"Piqué es el agitador culé: la 'Decimocuarta' es la Champions más espectacular de la historia"

Como escribe Juanma Trueba en el prólogo, "a partir de las últimas remontadas del Real Madrid, encadenadas en la consecución de la decimocuarta Copa de Europa, el autor echa la vista atrás para hallar el germen del prodigio". En esto puede decirse que consiste Historia de las míticas remontadas del Real Madrid, el libro de Salva Martín (Melilla, 1985), quien precisamente se ha remontado, en su caso en el tiempo, para seleccionar aquellos momentos en los que el equipo blanco forjó su leyenda, especialmente en las competiciones continentales. Desde aquellos lejanos octavos de final de la Copa de Europa 1975-76 contra el Derby County a la llamada Champions de los milagros de la temporada 2021-22.

Aunque Historia de las míticas remontadas del Real Madrid es una obra recomendada para todos los públicos, en el caso de los madridistas es de lectura obligada. No solo para recordar y disfrutar de algunas de las grandes gestas de su equipo, sino también para entender ese gen competitivo y ganador del club que hizo grande Santiago Bernabéu, quien no en vano da nombre a un estadio, ahora en plena remodelación, en el que, como dijo el difunto Juanito, los partidos son molto largos.

Poco más se puede decir, pues todo está dicho en esta laboriosa y completísima obra de la editorial Almuzara, aunque tampoco estaba de más hablar con Salva Martín para conocer sus conclusiones después de tantas horas recopilando un sinfín de datos, escribiendo con tanta pasión una historia que, como el mismo autor asegura en el epílogo, aún le queda por hacer, e intentar explicar lo inexplicable.

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PREGUNTA. Además de tu madridismo declarado y tu evidente gusto por la literatura, ¿qué te llevó a escribir este libro?

RESPUESTA. La idea de un libro que, por primera vez, recogiera todas las remontadas europeas del Real Madrid y sus contextos, crónicas, anécdotas y testimonios surgió en la eliminatoria contra el PSG de la decimocuarta Copa de Europa. Cuando Alaba levantó la silla, en una imagen que ya es icónica para la competición y el madridismo, me vino a la mente los saltos de Juanito al ser sustituido en la remontada ante el Borussia Mönchengladbach. Ambos gestos, con su espontaneidad y felicidad natural y sincera, estaban unidos en un hilo que merecía escribirse.

"Cuando Alaba levantó la silla me vino a la cabeza Juanito dando saltos. Ambos gestos estaban unidos en un hilo que merecía escribirse"

P. Aunque igual no te resulta fácil quedarte solo con una, ¿cuál es tu remontada favorita de las once que has seleccionado en tu libro?

R. Vistas y revividas todas, me quedo con la fundacional, la del Derby. Es cierto que la de las Copas de la UEFA fueron espectaculares y apoteósicas, que las que llegaron después —Estrella Roja, Bayern, Wolsfburgo, etc.— solidificaron la leyenda, y que las últimas directamente escapan a la razón. Pero aquella, con Camacho, Santillana y Juanito, puso el germen de lo que hoy es una de las historias más maravillosas del fútbol.

P. El periodista argentino Dante Panzeri calificó el fútbol como la dinámica de lo impensado. ¿Quizás el Real Madrid es un claro ejemplo de ello?

R. Puede serlo, sí. Sobre todo en Europa. El Madrid tiene un vínculo especial con la Copa de Europa, y no es casual. Vive a gusto en el alambre, no le asustan los precipicios, parece divertirse haciéndose el muerto. Quien se confía con el Madrid, está cavando su propia tumba.

"El Real Madrid vive a gusto en el alambre y parece divertirse haciéndose el muerto. Quien se confía ante él, está cavando su propia tumba"

P. El 6-1 al Anderlecht en la Copa de la UEFA fue la primera gesta del Madrid de La Quinta del Buitre, con un protagonismo especial precisamente de Butragueño. ¿Qué explicación encuentras para que aquel equipo no ganara la Copa de Europa?

