Vuelos Canarias-Península: las islas temen una subida de precios tras la compra de Air Europa

La distancia entre las islas y el punto más cercano a la península supera los 1.300 kilómetros, requiere dos horas de vuelo y pagar un billete que en 2022 se encareció de media un 18% con repuntes del 45% en algunas rutas y fechas. Pero todo puede empeorar en la conectividad: se extiende la preocupación ante la compra de Air Europa por IAG, matriz de Iberia, y también por la privatización de las torres de control de los principales aeropuertos canarios.

Las alarmas han saltado. Asociaciones de consumidores, empresarios turísticos y gobierno de Canarias alertan de una posible posición dominante tras la integración de Air Europa en el grupo IAG con graves consecuencias para la conectividad del archipiélago: subida de precios y disminución de la oferta.

No lo ven así desde las compañías implicadas que aseguran todo lo contrario. Vaticinan que, en general, habrá más oportunidades de elección, una mejora de los horarios y mayor frecuencia de vuelos, aunque habrá que esperar a las condiciones que impondrán las autoridades europeas de la competencia para dar su visto bueno a la compra.

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Y esa es la esperanza a la que se aferran en las islas para evitar la concentración de la mayoría de las plazas aéreas en manos de IAG. Se espera que Bruselas obligue a las compañías del grupo que operan en el archipiélago a ceder algunos slots (derechos de vuelos) para distribuirlos entre otras empresas. Ryanair, ávida de ampliar su negocio, ya se ha mostrado dispuesta a ocuparlos.

IAG concentraría el 73% de las plazas ofertadas

Si a las plazas ofertadas para la próxima temporada de verano (abril-octubre) de Iberia, Iberia Express y Vueling, compañías del grupo IAG, se suman a las que dispone Air Europa, la concentración justifica las alarmas. Ascenderían a 2.588.229, lo que supone el 73% del total del tráfico aéreo entre Canarias y el resto de España, una cifra que avala la vigilancia que pide el gobierno regional sobre el proceso de absorción en marcha.

De todas las empresas que operan las rutas con Canarias, Vueling lidera el ranking con cerca de 1,3 millones de asientos, seguido por Iberia Express con unos 866.000, Ryanair con algo más de 738.000, Air Europa con cerca de 400.000 y Binter Canarias en torno a las 180.000. Cierran el mercado Iberia y Volotea al contabilizar conjuntamente 62.000 plazas.

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Con este panorama, aumenta el temor a una subida de tarifas del medio de transporte que utilizan los canarios para desplazarse al resto del país y que no ha parado de crecer en los últimos años. Lo ha constatado la CNMC, la AIReF y el ministerio de Transportes después de ampliarse en 2018 la subvención del 50% al 75% a los vuelos de los residentes en las islas.

Se trata de un descuento que trata de compensar la lejanía y situar a sus habitantes en igualdad de condiciones al resto de españoles que disponen de otros medios alternativos para sus viajes. Por esta razón, los presupuestos estatales consignaron para este año 427 millones de euros por este concepto que incluye también los vuelos interinsulares.

En la ampliación de esta ayuda es donde está la clave del alza de precios. El principal argumento esgrimido por varios expertos, entre ellos el economista Ginés de Rus, es que cuanto más alto es el precio, mayor es la subvención, por lo que esta praxis puede estar incentivando el incremento de las tarifas.

Temor por el aumento de las tarifas: cuanto más alto es el precio, mayor es la subvención

Si el coste medio de un billete ida y vuelta para un residente es de unos 100 euros, la aerolínea ingresa un total de 400 euros gracias a la subvención por lo que, en opinión del economista, debería sustituirse la fórmula del porcentaje por una compensación fija.

El problema se agudiza en determinadas épocas del año como vacaciones o puentes. En esas fechas, las compañías incrementan sus precios hasta los 800 euros. Además de aumentar la tarifa a los residentes en las islas, supone una cantidad elevada para los que no tienen esa condición encareciendo así el destino turístico, una de las quejas de los empresarios del sector.

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A esta situación ya complicada se añade el recelo ante la compra de Air Europa y que puede convertir a Canarias en un mercado sin apenas competencia donde sus residentes, salvando la lenta vía marítima, no tienen otra forma de desplazarse al resto del territorio español.

Topar los precios con la Obligación de Servicio Público

Buscar fórmulas para limitar las tarifas es lo que ha llevado al gobierno regional a acordar con el ministerio una experiencia piloto que se pondrá en marcha antes del verano: declarar una de las rutas como OSP. De esta forma, quedarían reguladas y si el resultado es positivo, la intención es solicitar el beneplácito de la Comisión Europea para aplicarlo a otros trayectos.

La patronal aérea, a través de la Asociación de Líneas Aéreas, no está de acuerdo. Considera que se trata de una intervención pública en el mercado que no está justificada ni sería autorizada por Bruselas. Tampoco cree que, de forma generalizada, los precios sean excesivos y que toparlos supondría reducir la oferta de billetes baratos perjudicando así a la conectividad.

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Al margen de la declaración de OSP, hay otras propuestas oficiales para controlar las tarifas aéreas. La AIRef también sugiere establecer una cuantía fija para cada ruta, en lugar de la rebaja actual del 75%, y plantea una distribución más igualitaria de la subvención en función de los niveles de renta de cada pasajero.

Por si faltara algo en la trascendental conectividad del archipiélago, otro motivo de preocupación es el inicio de los trámites para adjudicar a empresas privadas la gestión de los aeropuertos de Gran Canaria, Tenerife Norte y Tenerife Sur.

El Gobierno de Canarias se opone y así lo ha manifestado formalmente a través de alegaciones al expediente. Solicita la suspensión de esta tramitación al argumentar que estos servicios de interés general deben estar bajo la gestión pública y considera que la externalización puede incidir en la seguridad y conectividad de las islas.