Sánchez se ve con Fernández con su primera victoria: más del 50% de delegados a su favor

Pedro Sánchez quería que la cita se hubiera producido antes, al poco de su rotunda victoria en las primarias, pero no pudo ser por problemas de agenda del presidente asturiano. Cosa que causó un cierto escozor en su equipo. Pero decidieron no hacer un mundo, tomar el aplazamiento con deportividad y aceptar la nueva fecha propuesta. Y es este lunes.

Este 29 de mayo, una semana después de triunfar en las urnas, el secretario general se entrevista en Ferraz con el jefe de la gestora en funciones, Javier Fernández. A las 11 de la mañana. Y aunque ambos intenten mantener las formas, las divergencias son palpables y casi irreconciliables. No solo personales, sino también políticas. Por ejemplo, a cuenta de la moción de censura registrada por Podemos contra Mariano Rajoy. Pero el dirigente asturiano está de salida —tanto de Ferraz como de la federación asturiana— y se limitará a "escuchar" al secretario general. Ni él ni el resto de partidarios de Susana Díaz quiere dar batalla alguna tras unas primarias en las que Sánchez ha ganado con claridad. Esa voluntad de enterrar el hacha de guerra se ha percibido también en los 'congresillos' provinciales e insulares de este fin de semana, en los que las listas unitarias, que le han dado más del 50% de los delegados a reparto, han sido la norma general. Aunque tampoco han faltado las tensiones, prueba de que la paz interna no será ni mucho menos fácil de conseguir.

El portavoz provisional apunta a la abstención en la censura de Podemos a Rajoy; Fernández mantiene el rechazo, pero escuchará la opinión del líder

La cita en la sede federal se ha concebido por el equipo del líder como una "reunión de trabajo interna", tras la cual no se prevén declaraciones de ninguno de los dos dirigentes. Sobre la mesa está el traspaso de poderes, que no se culminará hasta la celebración del 39º Congreso Federal, los próximos 16, 17 y 18 de junio, y cómo se conduce este tiempo de transición. Un botón de muestra: el comité organizador del cónclave ya ha dejado al secretario general la potestad de nombrar a las personas que dirigirán los debates de las enmiendas a la ponencia marco, un gesto que le facilita que su proyecto político salga adelante sin demasiadas trabas.

Rajoy "es censurable"

Pero antes del congreso, el 13 de junio, se discutirá en el pleno de la Cámara la moción de censura a Mariano Rajoy. Todo el PSOE está de acuerdo en que no debe secundarse la iniciativa de Podemos. Pero lo que no está decidido es el sentido del voto. El nuevo portavoz provisional, el valenciano José Luis Ábalos, ya apuntó el viernes pasado hacia la abstención, alegando que era el término medio: ni del lado de Pablo Iglesias, porque no se ha consensuado la moción ni tiene los votos suficientes, ni con el presidente del Gobierno, que como Sánchez ha repetido, sí "es censurable". La apuesta por la abstención es una "opinión personal" del portavoz, pero tampoco el líder le ha reconvenido, señalan en el entorno del primero. "Con la abstención le quitas valor a la propia moción y no nos asociamos a Rajoy. Ahora bien, lo peor es que de este viaje él salga fortalecido", indican fuentes próximas a Ábalos.

Las listas unitarias han sido la norma general en toda España, incluso en Andalucía, donde no había una directriz rotunda de Díaz

Sánchez aún no ha desvelado su posición. Fernández, en cambio, sí la tiene, y es no. El pasado viernes, cuando compareció en rueda de prensa tras anunciar a su ejecutiva regional su decisión de no optar a la reelección como secretario general en el próximo congreso autonómico, subrayó que ya dejó "bien claro" su rechazo a la iniciativa de Podemos: "Le envié una carta a don Pablo Iglesias y, si quiere, se la remito otra vez con las comas bien puestas". Pero, al tiempo, añadió que "escuchará lo que diga" el secretario general sobre la posibilidad de votar en contra o abstenerse. ¿Y al final? La decisión recaerá en Sánchez, por mucho que lo hable con Fernández. Así lo entienden en su equipo más directo, y coinciden fuentes de la gestora. "Pedro es el líder y es el que tiene en sus manos la dirección política de este nuevo tiempo. Es su responsabilidad", inciden desde la cúpula interina.

El dirigente madrileño acude a la reunión con una primera semana de lógico perfil más bajo que en la campaña. Y con las heridas intentando cerrarse, aunque costará, y mucho. Pero la primera prueba está superada: los congresos extraordinarios provinciales o insulares —los llamados 'congresillos'— se cerraron este domingo con una tónica dominante: listas de integración que incluían a delegados al cónclave federal afines a Sánchez, a Susana Díaz y a Patxi López. Incluso en Andalucía, donde la baronesa no había dado una directriz rotunda. Los números de representantes de cada una de las sensibilidades no están todos hechos, pero sí se atisba una conclusión: el ganador de las primarias ha obtenido "más de la mitad" de los 1.035 compromisarios (1.004 con derecho a voto), según confirman fuentes de su entorno y calculan sus contrarios. Se cumple así la pretensión de Sánchez de que la composición del congreso reflejase el resultado de las urnas, en las que él obtuvo el 50,26% de los votos, por el 39,90% de Susana Díaz y el 9,84% de Patxi López. El madrileño ganó en toda España, salvo Andalucía (feudo de la baronesa) y Euskadi (la tierra del también expresidente del Congreso).

