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El triunfo más cómodo del Real Madrid: no hay que darlo por derrotado en la Liga (4-0)
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El triunfo más cómodo del Real Madrid: no hay que darlo por derrotado en la Liga (4-0)

El Real Madrid golea al Elche en un encuentro placentero con goles de Marco Asensio, dos de Benzema de penalti y Modric. El equipo de Ancelotti recorta la diferencia a los ocho puntos

Foto: Marco Asensio celebra el gol al Elche. (Reuters/Juan Medina)
Marco Asensio celebra el gol al Elche. (Reuters/Juan Medina)

El Real Madrid recorta la diferencia a ocho puntos con el Barcelona tras una victoria placentera contra el Elche. El primero que no se fía de la capacidad para remontar y competir del Madrid es Xavi. El técnico del equipo líder dice que la distancia, aunque parezca grande, no es "insalvable". Queda mucho campeonato y el Real Madrid es de los que no se rinde. Era el partido aplazado por la disputa del Mundial de Clubes y el equipo de Ancelotti lo resolvió por la vía rápida con el gol madrugador de Marco Asensio, los penaltis de Benzema y el cuarto de Modric. Era un partido que tenía el foco de atención en la ausencia de Vinícius. Había que ver qué respuesta daba el equipo sin el explosivo y agitador juego del extremo brasileño. Su posición la ocupó Rodrygo, un futbolista elegante que también encara y dribla rivales, pero lo hace a velocidad silenciosa. Rodrygo jugó todo el partido, lo intentó de todas las maneras, estuvo participativo e incisivo, pero se quedó sin marcar en una noche de goleada fácil.

La victoria del Real Madrid se cocinó a fuego lento. No necesitó de la agresividad ni una alta intensidad para imponerse a un Elche que salió al partido con un planteamiento valiente y una estructura frágil. El equipo de Pablo Machín no se metió atrás, fue a buscar al Madrid a su campo, a intentar incomodar la salida del balón. Era un bloque abierto. Esos espacios los aprovechó Marco Asensio para marcar el primer gol. Un golazo.

placeholder Benzema dispara un penalti en ek partido contra el Elche
Benzema dispara un penalti en ek partido contra el Elche

Marco Asensio agarró un balón, vio los espacios y pisó el acelerador para colarse hasta el área. Ni Lisando Magallán ni Raúl Guti, que salieron a su paso, se atrevieron a meter la pierna, a estorbar ni pararle. Asensio cogió pista. Por cómo conduce la pelota, pegada al pie, es difícil de frenar si no le haces falta. Vio campo abierto y lo aprovechó con un disparo esquinado al que no llegó Edgar Badía. Una acción vertical, decidida, que celebró llevándose las manos por encima de la cabeza. Un gesto bonito y solidario para dedicar el gol a los niños que luchan contra el cáncer infantil.

Partido plácido

Es de esos goles que te dejan un sabor de boca bueno, que ponen de relieve el valor que tiene este jugador. Con confianza, cuando se atreve y tiene inspiración es capaz de marcar golazos. Venía de fallar un penalti en Mallorca y en el Mundial de Clubes jugó poco. Asensio está en proceso de renovación, no tiene claro si va a seguir o no porque el club decide que hay que esperar. Este tipo de acciones y goles le valen para pedir la renovación.

Con el 1-0, en el minuto 8, el Real Madrid se sintió cómodo en el campo. Tejió fútbol con Camavinga y Ceballos en el centro del campo. El juego colectivo se imponía a un Elche blando en los duelos, sin agresividad y con fallos en las marcas. Rodrygo y Benzema se buscaban, aparecía Alaba por el costado izquierdo para sorprender con disparos desde lejos. Era todo muy fácil para el Real Madrid y el Elche lo hizo todavía más sencillo con los dos penaltis que marcó Benzema. Uno lo provocó el delantero francés en un balón que remató de cabeza y pegó en la mano despegada de Enzo Roco. El segundo es un recorte de Rodrygo en el que cae tras estirar la pierna Diego González. Más dudoso. Benzema, con seguridad, ejecutó los dos con precisión y contundencia.

placeholder Los jugadores del Real Madrid celebran un gol de Benzema
Los jugadores del Real Madrid celebran un gol de Benzema

Al Elche se le hizo larga la primera parte, pero tuvo sus acciones para llegar a la portería de Lunin con remates de Diego González y Carmona. Es la asignatura pendiente del equipo de Ancelotti. Le llegan demasiado, le crean ocasiones de peligro con gol, se vio en los dos partidos del Mundial de Clubes y en el cómodo partido contra el Elche.

En la segunda parte, el Real Madrid quiso más, buscó darse un festín, con llegadas de Rodrygo, insistente, y paradas de Edgar Badía. El portero del Elche tuvo una buena intervención en un disparo de media tijera de Marco Asensio. Otra vez, solo en el remate, Badía evitó el cuarto tanto. Clerc le arrebató otro balón a Asensio en una acción que se plantaba solo ante la portería ilicitana. El equipo de Ancelotti lo veía fácil, se sumaban a las llegadas desde atrás Fede Valverde y Camavinga. En las gradas se entretenían mientras cantaban "corrupción en la Federación". El asunto que tiene indignados a los madridistas tras conocerse que el Barcelona pagó a una empresa del exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros, Enríquez Negreira, para asesoramiento arbitral.

Foto: Neymar antes del partido contra el Bayern de Múnich. (Reuters/Sarah Meyssonnier)

El partido más cómodo para el Real Madrid dio para que Ancelotti rotara. Modric marcó el cuarto en un disparo por la escuadra y lo celebró como si fuera el primero. El croata también se juega la renovación. Odriozola, por fin, jugó en el Bernabéu y disputó sus primeros minutos en la Liga. También tuvo minutos Mariano, sustituyendo a Benzema. El francés salió ovacionado por los aficionados. El último cambio fue Sergio Arribas. El canterano venía de marcar un gol en el Mundial de Clubes. Lo que le viene por delante es un calendario duro y exigente. Empieza el sábado con la visita a Pamplona para enfrentarse a Osasuna, sigue con el viaje a Anfield para el duelo contra el Liverpool, continúa con el derbi liguero en el Bernabéu y el Clásico de Copa del Rey.

El Real Madrid recorta la diferencia a ocho puntos con el Barcelona tras una victoria placentera contra el Elche. El primero que no se fía de la capacidad para remontar y competir del Madrid es Xavi. El técnico del equipo líder dice que la distancia, aunque parezca grande, no es "insalvable". Queda mucho campeonato y el Real Madrid es de los que no se rinde. Era el partido aplazado por la disputa del Mundial de Clubes y el equipo de Ancelotti lo resolvió por la vía rápida con el gol madrugador de Marco Asensio, los penaltis de Benzema y el cuarto de Modric. Era un partido que tenía el foco de atención en la ausencia de Vinícius. Había que ver qué respuesta daba el equipo sin el explosivo y agitador juego del extremo brasileño. Su posición la ocupó Rodrygo, un futbolista elegante que también encara y dribla rivales, pero lo hace a velocidad silenciosa. Rodrygo jugó todo el partido, lo intentó de todas las maneras, estuvo participativo e incisivo, pero se quedó sin marcar en una noche de goleada fácil.

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