El PP recupera al 'expresident' Alberto Fabra para las elecciones en la Comunidad Valenciana

El Partido Popular planea situar al expresidente de la Generalitat, Alberto Fabra, como cabeza de lista por la provincia de Castellón en las próximas elecciones autonómicas. Los conservadores tienen prácticamente tomada la decisión a la espera de la confirmación oficial de las candidaturas por parte del comité electoral de la organización, que dirige el alicantino Carlos Mazón en la Comunidad Valenciana. Así lo manifestaron fuentes cercanas a la cúpula regional en una operación que contaría con el visto bueno de la dirección nacional de Alberto Núñez Feijóo, aunque se trata de una elección que corresponde al ámbito autonómico.

Los populares buscan rescatar una figura considerada moderada dentro del partido, con la intención de disputar el voto de los electores más centristas o menos ideologizados en Castellón. Esta es la provincia por la que hasta ahora se ha presentado también como cabeza de lista en las autonómicas el actual presidente de la Generalitat, Ximo Puig, tanto en 2015 como en 2019. No obstante, el barón del PSOE todavía no ha revelado si repetirá por esta circunscripción o liderará la papeleta por Valencia para intentar un tercer mandato al frente del Gobierno regional. Si ambos encabezan su lista, será un peculiar duelo provincial de presidente contra expresidente.

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Alberto Fabra asumió el encargo de presidir la Generalitat en julio de 2011, tras la dimisión de Francisco Camps como consecuencia de su imputación en el caso Gürtel. Exalcalde de Castellón, tomó las riendas de la Administración autonómica cuando los casos de corrupción comenzaban a azotar a los populares en la Comunidad Valenciana y en pleno alud de recortes en el gasto público como consecuencia de la caída de ingresos derivada de la crisis del pinchazo inmobiliario de 2008. Durante su mandato, se vio forzado a tratar de poner orden en una Generalitat muy sobredimensionada para su capacidad de generar recursos fiscales y gestionar, además, la resaca de los grandes eventos y costosos proyectos desplegados por los populares durante los años del boom económico.

"Si el partido te pide que ayudes a tener un mejor resultado y ganar la Generalitat, no se puede quedar uno de brazos cruzados"

El desgaste de los conservadores desembocó en la pérdida del poder autonómico y gran parte del municipal en la Comunidad Valenciana en 2015. Aunque el PP de Fabra ganó las elecciones, no obtuvo respaldo suficiente para formar Consell. Fue el PSPV-PSOE el que articuló una mayoría con Compromís y Podemos que hizo presidente a Puig, pese a que los socialistas cosecharon su peor resultado desde la instauración de la autonomía. El barón socialista logró mejorar en apoyo ciudadano cuatro años después y obtener el primer puesto, algo que no ocurría desde 1991, aunque con menos votos que entonces.

Tras ser desalojado del Palau, el PP hizo a Fabra senador por designación territorial, cargo que ha mantenido hasta la actualidad. A preguntas de El Confidencial, el 'expresident' aseguró que sería "un motivo de orgullo" recibir el encargo de regresar a la política autonómica. "Si el partido te pide que ayudes a tener un mejor resultado y ganar la Generalitat, no se puede quedar uno de brazos cruzados. Hay que salir al campo y ocupar la posición, siempre a expensas de los acuerdos que se tomen en el partido", dijo sin querer confirmar que haya recibido ya formalmente la invitación a liderar la lista por Castellón.

Opinión

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Fuentes del PP señalan que la designación está pendiente de que Mazón la formalice. Su regreso supondrá el relevo como cabeza de lista de Miguel Barrachina, otro histórico de los conservadores en Castellón. Barrachina fue presidente provincial durante el mandato orgánico de Isabel Bonig, pero, tras la llegada de Mazón a la presidencia regional, fue sustituido por Marta Barrachina, alcaldesa de Vall d'Alba, en una operación respaldada, con Teodoro García Egea, en aquel momento secretario general del PP y factótum de Pablo Casado en Génova. No obstante, Mazón ha dado juego y confianza a Miguel Barrachina, al que acaba de nombrar director de la campaña autonómica, con la alicantina Macarena Montesinos como coordinadora.

El regreso de Fabra a la política autonómica no sería el único de antiguos miembros del Consell en la etapa del PP. La propia secretaria general y candidata a la alcaldía de Valencia, María José Catalá, fue consellera de Educación, pero ha seguido en primera línea. Uno que sí ha aceptado el reto de ponerse otra vez el traje de político tras haber salido del campo ha sido José Manuel Moragues, exconseller de Hacienda y exdelegado del Gobierno, que intentará disputar a los socialistas la alcaldía de Gandía, una de sus plazas más simbólicas, en las próximas elecciones municipales.