Guindos descarta un cupo catalán pero abre la puerta a estudiar sus "especificidades"

El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha rechazado este jueves la posibilidad de establecer un cupo para Cataluña similar al que tiene el País Vasco o Navarra, pero ha abierto la puerta a "tener en cuenta las especificidades" de la comunidad. Así lo ha explicado durante la celebración del IV Foro El Confidencial - PIMCO, La Europa sin fronteras. Guindos ha explicado que cualquier revisión de la relación económica del Cataluña con el Estado se tiene que realizar dentro de la reforma de la financiación autonómica del conjunto de comunidades del Régimen Común.

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"Estamos hablando de un sistema de financiación autonómica para el conjunto de las comunidades autónomas españolas", ha remarcado Guindos, pero eso no signifca que no se puedan "tener en cuenta sus especificidades". Esto no significa que Cataluña vaya a tener un estatus especial entre las comunidades del Régimen Común, sino que tendrá que regires por unas "reglas generales" y dentro de ese marco dar cabida a las especificidades de cada región. El ministro pide también la participación del PSOE en esta reforma tan importante para España: "Creo que el PSOE está en esta situación".

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Guindos confía en que la aplicación del artículo 155 y la convocatoria de elecciones para el 21-D permita recuperar la normalidad económica en Cataluña y que "vuelva a liderar el crecimiento económico en España con tasas de crecimiento próximas al 1%" en tasa trimestral. El ministro ha remarcado que los datos de octubre muestran una importante ralentización del crecimiento en Cataluña, pero en noviembre la situación se está normalizando, como muestran los datos adelantados que se han ido publicando en las últimas semanas.

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El ministro confía en que Cataluña vuelva finalmente a la normalidad tras las elecciones del 21-D, ya que los catalanes "han visto las orejas al lobo" de los peligros que se esconden tras el procés. "Espero que vuelva la convivencia democrática a Cataluña", ha remarcado, lo que permitiría a España recuperar las tasas de crecimiento actuales en 2018. El Gobierno rebajó en cinco décimas su estimación de PIB para el próximo ejercicio como consecuencia de la incertidumbre en Cataluña, pero si la situación se normaliza, el país debería volver a crecer a ritmos próximos al 3%. "En tres o cuatro años podemos dejar atrás la crisis económica y también una de las mayores crisis institucionales que ha vivido nuestro país", ha señalado Guindos.

En tres o cuatro años podemos dejar atrás la crisis económica y también una de las mayores crisis institucionales

Guindos ha celebrado los buenos datos de la economía española publicados la mañana de este jueves por el INE. La Contabilidad Nacional Trimestral muestra que el PIB creció un 0,8% trimestral entre julio y septiembre y un 3,1% respecto al mismo trimestre del año anterior. El ministro pondera que el avance de la economía española se sostiene sobre la inversión en bienes de equipo y las exportaciones, lo que supone un crecimiento muy equilibrado para cualquier país. "Son datos muy positivos", ha remarcado Guindos, quien ha mostrado su confianza en que el ritmo de crecimiento en el último trimestre del año sea muy similar.

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También se ha referido a estos datos económicos Íñigo Errejón, diputado de Unidos Podemos, que también ha participado en el Foro. Errejón ha mostrado su contrariedad ante las cifras económicas: "Tenemos un país con la misma situación que antes de la crisis pero más roto por la dependencia energética y la caída de las rentas salariales". En su opinión, la subida del precio del petróleo en los mercados internacionales pone a España en una situación complicada porque "está frenando nuestras exportaciones" y ha calificado la valoración de Guindos de "demasiado triunfalista".

También ha valorado el esfuerzo que han hecho las distintas Administraciones Públicas para reducir el déficit público hasta el 3,1% en el que cerrará este año. Guindos cree que después de llegar al entorno del 3% y con la senda a la baja en el desfase presupuestario que lleva España en los últimos años, podrá salir en la primavera de 2018 del brazo corrector del Procedimiento de Déficit Excesivo.

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Un hito importante para España, ya que si no lo consigue, será el único país de la eurozona que todavía sigue en esta situación en 2018. Una vez logrado este objetivo de bajar del umbral del 3%, el siguiente reto para España es comenzar a "reducir el peso de la deuda pública sobre el PIB" que se sitúa todavía en el entorno del 100% y que supone un foco de inestabilidad para el país.

Hacia la nueva Europa

Guindos ha advertido que las peores crisis económicas son las que se generan por malas decisiones políticas. Por eso confía en que Cataluña vuelva a la normalidad con las elecciones del 21-D después de "ver las orejas al lobo". Pero igual que Cataluña y España necesitan recuperar la normalidad democrática para abordar las reformas pendientes, como es la nueva financiación autonómica, también la Unión Europea tiene que afrontar cuanto antes un futuro complejo. España ha sido uno de los países que más ha presionado a los socios para avanzar hacia la integracion económica entre todos los países. "Se ha puesto de manifiesto que hay cosas que no funcionan bien", ha remarcado Guindos, "la zona euro necesita reformas".

Uno de los grandes retos que tiene por delante es gestionar el 'Brexit'. "Reino Unido es un socio muy importante para España, nuestro socio comercial más importante", ha remarcado. Por eso considera que lo más importante es que la salida del país del 'club europeo' culmine con un buen acuerdo comercial para las dos partes. "No va a ser sencillo, va a haber momentos de tensión, pero espero que el sentido común se acabe imponiendo".

El ministro también ha querido descartar su candidatura a la Presidencia del Eurogrupo en sustitución del holandés Jeroen Dijsselbloem, que ya le ganó la carrera en 2015. Guindos ha recordado que "no soy candidato" a falta de unas horas para que se cierre el plazo para presentarse, que será este jueves a las 12:00 horas. En lo que no ha sido tan claro es en su posible candidatura a la vicepresidencia del Banco Central Europeo que deja vacante el portugués Vitor Constancio la próxima primavera. Guindos ha mostrado su total confianza: "Estoy convencido de que el próximo vicepresidente del BCE será un español o española", pero no ha querido ni afirmar ni descartar su voluntad de aspirar al cargo.