Las aerolíneas prevén mejorar el histórico verano precovid, pero preocupan las huelgas

Las aerolíneas calculan que este verano será mejor que el de 2019, el último antes del estallido del coronavirus que paralizó durante meses la actividad turística. La Asociación de Líneas Aéreas (ALA) ha detallado que actualmente los asientos programados para la temporada estival superan en un 3% los registros del año previo a la pandemia. En concreto, la última actualización realizada el 14 abril arroja una estimación de 219 millones de asientos. Aunque no pierden de vista las huelgas, la principal amenaza que puede retrasar un poco más la recuperación completa del sector.

Estos datos se van ajustando a medida que se acerca el verano. De hecho, hace poco más de un mes, Aena situaba los asientos programados en un 4,4% por encima de los niveles previos al covid. Ahora, las cifras son más comedidas debido, en parte, a las cancelaciones por la huelga en Francia por la reforma de las pensiones, aunque "también por reajustes de programaciones o cambios del tipo de avión", ha explicado este lunes el presidente de ALA, Javier Gándara. También ha defendido la necesidad de "remar todos en la misma dirección" para evitar que los paros en España, como los convocados por los pilotos de Air Europa, trunquen las buenas perspectivas que manejan las aerolíneas.

La huelga nacional en Francia, secundada por los controladores aéreos, está obligando a desviar vuelos para que no toquen el espacio aéreo galo. Según un informe de Eurocontrol, España es el país más afectado después de Francia, con casi 400 vuelos retrasados y un incremento del 60% en el número de cancelaciones. El principal problema, como ha indicado Gándara, es que "cerca del 90% de estos vuelos cancelados no tienen destino ni origen en Francia, sino que son sobrevuelos". Por este motivo, ha exigido al país vecino "que proteja los sobrevuelos mediante servicios mínimos, tal y como se hace en España e Italia".

En cualquier caso, las cifras de la temporada de invierno ya muestran que la recuperación total de la crisis del covid está a la vuelta de la esquina. Entre noviembre de 2022 y marzo de 2023, el tráfico de pasajeros se ha situado en un 98% de los niveles previos a la pandemia, incluso en marzo ya se ha alcanzado el 100%. Además, se ha transportado el 95% de la carga aérea del periodo precovid, llegando a superarlo en un 2% en marzo. "A pesar del momento de crisis económica que vivimos, los datos están demostrando las ganas de los pasajeros de viajar", ha indicado.

La recuperación se siente, sobre todo, en aeropuertos de comunidades con mucho peso turístico como los de Canarias (7,8%), Baleares (7,4%) o Andalucía (8,2%). Por el contrario, aquellos aeródromos donde los viajes de negocio tienen mayor protagonismo, como Madrid o Barcelona, no se están recuperando al mismo ritmo. La capital y la Ciudad Condal se encuentran un 3,1% y un 7,9% por debajo de los niveles anteriores a la pandemia, respectivamente. "No se están recuperando al mismo nivel porque están cambiando los hábitos de muchas empresas con el trabajo en remoto o híbrido", ha señalado el presidente de ALA.

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El tráfico doméstico y el intercontinental están entre un 5% y 6% por encima de los niveles de marzo de 2019. En cambio, el intraeuropeo está en un 2% por debajo, debido sobre todo a Alemania, que no se ha recuperado todavía de la pandemia, y a Reino Unido, que sigue notando las consecuencias del Brexit. Son dos países que pesan mucho en las cifras turísticas que cada año se registran en España, sobre todo en los meses de verano.

Gándara también ha querido aprovechar la ocasión para analizar varios temas de actualidad. Por ejemplo, ha rechazado el impuesto al queroseno que el Gobierno tiene sobre la mesa. Calcula que se podrían perder unos 4,5 millones de turistas por esta medida, que obligaría a incrementar el precio de los billetes. "Tendría un efecto desproporcionado sobre el turismo y la conectividad en España", ha destacado. Por este motivo, se encuentran en negociaciones con las secretarias de Estado de Turismo y Transporte, que recientemente han cambiado de responsable. No obstante, ha defendido la descarbonización del sector, pero ha considerado que "hay que dar tiempo a que las tecnologías se desarrollen".