R. Efectivamente, la espina de La Quinta es la Copa de Europa. Fue la generación pionera en España del fútbol total. Antes del Barcelona de Cruyff, y en el libro se explica con detalle, Beenhakker —que también bebía de la escuela de Rinus Michels— apostó por un juego en el que primaban el talento, la movilidad y la ocupación de los espacios. En la Liga arrasaron, pero en Europa, aunque lograron alguna épica remontada, no superaron la frontera del PSV, primero, y del Milan de Sacchi después. Eso sí, como curiosidad, hay que decir que La Quinta, o parte de ella en la figura de Sanchís, sí logró la Champions. Cuando el Madrid conquistó la Séptima, con el central de titular junto a Hierro, lo primero que hizo fue llamar por teléfono a su compañeros de generación para decirles que el título también era suyo.

P. En aquel partido contra el equipo belga nació lo del miedo escénico. ¿Realmente lo acuñó Jorge Valdano, a quien tú defines como alma intelectual del madridismo, o solo lo aplicó con la precisión literaria que le caracteriza?

R. Jorge Valdano ha dicho alguna vez, y lo comparto, que el Real Madrid históricamente ha carecido de un relato. Su obligación de ganar ha jugado precisamente en su contra, mientras otros rivales se han creado un halo de equipo del pueblo o de adalid de un estilo determinado. El término miedo escénico, que el argentino cogió prestado de García Márquez, en el caso del Madrid y sus remontadas amplía su sentido. No solo insufla en los blancos una fuerza sobrenatural que les hace jugar por encima de sus posibilidades y de la lógica, sino que paraliza a los rivales, que de gigantes pasan a seres vulnerables con el único anhelo de salir corriendo cuanto antes del terreno de juego.

"El miedo escénico insufla a los blancos una fuerza sobrenatural que les hace jugar por encima de la lógica y paraliza a los rivales"

P. Míchel, el protagonista de aquella remontada, se quejó de que a los jugadores de casa se les trataba peor. ¿Por qué es tan difícil que los canteranos triunfen en el Madrid?

R. No existe afición más exigente que la del Santiago Bernabéu. Con los canteranos sucede que ilusiona la salida de un nuevo Butragueño, Raúl o Casillas. Pero también es cierto que les piden como al que más y desde el primer momento. Los datos están ahí. Desde 2009, sólo cuatro jugadores de la cantera se han afianzado en el primer equipo: Nacho, Carvajal, Lucas Vázquez y Arbeloa. El resto ha tenido que irse a jugar a otro club. El modelo del Madrid pasa por la excelencia, la rentabilidad —ahora mismo hay 44 canteranos en las cinco grandes ligas— y la escasa paciencia.

"¿Los canteranos? No hay afición más exigente que la del Bernabéu y el modelo del Madrid es la excelencia, la rentabilidad y la escasa paciencia"

P. ¿No crees que resulta un poco paradójico que el equipo más laureado del mundo sea también el que posiblemente haya recurrido más veces a la épica?

R. Aunque mucha gente piense lo contrario, el Real Madrid nunca lo tuvo fácil a lo largo de su historia. En los primeros años, vivió a la sombra de los equipos del norte, hasta que llegaron los años de la II República. Es entonces cuando, gracias a fichajes estratégicos como Zamora, Ciriaco y Quincoces, comenzó a ganar y labrarse un aura de campeón, pero la guerra le hizo empezar de cero y no precisamente con la anuencia del Régimen, que puso sus esperanzas —y su dinero— en el Atlético Aviación. Ni siquiera el inicio triunfante en Europa le resultó sencillo. La primera final, contra el Stade de Reims en 1956, ¡comenzó perdiendo 2-0! Sí, las remontadas del Real Madrid clavan su origen en el propio inicio de la competición. La épica forma parte del ADN blanco.

P. Como recoges en tu libro, tras la remontada ante el Borussia Mönchengladbach, Molowny dijo que la droga del Real Madrid era su público. ¿Hasta qué punto crees que influye la grada del Bernabéu?

