La Fiscalía acelera la imputación de FG en el caso Villarejo para evitar la prescripción

La Fiscalía Anticorrupción pone en su punto de mira al histórico presidente de BBVA, Francisco González (FG). El Ministerio Fiscal ha decidido abordar la imputación del banquero gallego tan pronto como solicite la de BBVA, algo que presumiblemente ocurrirá la próxima semana, según fuentes conocedoras consultadas por El Confidencial.

Para los fiscales Miguel Serrano e Ignacio Stampa, FG es clave en la pieza separada del caso Tándem por las presuntas escuchas ilegales de Villarejo para BBVA. Pero los investigadores son conscientes de la dificultad de involucrar al expresidente, conocido por su control absoluto en todo lo que pasaba en el banco vasco durante su mandato y por su obsesión con la seguridad. Por ello, quieren tener bien amarrada su participación en los hechos investigados para no dar un disparo al aire, aunque tampoco pueden esperar demasiado por el riesgo de prescripción de los delitos. La Fiscalía tiene dos dudas en este frente.

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La primera, es si esperar a que BBVA envíe el informe forénsic que PwC lleva preparando los últimos seis meses. Su retraso ha provocado tirones de oreja al banco por parte de la CNMV, pero fuentes próximas a la consultora apuntan que ya se habrían entregado borradores finales. Los fiscales tienen mucha fe en que este trabajo les dé pistas y pruebas sobre la intervención de los principales exdirectivos del banco con los encargos a Villarejo. Sin embargo, las mismas fuentes señalan que el informe tiene un enfoque autoexculpatorio para el banco.

La segunda duda es si esperar a que se levante el secreto de sumario y declaren de nuevo los ocho directivos y exdirectivos imputados en la causa, que se negaron a hacerlo por no saber de qué defenderse. Fuentes jurídicas creen que los fiscales citaron como investigados a algunos antiguos responsables del banco como el ex consejero delegado Ángel Cano para que tiraran de la manta y señalaran a su superior. Además, las imputaciones también habrían servido para "dar un toque de atención" a BBVA, según las mismas fuentes.

Riesgo de prescripción

La expectativa de que lleguen nuevas pruebas invita a la Fiscalía a esperar unas semanas, aunque los investigadores tienen claro que no se puede aguardar demasiado. Uno de los plazos de prescripción que manejan es el de noviembre, cuando se cumplen 15 años de que Villarejo organizara las presuntas escuchas ilegales para detener el asalto de Sacyr, y este es el plazo que marca el artículo 198 del Código Penal por revelación de secretos con la participación de un funcionario público.

Aunque todo apunta a que el presunto delito siguió cometiéndose después de 2004 -incluso hasta 2017, según avanzó ayer 'El Mundo'-, Anticorrupción no quiere dejar ningún cabo sin atar cubriéndose frente a potenciales prescripciones.

Junto al presunto espionaje al Grupo Hostil (Luis del Rivero, Juan Abelló, Carlos Arenillas, José Pérez, Pedro Solbes, Fernando Martín y Miguel Sebastián, fundamentalmente), también han salido a la luz otros encargos relacionados con Martinsa, Ausbanc y Adicae, entre otros.

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El banco presidido por Carlos Torres se juega mucho con esta causa. Tras más de un año investigando sin frutos visibles, su credibilidad ante los mercados y los supervisores está en juego.

Para FG, su imputación supondría un golpe tras años ondeando la bandera de la integridad en el sector financiero.