España destroza a Georgia con tres goles de Morata y el debut histórico de Lamine Yamal (1-7)

España se da un festín de goles en Georgia. Con un hat-trick de Morata, enchufadísimo el delantero centro, y un dominio total se comportó como un rodillo. La goleada la cerró el joven Lamine Yamal (16 años) en un debut para la historia. No se podía meter en un lío en el tercer partido de la clasificación para la Eurocopa de 2024, tras la derrota contra Escocia, y lo solventó con lo mejor que puede tener un equipo. El gol. Era un examen a Luis de la Fuente y al compromiso de los futbolistas.

La Selección llegó a Tiflis con el percance de dejarse el material deportivo en Madrid. Los jugadores no tenían las botas ni los guantes para entrenar el día antes del partido. Llegó de madurada. Un episodio rocambolesco. Con esta anécdota y un clima de crisis por el escándalo Rubiales, el foco estaba puesto en qué respuesta tendría el equipo de Luis de la Fuente en el campo. Salió una buena versión de España. Ganó con absoluta superioridad a un flojo rival, con un planteamiento rácano en la primera parte. Georgia plantó un muro, renunció al ataque y en 40 minutos encajó cuatro goles (dos de Morata, uno de Dani Olmo y otro en propia puerta).

El triunfo es un balón de oxígeno para Luis de la Fuente y una Selección que juega el martes contra Chipre y tiene en el mes de octubre partidos de más dificultad contra Escocia y la Noruega de Haaland. Ganar a Georgia ayuda a recuperar la estabilidad en lo deportivo, coger confianza y aislarse de los asuntos extradeportivos que salpican a la Federación. Es el primer partido con Pedro Rocha como presidente en funciones. Una victoria para poner calma en días turbulentos, que sirve de anestesia.

La Selección entró al partido con determinación y el propósito de hacer daño por las bandas. Georgia se plantó en su campo, a esperar, no dar espacios, hacerse compacta y resistir para robar y salir al contraataque. De la Fuente avisó de un rival duro, agresivo, con peligro en el juego directo. No se vio nada de esto. Georgia dio la pelota a España, no tuvo agresividad y se fue al descanso sin disparar a la portería de Unai Simón.

Morata, golazo de cabeza

El partido quedó en manos de España. Empezó con una ocasión peligrosa de Marco Asensio en el primer minuto que tuvo que revisar el VAR por unas posibles manos de un defensa. No se pitó penalti. Se vio el guion del partido. España ponía cerco por las bandas con las llegadas de Carvajal y los centros de Asensio al área por el costado derecho. Por la otra banda profundizaron Gayá y Dani Olmo. Todos buscaban a Morata. Balones al área, un remate, un rechace y una segunda jugada.

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España desarmó a Georgia a los 20 minutos con un centro de Marco Asensio y un excelente remate de cabeza de Morata. El capitán se suspendió en el área y el golpeo picado al balón superó al portero Mamardashvili. Un golazo que abrió el cerrojo y que tuvo continuidad con los mejores minutos del equipo de De la Fuente. A los cinco minutos llegó el segundo en una internada de Fabián Ruiz al área. Su centro, tenso, fue desviado por un defensa. Gol en propia puerta. El partido se puso de cara, España encontraba la contundencia y quería más. Georgia estaba en la lona y a Fabián Ruiz le anulaban un gol por fuera de juego que tuvo que revisar el VAR.

La Selección pisó el acelerador y siguió con el destrozo. Dani Olmo hizo el tercero en una jugada individual, de verticalidad y un disparo ajustado. Era un rodillo ante un rival asustado, sin respuesta ni soluciones para frenar el vendaval de España. Llegó el cuarto en una recuperación de Fabián Ruiz y la definición de Morata. Todo salía perfecto para España. Dominaba, hacía goles y no sufría en defensa. Las noticias más tristes fueron las lesiones de Dani Olmo y Marco Asensio. Ambos se sentaron en el césped. En su lugar entraron Iñaki Williams y el jovencísimo Lamine Yamal. Un día histórico para el extremo del Barcelona, que se estrena en la Selección con 16 años y 57 días. Participó con el séptimo gol.

El gol de Lamine Yamal

En la segunda parte reaccionó Georgia con un inicio más agresivo y un planteamiento más ofensivo. Consiguió el gol en un centro desde la banda y un fallo múltiple en defensa de Le Normad, Laporte y Gayá. Ninguno llegó a despejar el balón que aprovechó Chakvetadze para darle un punterazo y sorprender a Unai Simón. El portero del Athletic no consiguió bloquearlo. Era otro partido más incómodo para España. Georgia se sintió humillada en la primera parte, tiró de orgullo y un fútbol vertical para lavar la imagen. Duró poco.

España volvió a coger el balón, lo agarró, se quitó los agobios y llegó el tercer gol de Morata. El quinto de España en una noche lluviosa con pase filtrado de Mikel Merino y remate de Morata para superar al portero georgiano. Álvaro Morata, protagonista del encuentro, llega a los 33 partidos en su partido 67. El gol hundió más a Georgia y lo aprovechó Iñaki Williams con una acción individual para definir con eficacia y fortuna. El balón entró por debajo de las piernas del portero. La guinda la puso Lamine Yamal con el séptimo gol en otra gran jugada de Iñaki Williams. Yamal definió con un zurdazo. Un día inolvidable para el chaval de 16 años y sanador para Luis de la Fuente.