R. Molowny acertó de pleno. Las remontadas del Real Madrid tienen tres claves. La primera es perder y, si puede ser, de manera estrepitosa fuera de casa. Que todo parezca perdido. La segunda es la gestación dentro del propio vestuario de la idea de que se puede revertir la situación en el Bernabéu, de que nada está perdido hasta que finalice el partido de vuelta. Y, la tercera, como señaló el canario, es el traslado de ese sentimiento a la afición, la mágica simbiosis que se produce entre los jugadores y Chamartín. En los ochenta, para caldear todavía más el ambiente, el equipo dejaba al rival calentar solo en el césped. Así recibía toda la presión y el estallido era mayor en la salida de los blancos. Cuando el Bernabéu implosiona, no hay equipo que resista el vendaval del Real Madrid.

"Molowny acertó. Las remontadas del Madrid tienen tres claves y la primera es perder y, si puede ser, de manera estrepitosa fuera de casa"

P. De ahí también la mítica frase de Juanito de "noventa minuti en el Bernabéu son molto longo"… ¿Sobre todo teniendo a depredadores del área como Santillana, Hugo Sánchez, Raúl, Cristiano, Benzema y ahora Bellingham, no?

R. Remontar no es un mérito que surja de forma espontánea. Si el Real Madrid ha forjado una leyenda respecto a esta manera de vencer se debe, sin duda, a sus principales protagonistas. Como dices, teniendo de tu lado a Santillana, Juanito, Hugo, Camacho o Raúl, entre otros, es imposible no creer en los milagros. Bellingham tiene 20 años y, si quiere, toda una vida vestido de blanco. Seguro que vivirá la experiencia de una remontada europea con el Real Madrid.

"Bellingham tiene 20 años y, si quiere, toda una vida vestido de blanco, por lo que vivirá la experiencia de una remontada europea, seguro"

P. ¿Es el Bayern de Múnich el equipo ante el que el Madrid siempre ha tenido que poner un plus, quizás porque precisamente es el que históricamente más se le puede asemejar?

R. Hubo un tiempo en el que, tanto para el Madrid como para cualquier equipo español, visitar Alemania era una pesadilla indeseable. Aquellos tipos eran más rápidos, más altos y hasta más guapos. Lo normal era venirse con una goleada en la mochila. Y el Bayern, por supuesto, era el jefe de todas las bestias negras. Fíjate que el Real Madrid no ganó en su casa en partido oficial hasta las semifinales de Champions de 2014, cuando consiguieron aquel histórico 0-4. Pero antes, como se cuenta en el libro, sí se produjeron varias remontadas memorables ante los bávaros.

P. ¿Consideras que el Madrid encarna como nadie la idea de que en el fútbol ganar es lo único importante?

R. Para el Real Madrid, es cierto, solo vale la victoria y no se rinde jamás. No es un lema, es una realidad. Si algo no perdona el Bernabéu es la indolencia, por eso le costó tanto a Benzema. Es hermosamente irracional sentir las ovaciones que se dedican a las recuperaciones de balón, como la de Modric ante Messi en la eliminatoria del PSG de 2022. Ganar es lo más importante, pero el camino también importa en Chamartín. El fútbol, como ha dicho Javier Marías, es la recuperación semanal de la infancia, por lo que nadie dude de que al madridista le gusta sentirse un niño en su estadio.

"Es hermosamente irracional sentir las ovaciones que se dedican a las recuperaciones, como la de Modric a Messi contra el PSG en 2022"

P. Al revisar su historia para revisar y seleccionar las remontadas, ¿no has llegado a echar de menos que el fútbol del Madrid sea reconocido más allá de sus incontables victorias?

R. Es cierto que, en ocasiones, la obligación de la victoria eclipsa otros parámetros del juego. Pero pienso que el Madrid ha gozado de grandes técnicos, como el propio Molowny, Beenhakker, Valdano o Ancelotti, por poner varios ejemplos, que han dejado su impronta con un fútbol memorable.

"Es cierto que, en ocasiones, la obligación de la victoria eclipsa otros parámetros del juego. Pero el Madrid ha gozado de grandes técnicos"

P. Mención especial merecen las finales contra el Atlético de Madrid, con el gol de Ramos en el 93 en la primera. ¿El sino del Atleti es justo el contrario que el del Madrid o eso con Simeone ya no vale?

