El PSG intenta sabotear el plan del Real Madrid para renovar el contrato de Marco Asensio

Llegó el momento de la verdad para Marco Asensio. El de saber si el Real Madrid le valora o el de acelerar las negociaciones con otros clubes. También el de que demuestre su compromiso en la recta final del contrato. Ha pasado el mercado de invierno y el balear ha recibido el interés equipos que preguntan por sus planes de futuro. Asensio queda libre en junio, transmite que su prioridad es renovar por el Real Madrid, pero también calibra cuál es su rol en el equipo. Ancelotti comenta que es un futbolista que aporta un buen rendimiento, pero en los últimos partidos, después del Mundial, ha sido titular en tres de los nueve encuentros. Ha jugado en todos, pero su gran dilema es si aceptar un nuevo contrato para ser más suplente que titular. Quiere más certezas para despejar sus dudas y madurar qué proyecto de futuro es el mejor para su progresión. El club tampoco acelera el acuerdo y quiere llevar los tiempos de la negociación.

Lo que han hecho el Real Madrid y Asensio es darse una prórroga, no precipitarse y ver si existe la convicción por las dos partes de llegar a un acuerdo. El mes de enero ha sido intenso para el balear. El Paris Saint-Germain es uno de los clubes que tiene contactos con Jorge Mendes, su representante, y está a la espera de la decisión. En enero ha hecho un intento para fichar al balear, según Relevo. La maniobra la echó abajo el Real Madrid para demostrar a Asensio que es un jugador importante.

El club podía haber hecho caja y no arriesgarse a que se pueda marchar libre en junio. El mensaje ha sido claro. Marco Asensio no se vende y menos a un club con el que las relaciones están rotas. El PSG tendrá que esperar a que Asensio se siente con el Real Madrid y analicen su situación deportiva y económica. Las dos partes quedaron en retomar las conversaciones después del Mundial, con la predisposición de Asensio de darle siempre prioridad al Real Madrid. Pero el plan de los dirigentes en la hoja de ruta de las renovaciones va lento. No solo está pendiente el balear de tener más noticias. Lo mismo le sucede a Ceballos, Modric y Benzema. Kroos es un caso aparte. En el caso de Marco Asensio, el obstáculo empieza a ser el enredo del PSG. Algo que en el Real Madrid produce malestar por intentar sabotear las conversaciones.

Sentirse valorado

La guerra fría entre el Real Madrid y el Paris Saint-Germain no tiene visos de solucionarse por el conflicto de la Superliga y las tensiones con Mbappé. El club qatarí desconfía de que el Real Madrid haya desistido con Mbappé. Su respuesta es tentar a Marco Asensio, con dinero y un proyecto ambicioso, haciéndole llegar que sería valorado. Para el Paris Saint-Germain, sería un triunfo conseguir a Marco Asensio a coste cero.

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Desde el mercado de verano al de invierno, la relación y las conversaciones entre el Real Madrid y Marco Asensio han pasado por todo tipo de escenarios. Asensio tensó las negociaciones con un órdago en el que amenazó con irse libre si no cambiaba su situación deportiva. Se puso en el escaparate de una manera descarada. En el club no gustó la estrategia. Reclamó más minutos tras cerrar una temporada en la que fue más suplente que titular y marcó 12 goles. El tercer mejor registro de la plantilla tras Benzema y Vinícius. Al final del mercado de verano, más calmado, tuvo una conversación con Ancelotti y asumió que tenía que competir por un puesto de titular. A Asensio le quedó claro que era uno más y que la competencia interna era innegociable. La salida de Bale e Isco y la no llegada de Mbappé le podían favorecer. Pero el buen rendimiento de Fede Valverde y Rodrygo le han perjudicado.

Volvió a distanciarse del club por unas declaraciones en la concentración de la Selección en las que no cerraba las puertas al Barcelona. Sentaron muy mal al madridismo y, desde ese momento, en las encuestas que maneja el club los resultados reflejan que los aficionados no son partidarios de su renovación. Mal asunto para el balear, al que parte de la afición le señala por tener un rendimiento irregular y falta de intensidad y carácter. Con la llamada de Luis Enrique se motivó y mostró una versión más competitiva y humilde. El Mundial fue otro punto de inflexión, ayudó a restablecer los contactos y en el mes de enero el Madrid le ha demostrado que cuenta con él cerrando las puertas a los clubes interesados.

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Su postura es darle prioridad al Real Madrid, continuar, pero poniendo condiciones. Quiere sentirse valorado en lo deportivo y lo económico. En el plan de los dirigentes no está una subida salarial (su ficha está en los siete millones de euros brutos). La última vez que se ha manifestado públicamente sobre este asunto fue tras la remontada en la Copa del Rey contra el Villarreal. "La renovación no depende de mí. Se lo tienes que preguntar a otra persona. Ojalá se dé todo bien", comentó. Esa otra persona es Florentino Pérez. El presidente tiene debilidad por Marco Asensio, pero no acepta las pujas y mucho menos que el PSG se meta por medio.