Es noticia
Arrimadas da más galones a Villacís, pero no sofoca el debate sobre su dimisión
  1. España
PILOTARÁ LA "REFUNDACIÓN" DE CS

Arrimadas da más galones a Villacís, pero no sofoca el debate sobre su dimisión

Arrimadas ha confirmado que mantendrá la presidencia hasta que concluya este proceso, que podría acabar en seis meses, y que será la militancia la que decida la próxima directiva nacional en una asamblea general

Foto: Inés Arrimadas, junto con Begoña Villacís. (EFE/Alvarado)
Inés Arrimadas, junto con Begoña Villacís. (EFE/Alvarado)

Inés Arrimadas no dimite. Al menos, de momento. La presidenta de Ciudadanos ha aguantado el chaparrón que clamaba por convocar más pronto que tarde un congreso extraordinario en el que se diese voz a las bases para decidir sobre el liderazgo del partido, una circunstancia a la que muchos cargos naranjas achacan el inexorable avance de Ciudadanos hacia la desaparición. Tal y como pudo saber El Confidencial, ese clamor interno situaba a la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, como la única dirigente capaz de tomar el testigo para huir de la inercia derrotista por la que atraviesa el proyecto liberal. Arrimadas ha sofocado esa batalla otorgando a la dirigente madrileña más galones en la estructura orgánica del partido, pero no aplaca a las voces críticas, que exigen que la "refundación" de Ciudadanos empiece por la cúpula de la formación.

Begoña Villacís será la coordinadora del equipo político que ha designado Inés Arrimadas para diseñar esa reestructuración de los liberales, y servirá de "enlace" entre este órgano y la dirección de Ciudadanos. En palabras de la presidenta de los naranjas, este comité será el encargado de diseñar un renovado programa electoral con el que "reconectar" con antiguos votantes y recogerá durante meses propuestas de la militancia para tratar de reimpulsar el proyecto, entre cuyas iniciativas se plantea actualizar tanto el nombre como el color del partido como posible revulsivo de cara a relanzar el espacio de centro liberal.

Foto: La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas. (EFE/Rafa Alcaide)

Ciudadanos espera tener esas primeras conclusiones sobre el diagnóstico que necesita el partido "antes del 16 de septiembre" para someterlas al refrendo de las bases. Arrimadas se ha dado un plazo de seis meses para completar el proceso de refundación de Ciudadanos, en el que se renovarán "las ideas clave, las maneras de comunicación, el equipo y la imagen del partido", según ha concretado la dirigente en una intervención retransmitida en abierto, pero cerrada a los medios de comunicación. La presidenta de los liberales creará también un "órgano asesor externo" en el que contará con intelectuales y representantes de la sociedad civil que quieran formar parte del proceso de "reconstrucción" de Ciudadanos.

Pero, por el momento, Inés Arrimadas mantendrá la presidencia al menos hasta que culmine un proceso que debería estar listo antes de Navidad para llegar con fuelle a las autonómicas y municipales de 2023. "Es la solución más cómoda, pero no es la correcta", justificó la dirigente este lunes. Fuentes presentes en la reunión de este lunes en la sede nacional de Ciudadanos, en la que se ha dado cita la ejecutiva ampliada del partido, aseguran que la presidenta ha puesto su cargo a disposición de su núcleo duro y este, a su vez, se ha puesto a disposición del resto del partido. "Todos han coincidido en que no serviría de nada promover otro líder para Ciudadanos sin trazar antes una hoja de ruta", insisten.

Foto: Vista de la fachada de la sede de Ciudadanos en Madrid. (EFE/Mariscal)

Arrimadas ha desactivado, además, una posible rebelión interna por el peso que ha ganado en los últimos meses Begoña Villacís para disputarle el liderazgo, y ambas dirigentes han cerrado filas para afrontar la refundación de Ciudadanos sin desangrar más el proyecto. "Ahora mismo, Begoña no está en disposición de hacer otra cosa que no sea pelear por mantener el espacio en el Ayuntamiento de Madrid", sostienen en la cúpula. Pero la bala de Arrimadas podría tener un corto alcance, ya que en su entorno aseguran que el compromiso de la dirigente es celebrar un congreso extraordinario en unos meses para dirimir el liderazgo del partido, una vez se materialice la nueva hoja de ruta de Ciudadanos para el ciclo electoral que arranca en 2023. "Inés no ha decidido si se presentará o no", aseguran las fuentes consultadas.

Foto: La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas. (EFE/Nacho Gallego)

Las mismas voces argumentan que una dimisión temprana solo "traería muchos más problemas" a una formación denostada por el encadenamiento de debacles electorales y provocaría la "desbandada" de otros muchos fieles de Inés Arrimadas que resisten en el núcleo duro y que son la voz del partido en el Congreso, como Edmundo Bal o Guillermo Díaz. Recuerdan que la salida de la diputada por Barcelona implicaría la entrada en la Cámara Baja de Carina Mejías, que abandonó Ciudadanos en 2020; mientras que Bal daría entrada en el hemiciclo a Cristiano Brown, expresidente de UPYD, que concurrió a las generales de 2019 como independiente en el número siete de la lista por Madrid.

"Más allá del ruido, quieren colaborar"

Tras la debacle del partido en Andalucía, que Arrimadas ha apuntado como factor "acelerador" de la refundación, y quedar fuera del Parlamento autonómico el que fuera vicepresidente de la Junta, Villacís es la última figura notoria del partido que mantiene poder institucional. Ciudadanos ha desaparecido en sus cinco gobiernos autonómicos, y solo conserva el escaño de Francisco Igea en Castilla y León. El evidente peso de la vicealcaldesa de Madrid servirá de hilo conductor para la apuesta por el "municipalismo" para resistir en plazas donde ya obtuvieron representación en anteriores procesos electorales, y fuentes del partido aseguran que darán a conocer a sus candidatos para las elecciones municipales "antes" de que termine el proceso de refundación. "Tenemos perfiles muy buenos, y no podemos esperar", sostienen.

Además, Villacís es también la coordinadora de Ciudadanos en la Comunidad de Madrid. Este cargo recayó en ella tras dimitir el exvicepresidente Ignacio Aguado de sus cargos tras la convocatoria de elecciones y la expulsión de los liberales de la Cámara de Vallecas el 4 de mayo de 2021. Villacís tiene un papel destacado como enlace entre el equipo y los órganos de dirección, mientras que el portavoz será el diputado Guillermo Díaz. Junto a ellos, Arrimadas ha situado a la alcaldesa de Ciudad Real, Eva Masías; al candidato de Santa Coloma, Dimas Gragera; al eurodiputado Adrián Vázquez, y a las coordinadoras de Baleares y Comunidad Valenciana, Patricia Guasp y María Muñoz.

Inés Arrimadas no dimite. Al menos, de momento. La presidenta de Ciudadanos ha aguantado el chaparrón que clamaba por convocar más pronto que tarde un congreso extraordinario en el que se diese voz a las bases para decidir sobre el liderazgo del partido, una circunstancia a la que muchos cargos naranjas achacan el inexorable avance de Ciudadanos hacia la desaparición. Tal y como pudo saber El Confidencial, ese clamor interno situaba a la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, como la única dirigente capaz de tomar el testigo para huir de la inercia derrotista por la que atraviesa el proyecto liberal. Arrimadas ha sofocado esa batalla otorgando a la dirigente madrileña más galones en la estructura orgánica del partido, pero no aplaca a las voces críticas, que exigen que la "refundación" de Ciudadanos empiece por la cúpula de la formación.

Ciudadanos
El redactor recomienda