El infierno que le espera a Lewandowski en el Barcelona de Xavi Hernández este año

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Robert Lewandowski terminó la temporada siendo el máximo goleador del FC Barcelona y de LaLiga y lo va a terminar... en la picota. La llegada del brasileño Vitor Roque atenta directamente contra su estatus de intocable en la plantilla azulgrana en un momento de máxima tensión para él. Los trapos sucios del vestuario azulgrana se filtraron tras el partido contra el Almería y, según Diario AS, Lewandowski quedó muy señalado con una frase de Xavi Hernández: "¡A ver si empiezas a correr de una puñetera vez!".

La crispación entre técnico azulgrana, delantero centro y Joan Laporta va en aumento con el paso de las semanas. Xavi Hernández no ha dudado en disparar a quemarropa en los últimos encuentros, sabedor de que las críticas rodean su figura. El catalán ha querido centrar el tiro en la falta de puntería y no en el juego global del Barcelona.

"Debemos ser de los peores equipos de Europa en efectividad. Nos pasó en Mallorca, en Granada... Al Atlético le pudimos ganar bien y casi nos empata. El día del Girona nos pudimos poner 2-1 y 3-3... No estamos bien en la efectividad", reveló Xavi Hernández ante los medios de comunicación tras el empate en Mestalla. "Hemos merecido la victoria. Claro. Hemos hecho todo para ganar. Nos pasa siempre lo mismo con la efectividad. Tenemos que ser más contundentes arriba", remató.

Tal y como explicamos en El Confidencial, el Barcelona sueña con enviarlo a Arabia Saudí. El club blindó a Lewandowski hasta los 38 años con un contrato ascendente desvelado por la Cadena SER, donde el primer año ganaría 20 millones de euros (brutos); el segundo, 26; el tercero, 32 y, en el último, otros 26. Y no solo eso, sino que el club fracturó el techo de 10 millones de euros (netos) de la escala salarial que había planeado introducir.

Vitor Roque podría sentar a Lewandowski

Lewandowski está representado por Pini Zahavi​, exsocio de Laporta antes de ser presidente del Barça en esta segunda era. El club catalán pagó 45 millones de euros, más otros cinco kilos en bonus, por un delantero que ese mismo verano cumplió 34 años y en último año de contrato. Ahora el Barcelona pretende retocar el contrato de Lewandowski en el mayor momento de debilidad del delantero de 35 años.

El ariete sudamericano desembarca en Barcelona para sacudir la delantera azulgrana, carente de gol, velocidad, determinación y amenaza al espacio. Todo lo que Lewandowski ha perdido en el último año tras el apagón pos-Mundial. Antes de la Copa del Mundo, el polaco había marcado 18 goles en 19 partidos. ¿Después? 24 goles en 48 encuentros.

"Futbolísticamente, se trata de un delantero centro de formación, pero sus 1,72 metros de pura movilidad le permiten poder caer a ambos lados si así lo requiere el partido. Destaca por su capacidad de asociación, la velocidad de movimientos y de arranque, y por su buena relación con el gol", explicó el Barcelona en sus redes sociales.

Mucha presión para Vitor Roque

La presentación del joven de 18 años a bombo y platillo dispara las expectativas sobre su techo. Por una parte, el club transmite que es un gran delantero de rendimiento inmediato que ayudará a incrementar la potencia de fuego azulgrana y puede reemplazar a Lewandowski, mientras que, por el otro, no quiere cargar de máxima presión al goleador brasileño.

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Quien sale perdiendo en esta operación es claramente Robert Lewandowski, peso pesado del vestuario, aunque el propio Vitor Roque quiso mandarle un mensaje nada más aterrizar en la Ciudad Condal. "Tengo muchas ganas de jugar con Lewandowski. Y, claro, también con Raphinha". Las prisas del Barcelona por traer a Vitor Roque denotan la falta de confianza en Lewandowski y la necesidad de destruir las jerarquías que se estaban instalando en el vestuario culé.