Quién es el rico o por qué el Atlético ficha tanto y el Real Madrid tan poco

¿Quién manda en la capital? Es un cántico que se ha convertido en un grito de guerra entre atléticos y madridistas y que lo utilizan como arma arrojadiza cada vez que celebran un título. El último pique entre jugadores lo vimos en la celebración de la Europa League cuando Juanfran cogió un megáfono de los aficionados para enviar un recado a los vecinos y Theo se lo devolvió, con el micrófono, cuando subió a la Cibeles a festejar la Champions. La rivalidad en el foro ha ido creciendo con el paso de los años desde que Simeone ha puesto al Atlético a la altura de los grandes de Europa y es capaz de competir por la Liga o superar, como se vio en la última, al Real Madrid de Zidane.

Para mandar, no sólo en la capital, hay que reforzar los proyectos y mejorar unas plantillas que ya de por sí tienen excelentes futbolistas e internacionales que han sido campeones del mundo con Francia. En este mercado de fichajes, el Atlético va un paso o alguno más por delante del Real Madrid por cómo se está moviendo con astucia y celeridad. La gran diferencia en la planificación está en que unos han conseguido que se quede Griezmann y otros le han tenido que abrir la puerta a Cristiano Ronaldo. Sólo con este movimiento estratégico se puede decir que Simeone ha visto apuntalado su proyecto mientras que el de Lopetegui se ha quedado huérfano de un crack que traslada su carro de goles a Italia.

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La austeridad de la que está haciendo gala Florentino Pérez en este mercado de fichajes veraniego contrasta con la de los dirigentes del Atlético de Madrid, que en los próximos días pretenden cerrar los fichajes del francés Thomas Lemar, el portugués Gelson Martins y el croata Nikola Kalinic. Más munición para un Simeone que puso la primera piedra el día que se presentó en casa de Griezmann, acompañado de Gil Marín -director general ejecutivo- y Andrea Berta -director deportivo-. Un movimiento estratégico que fue decisivo para convencer al futbolista francés que su crecimiento, pese a las críticas de un sector de la afición rojiblanca, pasaba por quedarse para ganar la próxima Champions en el Wanda Metropolitano.

Con Griezmann comprometido y nuevamente ilusionado no se han conformado en el Atlético que han ido puliendo la plantilla con el fichaje de Rodri y las renovaciones de Lucas Hernández -uno de los mejores futbolistas del Mundial-, Giménez y Juanfran. Han salido dos mitos como Fernando Torres y Gabi y llegarán fichajes más jóvenes e interesantes como Thomas Lemar, Gelson Martins y Nikola Kalinic. También cerró el de Nehuen Pérez -joven central argentino de 18 años que se queda cedido en Argentina Juniors-. Por el extremo francés Lemar pagarán 70 millones de euros. Un fichaje que ya está cerrado. Quedan por definir los otros dos. En la operación Gelson Martins se negocia con el Sporting de Lisboa para pagar 15 millones de euros y ceder a Vietto más el portero André Moreira. Simeone quiere más y se ha fijado en el delantero croata del Milan, Nikola Kalinic, que vendría para entrar en las rotaciones y dar respiros a Diego Costa.

300 millones de diferencia en presupuesto

Tiene buena pinta la plantilla que está haciendo el Atlético mientras que en el Real Madrid no encuentran el resquicio para que el Paris Saint Germain se abra a una negociación por Neymar y tampoco se lanzan a por otro fichaje estrella como Eden Hazard. Florentino se niega a romper el mercado pagando una cantidad millonaria si no es por Neymar. Lopetegui no tiene mala plantilla, pero le hace falta un delantero como el comer después de las salidas de Morata, Mariano y Cristiano Ronaldo en menos de un año. Con los fichajes de Courtois y Odriozola se mejoran las espaldas del equipo, pero falta y es necesario calzarlo bien por los pies.

Queda verano y mercado por delante -con el condicionante de que en Inglaterra cierran el 9 de agosto-, pero hoy el Atlético parece el rico de la capital por la alegría con la que gasta el dinero -con un presupuesto de 400 millones de euros- en comparación con la rigidez económica del Real Madrid -con un presupuesto que supera los 700 millones de euros-. Ya hay quién se pregunta si Florentino está guardándose la pasta para gastarla en la faraónica reforma del nuevo estadio Santiago Bernabéu que tiene un coste de 400 millones de euros.

Opinión

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