Es noticia
El motivo por el que Marcelo no se mueve del Real Madrid... y su hijo Enzo le retiene
  1. Deportes
  2. Fútbol
DESPEJADA LA DUDA SOBRE SU FUTURO

El motivo por el que Marcelo no se mueve del Real Madrid... y su hijo Enzo le retiene

El brasileño está feliz en el club. Comunica su compromiso de superarse, recuperar su mejor versión, y a todo esto se une el éxito de su hijo en la cantera del Real Madrid

Foto: Marcelo, durante un entrenamiento del Real Madrid en la Ciudad Deportiva de Valdebebas. (EFE)
Marcelo, durante un entrenamiento del Real Madrid en la Ciudad Deportiva de Valdebebas. (EFE)

Hay Marcelo para rato en el Real Madrid, y no solo porque le quedan tres temporadas de contrato y el regreso de Zinédine Zidane le beneficia. El brasileño está feliz en el club. Ha comunicado su compromiso de mejorar y recuperar su mejor versión en una temporada en la que por diferentes causas —lesiones y decisiones técnicas de Solari— no ha estado en su mejor forma física. El motivo por el que no quiere escuchar ofertas de otros clubes y en el Real Madrid le cierran las puertas es también personal. A la familia de Marcelo no le apetece nada hacer las maletas y marcharse de España. Mucho menos cuando el hijo mayor —Enzo— destaca en su segunda temporada en las categorías inferiores.

Zidane ha dejado bien claro cuál es su opinión sobre el futuro de Marcelo en el Real Madrid. Después de la derrota en Mestalla, donde el brasileño no tuvo una buena actuación, fue capaz de defenderle públicamente con estas palabras: “Marcelo es Marcelo. Lo veo bien y a mí me gusta cómo juega. Entrena bien y lo veo metido. La temporada ha sido complicada”. La defensa del entrenador es un respaldo a las ganas que tiene el brasileño de hacer borrón y cuenta nueva. Necesita, como todos, que acabe esta temporada y cargar pilas. Para Zidane, es un futbolista al que, a sus 30 años, considera un valor importante por su liderazgo, profesionalidad y talento.

Foto: Benzema celebra un gol en el partido contra el Eibar en el Bernabéu. (EFE)

A ello se suma el componente sentimental. La familia de Marcelo está muy adaptada a la vida en Madrid, y ahora con más razones cuando ven cómo su hijo mayor se integra y crece en las categorías inferiores del Real Madrid. Enzo Alves Vieira es el orgullo de Marcelo y su esposa, Clarice. El domingo pasado estuvieron, como en otras ocasiones en que el calendario permite al segundo capitán del equipo ver los partidos de su hijo, en Moratalaz. No era un encuentro más. Fue el día en que el benjamín A se proclamó campeón del Grupo 7 de la división Preferente. Una mañana de felicidad para la cantera y la familia de Marcelo, que disfrutó al ver a Enzo haciendo diabluras y sintiendo la felicidad de poder jugar en el Real Madrid.

Enzo, un delantero total

Enzo tiene nueve años, lleva el dorsal ’12’ —como su padre— y juega de delantero. Tiene olfato y se le ve ese talento del ‘jugón’. Ha conseguido marcar 24 goles. Es su segunda temporada en el filial blanco. Venía de jugar tres años con el Santa Ana y la temporada pasada, en su debut con el benjamín B, hizo tres goles: uno con cada pierna y otro con la cabeza. En el club lo califican como "un niño hábil, potente, con mucha movilidad, que sabe leer bien las jugadas y tiene una excelente finalización". Enzo es el motivo principal por el que Marcelo, si tenía alguna duda de que su ciclo en el Real Madrid estaba acabado, no se mueve del equipo blanco.

Marcelo —como todo padre— tiene pasión por su hijo y disfruta viendo cómo en el Real Madrid progresa futbolísticamente y recibe una educación con valores. Un niño que es especial en el vestuario del primer equipo y que protagonizó un reto que se hizo viral junto a los jugadores, a una semana y media de la disputa de la final de la Champions contra el Liverpool. Enzo entró al vestuario y demostró su talento. Se pasó la pelota con la cabeza con todos los jugadores hasta llegar a Sergio Ramos y meter el balón en el saco de balones. Fue manteado por la plantilla en una de las imágenes que salieron a la luz del buen rollo que había en el vestuario a pocos días de jugarse un título. El arraigo de Marcelo, después de 13 temporadas en el Real Madrid, trasciende lo personal y no oculta cuál habría sido uno de sus sueño: "Me hubiera gustado ser un canterano más del Real Madrid". Llegó en 2006, con 18 años, y ahora tiene a su hijo de nueve causando furor en las categorías inferiores.

Hay Marcelo para rato en el Real Madrid, y no solo porque le quedan tres temporadas de contrato y el regreso de Zinédine Zidane le beneficia. El brasileño está feliz en el club. Ha comunicado su compromiso de mejorar y recuperar su mejor versión en una temporada en la que por diferentes causas —lesiones y decisiones técnicas de Solari— no ha estado en su mejor forma física. El motivo por el que no quiere escuchar ofertas de otros clubes y en el Real Madrid le cierran las puertas es también personal. A la familia de Marcelo no le apetece nada hacer las maletas y marcharse de España. Mucho menos cuando el hijo mayor —Enzo— destaca en su segunda temporada en las categorías inferiores.

Marcelo Zinédine Zidane Sergio Ramos
El redactor recomienda