Sánchez tira de críticas al PP por corrupción para sortear el debate sobre la ley del sí es sí

Ni una palabra sobre la reforma de la ley del solo sí es sí que certificó este martes en el Congreso la ruptura de puentes entre los socios del Gobierno. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha respondido al cerco del PP en la sesión de control al Gobierno sobre los efectos de esta norma y su reforma tirando del clásico "y tú más" en materia de corrupción. "Ni han aceptado ni digerido que la Justicia les condenó por corrupción y que estas Cortes les censuraron por corrupción. Nosotros podemos tener algún polizón en el barco y cuando esto sucede, lo bajamos inmediatamente a tierra", apuntó respecto al caso Mediador y la expulsión del exdiputado socialista implicado, Juan Bernardo Fuentes. "Y cuando yo me subo a un barco, lo primero que hago es comprobar quien es el patrón, y creo que me entienden", lanzó a la portavoz del PP, Cuca Gamarra, en referencia a las viejas fotografías del líder de su partido navegando con un narcotraficante.

Sánchez evitó así entrar a responder a los intentos de la dirigente popular de poner en el foco la crisis entre los socios por la reforma de la polémica norma de Igualdad. "No puede llamarse feminista si ha aprobado una ley que ha beneficiado a más de 700 agresores sexuales", dijo entrando también a enumerar las normas que más han ahondado la división tanto dentro del Ejecutivo como en el movimiento feminista: "Impulsa la ley trans que borra a las mujeres y que hace un daño irreparable a niños y mujeres o se pone de perfil en el caso del Tito Berni que afecta a su partido y a su grupo parlamentario y en el que están implicadas mujeres prostituidas".

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Los populares han tratado de poner en cuestión la agenda feminista del Gobierno, pero Sánchez se ha limitado en este sentido a reconocer que, si bien forma "un gobierno de distintos partidos", lo hace "avanzando en igualdad real y afectiva de hombres y mujeres" frente al PP a los que acusó de acumular "recursos en el Tribunal Constitucional contra las mujeres". El jefe del Ejecutivo tiró también de argumentario habitual para pinchar la bandera feminista que ahora tratan de empuñar los populares recordándoles sus pactos con la "ultraderecha" en Castilla y León, y evidenciando las diferentes opiniones en el partido respecto a la ley de paridad.

Las consecuencias de la ley del sólo sí es sí y la derivada de la prostitución en el caso de Tito Berni ha primado en los discursos de la oposición contra el Ejecutivo en una sesión de control que coincide con la conmemoración del Día de la Mujer. Santiago Abascal, por ejemplo, volvió a elevar el tono por encima del empleado por el PP, y acusó a Sánchez de ser "un peligro para las mujeres" por el impulso de una agenda que, a su juicio, ha provocado que hayan crecido un 30% el número de mujeres agredidas sexualmente. "Para ustedes, las mujeres valen menos que los animales", despachaba. En su pregunta a la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, la diputada popular Belén Hoyo se dirigía a la bancada socialista femenina para instarles a "romper" su carnés feministas por haberse "quedado mudas" con el caso de corrupción y prostitución que afecta al exdiputado Fuentes Curbelo, y que salpica a otros compañeros de bancada del PSOE.

La tensión en el Gobierno en pleno 8-M acabó estallando este martes en el Congreso no solo con la ruptura en la votación por la reforma de la ley del solo sí es sí, sino también con gruesas acusaciones cruzadas que certificaron la voladura de puentes. Tras escenificarse este choque de trenes, desde la Moncloa se confirmaba la ruptura del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con el Ministerio de Igualdad. No acudirá al acto institucional organizado por el departamento, que dirige Irene Montero, con motivo del Día Internacional de la Mujer. Es la primera vez en esta legislatura que no acude a este acto, organizado tanto en 2021 y en 2022 por el Departamento de Igualdad.

Pese a la ruptura de puentes en directo y desde la tribuna del Congreso, tanto desde la dirección de Ferraz como desde la Moncloa se insistía en intentar salvar la coalición de este choque. "La coalición va a llegar al final de la legislatura", insistían fuentes del Gobierno, al tiempo que intentaban rebajar la tensión por lo sucedido. Un ministro del PSOE explicaba tras la votación que si bien sus socios "están tensando" la coalición porque "están en el relato", esta no se va a romper. Si hasta ahora no se planteó una ruptura, no la habrá por la votación, defendió, para explicar que han vivido otras situaciones más críticas con Podemos. "Tuvimos que repetir elecciones. Más grave que eso no hay nada", explica este ministro respecto a las negociaciones fallidas para la formación del Gobierno de coalición.

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Para el PP, sin embargo, lo sucedido ayer en el debate de la reforma de la ley del sólo sí es sí acredita un "antes y un después" en el entendimiento entre los socios, y vaticinan que la ruptura que quedó acreditada en sede parlamentaria es sólo "la punta del iceberg" en una larga lista de enfrentamientos que, a su juicio, se materializarán en los próximos días. La falta de acuerdo entre los dos socios gubernamentales otorga al PP un rol protagonista en la tramitación de la modificación legislativa y, a nivel estratégico, los populares creen que el choque de trenes entre PSOE y Podemos en materia de Igualdad pincha también la estrategia de Sánchez de equiparar a Feijóo con Vox. "Ahora ellos también son fascistas", ironizan en el PP, parafraseando una de las peores críticas de los morados a los socialistas por "aliarse" con la derecha para tumbar la normativa de Irene Montero.