R. Para el Atlético de Madrid, las dos finales de Champions, una con una gran remontada blanca y otra perdida en los penaltis contra su máximo rival, entiendo que son muy duras. Pero considero que ser verdaderamente grande implica dejar de mirar a tus rivales y centrarte en ti mismo. Me encanta la filosofía de Simeone, creo que es la más adecuada para el Atleti, aunque a veces caiga en el victimismo, pero lo comprendo. Es parte del show.

"Capello lo advirtió ante el City: "Esperad, que es el Madrid". Es muy difícil vivir una remontada en el Bernabéu y salir sin creer en la magia"

P. Después de haber leído tanto sobre las remontadas del Real Madrid para poder escribir tu libro, ¿has llegado a pensar en algún momento en la existencia de algo paranormal?

R. Si algo demuestra la trayectoria de las remontadas del Real Madrid, que se iniciaron en 1975 contra el Derby County y tienen su último hito en las de 2022, es que el Real Madrid convierte lo paranormal en un hecho cotidiano. En los últimos minutos del partido contra el City de la Decimocuarta, Capello, comentarista en una televisión inglesa, advirtió a los narradores que ya especulaban con el rival de la final para los de Guardiola: "Esperad, que es el Madrid". Y ya sabemos lo que sucedió después. Es muy difícil vivir una remontada en el Bernabéu y salir de allí sin creer en la magia.

P. ¿Puede decirse que el primer representante de las míticas remontadas fue Pirri, recientemente nombrado Presidente de Honor, en la eliminatoria ante el Derbi County?

R. Sí, y debo decir que nadie como Pirri representa el espíritu del Real Madrid. Por su calidad como futbolista, su espíritu guerrero y su trayectoria profesional. Pirri fue de lo poquito que se salvó en la ida de aquella eliminatoria —anotó un gol y le anularon otro—. Y, ya en la vuelta, anotó un penalti crucial que dejó al Bernabéu literalmente en silencio.

"Nadie como Pirri representa el espíritu del Real Madrid. Por su calidad como futbolista, su espíritu guerrero y su trayectoria profesional"

P. ¿Y el jugador que mejor representa es el espíritu del Madrid de las remontadas?

R. Esta es fácil. Nadie como Juanito. Que el Bernabéu lo recuerde en cada partido, junto a Santillana, dicho sea de paso, es uno de los valores que no se deberían perder nunca. Juan no conocía el sentido de la palabra perder ni tenía el mínimo interés en saberlo. Además de un futbolista de raza, como siempre se destaca, tenía un talento descomunal y era amigo de sus compañeros, clave fundamental. Los líderes no lo son por el volumen de sus discursos, sino por la verdad de sus palabras. Y Juanito era, más que nada, pura verdad.

"Juanito no conocía el sentido de la palabra perder ni tenía el mínimo interés en saberlo. Era un futbolista de raza y un talento descomunal"

P. ¿Sabrías hacer un once de las remontadas?

R. Esta sí es complicada, porque alguno se quedará fuera. Pero vamos allá. Courtois; Camacho, Sanchís, Pirri, Chendo; Juanito, Gallego, Modric, Míchel; Santillana y Butragueño. ¿Te imaginas un equipo así?

P. ¿Y el entrenador ideal para liderar un remontada?

R. Las remontadas no demandan o exigen tácticas ni pizarrassino, más bien mentalidad y psicología. Son la perfección dentro de un caos premeditado. Por ello, me quedaría con técnicos que, por trayectoria y filosofía, manejaron estos conceptos: Molowny, Beenhakker y Ancelotti.

"Piqué está en su papel, que es el de agitador culé que piensa que menospreciando los éxitos del máximo rival incrementa la propia valía"

P. Para acabar, ¿qué pensaste al escuchar unas recientes declaraciones de Piqué , en las que decía que nadie recordará la última Champions del Real Madrid?

R. Creo que no solo el madridismo, sino todo el mundo del fútbol se sonrió al escuchar las declaraciones de Piqué. Está en su papel, que es el de agitador culé que piensa que menospreciando los éxitos del máximo rival incrementa la propia valía. No solo se recordará la Decimocuarta, sino que es la trayectoria hacia una Champions más espectacular y brillante de la historia.