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Rajoy propone sustituir a todo el Govern de Puigdemont e intervenir el Parlament
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Rajoy propone sustituir a todo el Govern de Puigdemont e intervenir el Parlament

Finalmente, el 155 ha sido menos 'light' de lo que se especulaba. Con el apoyo de PSOE y Ciudadanos, el Gobierno propone una intervención del ejecutivo y el legislativo catalán

Foto: El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, durante su comparecencia. (Reuters)
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, durante su comparecencia. (Reuters)

El Gobierno ha diseñado un marco muy general de intervención de competencias de la Generalitat de Cataluña al amparo del artículo 155 de la Constitución que luego aplicará cada ministro en su ámbito de responsabilidad. Mariano Rajoy envía al Senado un plan gradual para reconducir al gobierno rebelde hacia la ley que empieza por destituir a Carles Puigdemont, Oriol Junqueras y demás consejeros (personal de confianza incluido), y con capacidad para decidir después sobre la continuidad o cese, en cascada, de los demás altos cargos según actúen, ya dentro de la ley o todavía por la causa independentista.

En el caso de la cámara autonómica, no hay destituciones ni suspensiones (depende del Tribunal Constitucional y de la Justicia) y sí limitación de funciones. Como es obvio, el Parlament no podrá ir contra las autoridades del Gobierno central, ni tampoco ejercer control alguno sobre ellas, misión que pasa al Senado. La Cámara autonómica mantendrá sus labores ordinarias con la prohibición expresa de insistir en legislar contra la Constitución, el Estatuto de autonomía y los derechos de la oposición como hizo en el pleno de los días 6 y 7 de septiembre. El Gobierno rendirá cuentas de la intervención ante la Cámara alta cada dos meses.

Según consta en el documento enviado al Senado, Mariano Rajoy ha impuesto al final su criterio de tener un margen más amplio que el propuesto por el PSOE y Ciudadanos antes de convocar elecciones en Cataluña. Reconoce que los comicios se deben celebrar cuanto antes, pero una vez recuperada la normalidad constitucional y el orden. Frente a la pretensión de socialistas y riveristas de sacar las urnas en enero próximo, el presidente del Gobierno se reserva durante 6 meses la facultad de disolver la cámara catalana, desde que el Senado autorice la intervención de la Generalitat la semana próxima, hasta finales del mes de abril. Si el jefe del Ejecutivo apura el plazo, los comicios quedarían para junio por los 54 días que fija la Ley Orgánica de Régimen Electoral General.

Foto: El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. (Reuters)

El Gobierno quiere preservar el funcionamiento ordinario de la Generalitat de Cataluña en todo lo referente al servicio al ciudadano. En general, se someterá un régimen de comunicación o autorización previa todas las actuaciones de la Administración autonómica.

La autorización solicitada al Senado sí detalla más la intervención de competencias y capacidad de nombramientos en los casos de las áreas de Seguridad y orden público, de la gestión “económica, financiera, tributaria y presupuestaria” y de las “telecomunicaciones y comunicaciones electrónicas y audiovisuales”.

Rajoy ha impuesto su criterio de tener un margen más amplio que el propuesto por el PSOE y Ciudadanos antes de convocar elecciones


Para controlar Interior, el Gobierno recurre de nuevo al criterio de gradualidad. De entrada, el departamento que ahora dirige Joaquím Forn, una vez destituido el consejero, recibirá ordenes directas del ministerio que encabeza Juan Ignacio Zoido. A partir de ahí la autoridad delegada, en principio el secretario de Estado de Seguridad (José Antonio Nieto), se encargará de coordinar a los Mossos y “en el caso de que sea necesario” sustituir a loa agentes de la policía autonómica por efectivos de los otros cuerpos se Seguridad del Estado, la Guardia Civil o de la Policía.

El documento remitido al Senado no especifica el rango de ‘la autoridad’ delegada en cada consejería para suplir al titular destituido, aunque lo previsto en los planes de contingencia previos elaborados en los ministerios se atribuía a los secretarios de Estado.

Como recalcó Rajoy al presentar las medias de aplicación del artículo 155 después del Consejo de Ministros, la intervención de competencias se configura como un catálogo de mínimos para restituir el orden constitucional, devolver a la Generalitat a la senda de la ley y recuperar un mínimo de paz social y lograr que vuelva la convivencia. Según encajen los altos cargos del ejecutivo autonómico, funcionarios y policías las instrucciones de la autoridad central habrá más o menos relevos por debajo del puesto de consejero.

Caceroladas en Cataluña

En Cataluña, el anuncio de Moncloa ha supuesto una auténtica conmoción al entender que lo que se esperaba como un 155 light, al final es una auténtica suspensión de la autonomía catalana. Mientras políticos como Gabriel Rufián expresaban su total rechazo a las medidas en Twitter, en las calles de Barcelona comenzaban algunas caceroladas espontáneas.

placeholder El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, durante la manifestación en Barcelona. (EFE)
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, durante la manifestación en Barcelona. (EFE)


Además, a partir de las 17 horas se ha desarrollado la manifestación del independentismo contra el 155 y a la detención de "los Jordis" por delitos de sedición. En la noche del viernes ya había más de 150 autobuses confirmados desde pueblos de fuera de Barcelona. Por último, a las 21.00 horas está prevista la comparecencia de Carles Puigdemont.

El Gobierno ha diseñado un marco muy general de intervención de competencias de la Generalitat de Cataluña al amparo del artículo 155 de la Constitución que luego aplicará cada ministro en su ámbito de responsabilidad. Mariano Rajoy envía al Senado un plan gradual para reconducir al gobierno rebelde hacia la ley que empieza por destituir a Carles Puigdemont, Oriol Junqueras y demás consejeros (personal de confianza incluido), y con capacidad para decidir después sobre la continuidad o cese, en cascada, de los demás altos cargos según actúen, ya dentro de la ley o todavía por la causa independentista.

Carles Puigdemont
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