millones de euros, lo que supone un descenso del 49% respecto al mismo periodo del año anterior, caída que empezó a corregir ya en el tercer trimestre, cuando la inversión aumentó un ligero 6%, hasta 2.280 millones. En este contexto, Madrid brilla con luz propia, al haber acaparado el 52% de la inversión, seguida de Valencia (9%), Málaga (7%) y Barcelona (7%).

Esta operación confirma el rally de fin de año con ventas como el edificio de Generalli en Fuencarral o el de Allianz a Ibervallés en el distrito financiero

Aunque Living y hoteles han sido los grandes protagonistas, al haber atraído el grueso del volumen inversor, sus números también están condicionados por dos grandes operaciones: la compra de la cartera de Vía Célere por parte de Greystar y los 24 hoteles adquiridos por ADIA, el fondo soberano de Abu Dabi, a Meliá. En oficinas, en cambio, el mercado ha ido retomando el pulso en la recta final del ejercicio, como reflejan importantes operaciones como la compra, por parte de Kutxabank, de un edificio en el barrio de Salamanca para acoger su nuevo cuartel general en Madrid.

Además, el mercado está reactivándose con operaciones de cambio de uso, como la compra por parte de Acciona de un complejo de oficinas en Fuencarral a Mapfre e Iberdrola, que convertiá en viviendas, o la familia Capriles, que también transformará una antigua sede corporativa en la zona de Arturo Soria en residencial de lujo.