El 'me la sopla' de Deschamps con Benzema: pasa de verle en la final del Mundial

Karim Benzema sufre una decepción con las palabras de Didier Deschamps. Al seleccionador no le importa que el Balón de Oro no esté en la final del Mundial de Qatar. Le han faltado cariño y algo de respeto, con un lenguaje gestual en el que resopla con desgana, en la respuesta que ha dado tras conseguir la clasificación para la final del Mundial. Despachó la pregunta sobre si el jugador del Real Madrid podría regresar para el partido contra Argentina de una forma seca y fría. "Siguiente pregunta. Lo siento", es la contestación del seleccionador.

En la gestión del caso Benzema confluyen un diagnóstico médico alarmista y la poca paciencia que tuvo Deschamps. A Benzema le habría dado tiempo para llegar a los partidos de cuartos contra Inglaterra y la semifinal contra Marruecos. Podría haber estado, al menos, en el banquillo y disponible para salir a jugar algunos minutos. De lo que no cabe duda es de que cumplía con los plazos para estar en la final y ser útil. No solo podría haber sumado en el campo. También en el grupo.

Deschamps decidió junto con el doctor de la selección, Franck Le Gall, que había riesgos de una lesión mayor y que tendría que parar durante tres semanas. No ha sido así. La lesión que le diagnosticaron fue un golpe en el cuádriceps del muslo izquierdo y se ha demostrado que no tiene la gravedad que pronosticaron el seleccionador, principalmente, y el jefe de los servicios médicos. Benzema está entrenando con el Real Madrid sin ningún problema. Tiene el alta médica desde hace más de una semana y ayer participó en un partido contra el Leganés disputado en la Ciudad Deportiva.

Faltó paciencia

A Deschamps le faltó paciencia y deseo de tener a Benzema en la concentración, como queda ahora demostrado con una respuesta cortante. Da la sensación de que, a las primeras de cambio, se lo quitó de encima. No le dio ninguna trascendencia a la baja. Tampoco llamó a un sustituto para cubrir su baja. Se quedó con el grupo de jugadores con los que estaba más cómodo y ha dado a Griezmann un rol de líder en el campo. A Mbappé, toda la libertad. La realidad es que Deschamps tiene plena confianza en Giroud como delantero centro. Es su ojito derecho y el rendimiento que ha dado el futbolista del Milan ha sido positivo. De ahí la contestación cortante sobre Benzema. Le incomoda esta pregunta, que se hable del delantero del Real Madrid cuando hay compañeros que han cumplido con el objetivo de clasificarse para la final y otros que también se quedaron fuera por lesión (Kante, Pogba, Kimpembe, N'Kunku y Lucas Hernández).

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Esta Francia es un equipo de autor de Deschamps. Sin Benzema, ganó el Mundial de Rusia, y con su decisión de prescindir de él, está en el camino de repetir el éxito. Los resultados le acompañan. Esto no significa que haya obrado de la mejor manera con un futbolista que hizo todo lo posible para estar presente en el Mundial. Era su objetivo, tras un largo castigo por el caso Valbuena. Sufrió con el veto. La temporada pasada rindió a un altísimo nivel, es el Balón de Oro y decidió poner el foco y sus energías en jugar este Mundial. Deschamps no le ha esperado hasta la final. Tampoco ha tenido un guiño durante el Mundial ni en su contestación tras eliminar a Marruecos.

Benzema se lesionó estando en el Mundial. En un entrenamiento en el estadio Jassim bin Hammad, en la ciudad de Al Rayyan. Le hicieron una resonancia en la clínica Aspetar y no se marchó bien de la concentración de Francia. Lo hizo sin despedirse de todos los compañeros. Se enteraron de la marcha por la mañana. Algo pasó. La controversia surgió con una noticia del diario L'Equipe en la que informó de que los jugadores se liberaron con la desconvocatoria del Balón de Oro. En ella se decía que Deschamps se quitaba "un dolor de cabeza" y que el liderazgo de la selección pasaba a Mbappé y Griezmann. El enfado de Karim Benzema fue importante y la respuesta de su agente, Karim Djaziri, contundente. Calificó al medio de comunicación de "anti-Benzema".

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El delantero regresó a Madrid, pasó un reconocimiento médico y no debió ser tan grave el resultado cuando le dieron unas vacaciones. En su regreso, ha hecho trabajo específico y ya entrena como uno más. Ahora tiene el permiso del club de viajar a Qatar si le apetece estar presente en la final que se disputa en el estadio de Lusail. Si Francia gana a Argentina, le corresponde una de las 26 medallas de campeón del mundo, porque sigue inscrito en la plantilla y no tuvo un recambio. Benzema no ha abierto la boca sobre este asunto y su postura es que él siempre ha pensado primero en el equipo.