La pregunta trampa de Laporta al socio culé por el modelo de propiedad y el cierre de Barça TV

El Barcelona tantea al socio con una encuesta en la que incluye la pregunta sobre el modelo de propiedad que más conviene al club. Desde la directiva niegan que sea una estrategia para ir preparando el terreno al cambio, pero la lanza en la coyuntura del enorme coste que suponen las obras del Espai Barça, tras la visita de Laporta a Ceferin para explicarle el caso Negreira y evitar una sanción de la UEFA, los puentes que tiende con la Liga para intentar el regreso de Messi y la necesidad de rebajar la masa salarial y poder hacer frente a las inscripciones de futbolistas, como Gavi, que están en situación de riesgo. La pregunta llega en un escenario crítico en el que el club decide prescindir del canal oficial de televisión, con el despido de 150 profesionales, para recortar gastos. La entidad azulgrana calcula un ahorro 13 millones de euros anuales. Tras 27 años de emisión es el final de Barça TV. El cierre está programado para el 30 de junio.

La viabilidad del Barcelona, la solución definitiva que podría poner fin a la asfixia económica, está en esta pregunta trampa. "Actualmente, el Barça es propiedad 100% de los socios/socias y las decisiones importantes deben aprobarse en una asamblea general o en un referéndum donde todos/as tienen voz; en su opinión, ¿qué modelo preferiría para el FCB?", y da cinco opciones. La primera es seguir como hasta ahora con propiedad del 100% para los socios/as. La segunda tiene el matiz de "optar" para ser sociedad anónima deportiva con accionistas. La tercera ofrece un modelo mixto donde al menos el 51% es de los socios/as. Y las dos últimas son ninguno de los modelos anteriores y un no lo sabe. En los sondeos se detecta una aceptación al modelo mixto.

La situación sigue siendo delicada en las arcas del Barcelona, el club más afectado en pérdidas por la pandemia del coronavirus y unas medidas de urgencia que llevaron a Laporta y su directiva a activar cuatro palancas para tener liquidez. Se vendieron activos que supusieron unos ingresos de 800 millones de euros y sirvieron para cerrar el ejercicio de la temporada pasada en positivo y hacer fichajes. Laporta vendió activos del club e hipotecó futuros ingresos. Ahora desliza una pregunta a los socios que viene cocinándose desde hace dos años en las esferas de poder del Barcelona y cuando se hizo cargo de la presidencia.

La deuda asfixia

Laporta llegó con el discurso de un Barcelona en la UVI. Tras la traumática decisión de incumplir la promesa de la renovación de Messi, tomó una decisión que era impopular, pero la sacó adelante. Consiguió que el Camp Nou tuviera apellido. Cerró un acuerdo con Spotify como principal patrocinador de las camisetas del primer equipo masculino, femenino, las de entrenamiento y poner su nombre en el estadio. Todas las medidas adoptadas no dan para pagar la deuda y surge la pregunta del modelo de propiedad.

El Barcelona, junto con el Real Madrid, Athletic y Osasuna, son los únicos clubes que son de sus socios. Pero el Barça ya tiene el apellido en el estadio. Al estilo del Allianz Arena, el estadio del Bayern de Múnich. Por aquí van los tiros de los círculos de poder en el Barcelona. Un modelo de propiedad mixto al estilo del club alemán, con la gestión de los socios/as y los patrocinadores.

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Joan Laporta ha puesto el caramelo después de cerrar el acuerdo de financiación del Espai Barça en el que han entrado 20 inversores que prestarán 1.450 millones de euros para las obras que están a cargo de la empresa constructora turca Limak. Es un caramelo con trampa porque a los socios les va a costar una subida del 40% del abono ver a su equipo en el estadio Montjuic y por recortes de aforo no hay sitio para todos. La gestión económica de Laporta, con Spotify y las palancas, ha llegado hasta donde ha podido, pero no es suficiente. El presidente se dirigió a los socios, en el mes de febrero, para decirles que habían salvado al Barça de la ruina económica, que la deuda está controlada y que se han tomado decisiones para estabilizar la tesorería. El siguiente paso es que se piense el modelo de propiedad.