Es noticia
Illa vuelve a la casilla de salida tres meses después del 14-F: intentar ser el 'president'
  1. España
  2. Cataluña
"TENGO DERECHO A PRESENTARME", AFIRMA

Illa vuelve a la casilla de salida tres meses después del 14-F: intentar ser el 'president'

Las opciones del líder de ERC, Pere Aragonès, se van reduciendo cuando faltan dos semanas para que expire el plazo de investidura, y por esta razón, el PSC exige que se permita a Illa presentarse como ganador de los comicios

Foto: El líder del PSC en el Parlament de Cataluña, Salvador Illa. (EFE)
El líder del PSC en el Parlament de Cataluña, Salvador Illa. (EFE)

El candidato socialista en las elecciones catalanas, Salvador Illa, quema su último cartucho para salvar la situación en Cataluña: volverá a pedir a la presidenta del Parlament, Laura Borràs, que le permita presentarse a la investidura como máximo mandatario de la Generalitat, habida cuenta de que el republicano Pere Aragonès no tiene todavía los números claros. “Aragonès ya ha tenido dos revolcones y puede sufrir un tercero, con lo que iríamos a elecciones de cabeza. Por tanto, y tras dos fracasos, pedimos que Borràs deje presentarse a otro candidato”, explican fuentes de la cúpula socialista a El Confidencial. Hay cuatro palabras que repite Illa siempre que puede que ilustran ese posicionamiento: “Tengo derecho a presentarme”.

“¡Pues solo faltaría que no dejasen presentar su candidatura al candidato que ganó las elecciones!”, exclama un dirigente socialista consultado por este diario (el PSC y ERC empataron en escaños, pero los socialistas obtuvieron más votos). Este martes, se reúnen la Junta de Portavoces y la Mesa del Parlament para preparar el pleno del próximo jueves. Y la oposición pedirá que se abra una ronda de consultas por parte de la presidenta del Parlament. “PSC y ERC tienen, en estos momentos, las mismas posibilidades de formar Gobierno. Y le recordamos a la señora Borràs que el PSC obtuvo 50.000 votos más que Esquerra”, subrayan las fuentes.

Foto: Pere Aragonès, candidato de ERC a la Generalitat. (EFE)

Los socialistas catalanes se quejan de un cordón sanitario “antidemocrático” por parte del independentismo. “Desde Esquerra, ni siquiera nos han llamado después de las elecciones. Todo lo que ocurre ahora es consecuencia del cordón sanitario que los independentistas firmaron contra el PSC. Dejaron negro sobre blanco que nunca facilitarían un Govern socialista y que bloquearían cualquier acuerdo con nosotros. Lástima que también se olvidaron de firmar que debían ponerse de acuerdo entre ellos”, explica otra fuente del PSC a El Confidencial.

Dos posibilidades de Gobierno

Para el PSC, solo hay dos posibilidades de formar Gobierno: una es un Govern independentista, en cuyo caso el ‘president’ sería Pere Aragonès. La otra posibilidad es un Govern de izquierdas, pero en ese caso el ‘president’ sería el candidato que ganó las elecciones, es decir, Salvador Illa. En cierto modo, la circunstancia de que Aragonès ni siquiera llamase al candidato ganador de los comicios dice mucho del talante del candidato de Esquerra. Pero también desvela el verdadero motivo de esa clamorosa ausencia de llamada: Aragonès tendría que reconocer ante Illa que fue el PSC quien ganó las elecciones y, por tanto, el partido al que le correspondería la presidencia de la Generalitat.

Foto: El candidato de ERC a 'president', Pere Aragonès. (EFE)

Una de las fuentes socialistas consultadas por El Confidencial señala que “la única herramienta negociadora que tiene Salvador Illa en estos momentos es votar no. Considera que ha ganado las elecciones y, por tanto, es el candidato que tiene que gobernar la Generalitat”. Esta fuente subraya que “Salvador Illa está de acuerdo en formar un Gobierno de izquierdas en la Generalitat, pero lo ha de presidir él. ¿Cómo quieren que él haga presidente al que quedó en segundo lugar? Si no es así y rechazan que sea ‘president’, que se pongan de acuerdo entre ellos y que formen otro Govern”. Esa circunstancia lleva a los socialistas a criticar que “Esquerra ha negociado muy mal. Contrariamente, JxCAT habla con todo el mundo”, subrayan las fuentes.

Los números para formar Ejecutivo, sin embargo, no acaban de aclararse. El candidato de ERC cuenta en su haber con los votos de la CUP y de los comunes (nueve y ocho escaños respectivamente), insuficientes para ser investido, ya que si PSC, Vox, Ciudadanos y PP votan en contra les superan en número. Por eso, los de JxCAT podrían ‘prestar’ a Aragonès cuatro diputados para que las cuentas le saliesen: así serían 54 contra 53 votos (el resto correspondería a la abstención de 28 diputados de Junts). Esa negociación, sin embargo, todavía no está cerrada. Ni los votos de los comunes están asegurados ni el ‘préstamo’ de Junts está hecho. A decir verdad, Esquerra solo tendría asegurados, a día de hoy, sus 33 diputados y los nueve de la CUP. O sea, 42 escaños.

