Moncloa expondrá a la UE un sistema mixto para el CGPJ que no excluya al Parlamento

El capítulo de la renovación del Consejo General del Poder Judicial aún no está cerrado, pero al menos las dos partes comienzan a exponer sus condiciones. Tanto el Gobierno como el PP empiezan a fijar sus posiciones de cara a la activación de la negociación en la que entrará en juego una mediación de la UE que reclamaron los populares y ha aceptado el PSOE. El mayor punto de fricción continúa siendo el cambio a futuro del sistema de elección de los vocales. Según concretan fuentes conocedoras de los contactos, los socialistas tienen intención de defender una vía intermedia que no suponga una selección de candidatos exclusivamente en manos de las asociaciones judiciales. Un sistema mixto que refuerce la selección de candidatos por sus compañeros de carrera, pero que también incluya una intervención parlamentaria que consideran indispensable.

La propuesta no encaja con la que realizan los de Alberto Núñez Feijóo, que defienden una elección directa en la que las Cortes no intervengan, aunque están abiertos a contemplar otras opciones con la garantía de ese control por parte de la Comisión Europea. Su apuesta es la misma que ya pusieron por escrito en una proposición de ley que se registró en el Congreso y fue rechazada por el PSOE. En resumen, plantean que los 12 vocales de extracción judicial sean directamente elegidos por los jueces y magistrados, mientras que el Congreso y el Senado seguirían escogiendo a los ocho vocales del turno de juristas que les corresponden. La mayoría seguiría fijada en tres quintos, con lo que sería necesario que PSOE y PP llegasen a un acuerdo para renovar esa parte.

La propuesta del PP incluye una cláusula antibloqueo, por la que, si los dos grandes partidos fueran incapaces de llegar a un acuerdo para renovar los miembros correspondientes al turno de juristas, el Consejo podría constituirse solo con los 12 vocales escogidos por los jueces. Para los populares es necesario, además, eliminar conexiones políticas en los vocales. Exigen que solo puedan aspirar a estos puestos quienes no hayan ocupado un cargo electo o político en los últimos cinco años.

Frente a esta teoría, el PSOE ha defendido tradicionalmente que el sistema actual ya incluye una selección previa por parte de la carrera judicial. Todos los candidatos que en la actualidad pueden postularse a ser designados vocales del CGPJ son propuestos por jueces, bien mediante avales, si no están asociados, bien por las asociaciones judiciales, en elecciones democráticas, si lo están. Los jueces proponen los candidatos, elegidos por las asociaciones o avalados por los no asociados, y las Cortes designan las vocalías exclusivamente entre esos candidatos, sin que puedan proponer otros. "La judicatura, por tanto, participa activamente en el sistema de elección, de modo que los reproches sobre la influencia partidista han de matizarse", resumía un informe firmado por Jueces y Juezas para la Democracia hace un año.

TE PUEDE INTERESAR

La Comisión Europea está "reflexionando" sobre si acepta ser la mediadora para el CGPJ

Nacho Alarcón. Bruselas

Con la intención de facilitar un acuerdo, el Gobierno está dispuesto a reforzar esa selección previa de los candidatos con la participación de la judicatura. Sus socios en el Ejecutivo, Sumar, incluyeron una fórmula abierta en su programa electoral para las generales que puede servir de pista. El partido de Yolanda Díaz proponía entonces cambios para lograr que el órgano de gobierno de los jueces renovado sea "reflejo de la pluralidad democrática del país y quede salvaguardado de usos partidistas".

El apoyo de Sumar

Sumar sugería la necesidad de "concretar los criterios de designación por parte de las dos Cámaras de los vocales del turno judicial para respetar al máximo la voluntad de los avalistas o asociaciones proponentes, al menos con relación a 10 de ellos [la mitad de los 20 integrantes del órgano], con mecanismos que garanticen la presencia proporcional de todas las sensibilidades".

TE PUEDE INTERESAR

Todo lo que separa a Sánchez y Feijóo para desbloquear el Poder Judicial

Marisol Hernández Ana Belén Ramos

En la actualidad, el Congreso y el Senado escogen a estos miembros a propuesta de los partidos a partir de un listado de candidatos. Para optar a vocales, los jueces deben estar en servicio activo en la carrera judicial y aportar el aval de 25 miembros de la carrera o el de una asociación. Tres de ellos deben proceder del Supremo y otros tres, tener más de 25 años de antigüedad. Para que la elección salga adelante, se requiere el apoyo de tres quintos de las cámaras.

El sistema que defiende el PP supondría volver al que se aplicó entre 1980 y 1985 y dio lugar al primer CGPJ de la historia. En aquel momento, la Ley Orgánica del Consejo General del Poder Judicial especificó en su artículo 12 que estos miembros del órgano de gobierno de los jueces serían elegidos "por todos los jueces y magistrados que se encuentren en servicio activo". El método solo aguantó cinco años y, con un Gobierno socialista en la presidencia, la Ley Orgánica del Poder Judicial cambió las cosas. La elección pasó al Parlamento, ya que se consideró que resultaba más democrático que un poder del Estado como es el judicial "emanara del pueblo" a través de sus representantes en las Cortes. El Tribunal Constitucional avaló el método en una sentencia del 86. Además, los populares ven ya sobrepasado el acuerdo de 2022, en el que se cerró una lista con una treintena de nombres que ahora deben ser, en su opinión, revisados.