Brahim Díaz cumple en el AC Milan la promesa que le hizo al Real Madrid cuando llegó

Un 27 de julio de 2017, el Real Madrid se enfrentaba al Manchester City en la International Champions Cup, el torneo de verano en el que se miden algunos de los mejores clubes del mundo. Aquel día, el conjunto citizen aplastó a los blancos, goleando por 4 a 1 a los de Zidane... con un joven que lo hizo todo bien en los veinte minutos que estuvo sobre el césped, con un golazo de bandera. Era un tal Brahim Díaz, que solo un año y medio después era fichado por el conjunto del Bernabéu.

Aquel joven mostró un desparpajo pocas veces visto antes sobre un campo, con una capacidad para superar líneas, regatear y generar ocasiones de peligro que pronto le convirtieron en una de las grandes joyas del fútbol español. Por esa razón, el Real Madrid no dudó en desembolsar 17 millones en enero de 2019 para hacerse con el brillante jugador malagueño. Sin embargo, contó con muchas menos oportunidades de lo que se esperaba de un jugador de su proyección.

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Ulises Sánchez-Flor

El día que llegó a la casa blanca, Brahim dejaba claras cuáles eran sus intenciones: "Trabajaré muy duro. Con esfuerzo, humildad y hambre, los minutos llegarán. Las opciones se ganan trabajando duro. Voy a intentar dar lo mejor de mí. Vengo a ganar títulos", afirmaba. Pero, en dos temporadas, solo disputó 21 partidos, en los que anotó 2 goles y dio 2 asistencias. Era el momento de buscar una solución para no perder el espacio de mejora con el que el malagueño contaba.

La falta de minutos de un jugador tan joven y del que se esperaba tanto hizo que tanto el club como el propio deportista entendieran que una cesión era la mejor solución para ambas partes. Fue entonces cuando apareció el AC Milan por el camino y el Madrid no dudó en aceptar la propuesta: tres años con los rossoneri, con una opción de compra por los italianos... y de recuperarlo por los blancos. Y ahora está cumpliendo con creces la promesa que hizo cuando llegó al Madrid.

Brahim lleva tres temporadas demostrando que lo tiene todo para ser un jugador importante en un equipo de primer nivel, tal y como quedó confirmado este martes en la Champions frente al Tottenham. Corría el minuto 7 cuando, tras una buena jugada por la izquierda de Theo Hernández, el disparo del francés fue detenido por Forster... y apareció Brahim. Su primer remate volvió a ser detenido por el meta, pero el español se lanzó en plancha por encima de todos para empujar el balón a la red.

El gol del jugador cedido por el Madrid sirve para confirmar que es uno de los futbolistas más en forma del combinado de Stefano Pioli. En lo que va de curso, ha disputado 26 partidos, en los que ha marcado 5 goles y dado 2 asistencias. En los tres años que lleva en el Milan, ya suma 105 partidos, con 16 dianas a sus espaldas y 10 pases de gol a sus compañeros, que le convierten en una pieza básica para haber devuelto al conjunto italiano la grandeza perdida.

Después de once años de sequía, Brahim fue uno de los encargados de llevar al AC Milan a ganar el Scudetto y, de momento, a ponerle con un pie en los cuartos de la Champions. Cuando finalice la temporada, el jugador es consciente de que llega el momento de resolver su futuro y que dos clubes -si no entra un tercero en discordia en la operación- se pelearán por hacerse con sus servicios. ¿Real Madrid o Milan? Esa es la cuestión para un Brahim que está brillando.

De hecho, el conjunto rossonero ya confirmó hace semanas su intención de hacerse con el jugador. Para ello, deberá abonar 22 millones al Real Madrid... siempre y cuando los blancos no decidan recuperarlo. En ese caso, pagando 5 millones, sería de nuevo jugador madridista, bien para el primer equipo o para tratar de venderlo en una operación secundaria. De momento, Brahim está cumpliendo con la promesa que hizo en su presentación: trabajar para ganar títulos.