Sistema a favor del jefe

El diferencial más grande a favor de Díaz se dio en Andalucía: 185 delegados a su favor, por 68 representantes sanchistas y dos próximos al exlendakari. Pero casi en el resto de territorios el secretario general se hizo con más compromisarios. En la Comunidad Valenciana, la segunda federación, la correlación fue 66-25-4 a favor de Sánchez . En Madrid, la tercera, el reparto fue 41-24-15. En Asturias, la comunidad de Javier Fernández, 24-18-3. En Extremadura, los partidarios del líder son 26, por los 23 afines a la presidenta andaluza y cuatro proclives al exlendakari. En Navarra, los ocho compromisarios, incluida su secretaria general, están con el ganador. En Aragón, en cambio, la balanza se inclinó por Díaz: son susanistas 21 delegados, por los 20 sanchistas y los tres patxistas.

En Madrid, la negociación duró horas y fue tensa, y también ocurrió lo mismo en Sevilla. Puig renunció a encabezar su candidatura vistos los recelos

Son solo unos ejemplos que muestran cómo el mecanismo de listas de unidad ha favorecido a Sánchez, ya que si se hubiera seguido el procedimiento habitual y se hubieran enfrentado candidaturas, lo habría tenido en principio más fácil la presidenta de la Junta, al disponer de más aparatos a su favor, que son los que siempre han determinado la confección de las planchas de compromisarios.

Pero el proceso no ha estado exento de tensión. En Sevilla, el forcejeo casi llevó a la presentación de dos planchas, pero al final los susanistas dejaron hueco a 15 sanchistas. En Madrid, la lista se parió tras horas de negociación en que los patxistas, liderados por la baronesa regional, Sara Hernández, empujaban para tener una representación mayor que la que les correspondía por porcentaje, porque entendían que había que primar a la ejecutiva autonómica. No lo consiguieron. En Ourense, Valladolid, Segovia, Salamanca o Castellón, confrontaron dos candidaturas. En esta última, el presidente Ximo Puig tuvo que apearse porque sus contrarios se negaban a que encabezase la delegación, y al final rivalizaron una plancha de consenso auspiciada por la ejecutiva, la que ganó, frente a una integrada solo por sanchistas. Tampoco es número uno de su federación el jefe del Ejecutivo manchego, Emiliano García-Page, en su caso por una decisión personal que "conecta" con las resistencias mostradas al proyecto del vencedor de las primarias.

En Pontevedra, se votó una sola lista, la de los partidarios del secretario general, y los de Díaz optaron por abandonar el recinto. Y en Lugo, los fieles al líder coparon igualmente todos los puestos, todo ello en un ambiente de crispación total. Como en Navarra. En Huelva, se aprobó una lista dominada por los susanistas, salvo un puesto reservado a Luisa Faneca, afín a Sánchez y exmiembro de su dirección, una composición criticada por la plataforma de apoyo al madrileño.

En Navarra, Pontevedra o Lugo, coparon los puestos los sanchistas, y en Huelva ocurrió lo contrario. En todo caso, el líder tiene el camino ya asfaltado

El siguiente paso será la ordenación de las enmiendas a la ponencia y la preparación del 39º Congreso. Pero, como algunos en la gestora ya anticipan, será uno de esos cónclaves pensados para "cubrir el expediente", en que se pondrá alfombra roja a Sánchez, se aprobará su ejecutiva y se validará, a grandes rasgos, su proyecto. En los siguientes días, el secretario general irá componiendo el puzle de su nuevo equipo, en el que ya destacan José Luis Ábalos, como casi seguro secretario de Organización, y la asturiana Adriana Lastra, como portavoz en el Congreso.

Los 'congresillos' se llevan por delante al secretario provincial de Alicante

Era un secretario provincial muy débil, opuesto al 'president' Ximo Puig y con una ejecutiva que le había dado la espalda. David Cerdán, líder de los socialistas de Alicante, dimitió el sábado pasado por estar en contra del proceso de confección de la lista de 32 delegados al cónclave federal, que fue votada en el 'congresillo' de este domingo. "Se ha hecho de la misma forma que hace 20 años: los dos o tres de siempre en una mesa camilla a oscuras y decidiendo sin contar con nadie", criticó.

Pero lo cierto es que Cerdán, que en 2014 era uno de los hombres de Eduardo Madina, y en la última parte de estas primarias, de 2017, se alineó con Pedro Sánchez, estaba ya bastante solo. Y digirió mal que quien encabezase la delegación alicantina al 39º Congreso fuera el exalcalde de Elche Alejandro Soler, que sí se movilizó a favor del madrileño desde el principio. Con la dimisión de Cerdán, habrá de nombrarse una gestora por unos meses, que conduzca el partido hasta el cónclave provincial, ya en el otoño.

Este domingo se concluyeron los 'congresillos' provinciales que quedaban por celebrar. En Andalucía, los de Córdoba y Málaga. Ambos con consenso. Pacto que también se reprodujo en Cantabria o en Asturias. En Navarra, en cambio, los sanchistas no tuvieron en cuenta a susanistas y patxistas e hicieron lista solo con los suyos. En Galicia quedaban por elegirse las listas de Pontevedra (solo con partidarios del líder, al final) y en Lugo. En Castilla y León faltaba por ejemplo Ávila, que sacó una candidatura con tres de Sánchez y dos de Díaz.