Foto: El secretario general de JxCAT, Jordi Sànchez. (EFE)

Salvador Illa, por su parte, no se presentaría en solitario: también podría contar con los votos de los comunes (sumarían 42 escaños), aunque el resto quedaría en el aire. Pero a los independentistas les bastaría con votar en bloque para bloquear cualquier Gobierno socialista o de otro color. Lo que está claro, de momento, es que la posibilidad de un tripartito como el que gobernó la Generalitat de 2004 a 2010 (PSC, ERC y comunes, antes bajo las siglas ICV) queda descartado por la decisión de los republicanos de rechazar a los socialistas. Así, en el PSC aducen que “de la misma manera que Esquerra pide el voto de los comunes y nuestras abstención, nosotros podemos pedir el voto de los comunes y la abstención de ERC”. Diente por diente: los comunes se convierten en una codiciada baza para completar un apoyo que puede ser vital para la estabilidad gubernamental en la próxima legislatura.

Foto: El presidente del grupo de Unidas Podemos en el Congreso, Jaume Asens. (EFE)

Sondeo de JxCAT

La historia de la negociación del Gobierno catalán es una historia de engaños y ‘traiciones’. Junts per Catalunya ha llegado a sondear al PSC para conocer su disposición a abstenerse para facilitar la investidura de Pere Aragonès. La respuesta fue contundente: Salvador Illa está empeñado en ser ‘president’ de la Generalitat porque ganó las elecciones y el PSC votará en contra de la investidura de Pere Aragonès. “Nos preguntaron qué haríamos y siempre les hemos dicho que votaremos que no, porque la abstención no es nuestra opción”, relata una fuente del Partido Socialista. Conociendo esta disposición, la presión de Junts sobre su rival, y hasta ahora socio, es más intensa.

Foto: El 'president' en funciones, Pere Aragonès, y la presidenta del Parlament, Laura Borràs. (EFE)

El ‘impasse’ de las negociaciones entre ERC y JxCAT, que sorprende incluso dentro de las filas independentistas, es visto como un fracaso personal de Pere Aragonès, “que ha sido incapaz de poner de acuerdo a gente que ya está gobernando junta desde hace años. Si a ello añadimos el hecho de que el independentismo ha obtenido unos resultados históricos, ese fracaso es más gigantesco”. Desde el PSC se afirma, además, que si Aragonès inicia un Gobierno en minoría, aunque sea con el apoyo de la CUP y de En Comú Podem, la estabilidad no está garantizada, porque “el PSC no lo apoyará (ni siquiera por afuera) y porque dudamos de que JxCAT apoye un Ejecutivo con esa composición”.

Desde el PSC, critican especialmente que “no es de recibo que hayamos pasado más de la mitad de la pandemia con un Govern en funciones. Ni que ahora tengan paralizada la legislatura por las peleas internas de los partidos independentistas, incapaces de ponerse de acuerdo a pesar de que llevan casi una década gobernando juntos”. Lo cierto es que si PSC y JxCAT votan no a la investidura, Pere Aragonès no podrá ser ‘president’ jamás. Al candidato republicano se le acaba el tiempo y no ha sabido abrir la negociación hacia una alternativa amplia de izquierdas. La gran paradoja, sin embargo, es que, a solo una decena de días de la fecha tope (si no hay investidura, se convocarán elecciones autonómicas automáticamente), en estos momentos, Pere Aragonès, el candidato que ya se daba como ganador el pasado mes de febrero, no sepa aun si ocupará el sillón presidencial o tendrá que ir a unas nuevas elecciones.

El candidato socialista en las elecciones catalanas, Salvador Illa, quema su último cartucho para salvar la situación en Cataluña: volverá a pedir a la presidenta del Parlament, Laura Borràs, que le permita presentarse a la investidura como máximo mandatario de la Generalitat, habida cuenta de que el republicano Pere Aragonès no tiene todavía los números claros. “Aragonès ya ha tenido dos revolcones y puede sufrir un tercero, con lo que iríamos a elecciones de cabeza. Por tanto, y tras dos fracasos, pedimos que Borràs deje presentarse a otro candidato”, explican fuentes de la cúpula socialista a El Confidencial. Hay cuatro palabras que repite Illa siempre que puede que ilustran ese posicionamiento: “Tengo derecho a presentarme”.

PSC Salvador Illa Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) Parlamento de Cataluña Junts per Catalunya
El redactor recomienda