"Está impaciente por ganar y aceptaría una oferta": Verstappen enfila la puerta de Ferrari
Verstappen ha tenido cinco averías en ocho carreras, y Bakú fue la guinda a un 'annus horribilis' que le puede llevar a Ferrari en 2018. Que ocurra dependerá de Red Bull... y Kimi Raikkonen
Si existiera un premio a la cadena más innovadora que emite la Fórmula 1, se lo llevaría la holandesa 'Ziggo Sport'. El lugar donde retransmiten las carreras no es el típico plató, sino un escenario que simula un bar. Ahí montan una barra y los aficionados acuden a ver un distendido programa donde los contertulios beben cerveza Heineken y toman frutos secos. Todo es muy particular, hasta el punto de que hablan con Max Verstappen desde su casa a través de Skype. Este lunes, dejó un polémico mensaje. "El miércoles voy al simulador: allá al menos no se romperá el motor".
LAP 13/51:
— Formula 1 (@F1) 25 de junio de 2017
RED BULL 📻: "Max, that is the end for us. Sorry."#AzerbaijanGP 🇦🇿 #F1Baku pic.twitter.com/V24IjhqUeu
Verstappen esbozaba una sonrisa, pero la realidad es que 2017 está siendo un 'annus horribilis' que ya le está llevando a plantearse su marcha de Red Bull. 24 horas antes había sufrido en Azerbaiyán la enésima avería de la temporada. Ya le ocurrió en China, Baréin y Canadá, siempre por fallos del motor o la mecánica, además de un accidente en España donde no tuvo la culpa. Para colmo, su compañero Daniel Ricciardo ganó una carrera donde tenía el podio al alcance, como mínimo. En el horizonte suena el nombre de Ferrari, pero Helmut Marko le tiene atado a largo plazo. Ahora se abre un periodo incierto que marcará su carrera deportiva.
Bakú, el 'colmo' del descontento
Aquella videoconferencia fue su primera aparición pública tras el abandono. En Bakú, fruto del enfado, se negó a hablar con los medios de comunicación. La FIA le impuso una multa de 25.000 euros por incumplir el reglamento, pero la mente de Verstappen ya estaba ocupada en asimilar cómo se le habían ido por la borda dos carreras brillantes: si en Canadá no acabó en el podio por una avería en el motor, otro problema casi idéntico le dejó tirado en los libres de Bakú y le remató una posible victoria el domingo. No solo le dolió por ver a Ricciardo en lo más alto, sino porque se perfilaba como su mejor fin de semana del año.
"Visto que Ricciardo lleva ya tres podios y una victoria, y tú cuatro abandonos, ¿hay margen para la conspiración?", le preguntaron en directo. Verstappen negó la mayor y defendió a Red Bull a capa y espada. No así a Renault, que tiene un registro de fiabilidad parecido al de Honda. "Lo de Bakú fue un problema de motor, y por desgracia, no es la primera vez que ocurre". Su jefe, Christian Horner, intentó animarle como pudo. "Ricciardo ha tenido mucha suerte y Verstappen todo lo contrario". Ambos han estado parejos cuando todo ha ido de cara, pero el australiano le saca ya 47 puntos. "Estoy seguro de que Max tendrá un buen resultado a la vuelta de la esquina". La cuestión es si ese golpe de suerte evitará su marcha.
"Max tiene impaciencia por ser campeón"
No es un secreto que a esa "vuelta de la esquina" puede estar Ferrari. Si en mayo se empezó a mover su entorno para ir a otro equipo en 2018, el doble 'KO' de Canadá y Azerbaiyán convierte un cambio de ficha en algo más probable. Ted Kravitz, de la cadena 'Sky Sports', contaba que su padre Jos ya había tenido unas discusiones "acaloradas" con Helmut Marko en forma de ultimátum a Red Bull, que le prometió el título para este año y ya lo ha descartado. "Si Max recibe una oferta de Ferrari, la va a aceptar. Tiene impaciencia por ser campeón". Y en efecto, Verstappen no se puede permitir otro año así en 2018.
En Holanda ya ha surgido el debate de si Verstappen debe dar el 'portazo' a Red Bull o darle todavía un margen. Hay quien cree que la primera vía puede depararle más disgustos que alegrías, pero la actitud temperamental de su padre en las negociaciones ya le está llevando a sondear otros terrenos. "Creo que se irá a Ferrari, porque ahora mismo no ve a Red Bull ganando el título antes de 2020", apuntaba Kravitz. A esta teoría se une la 'Gazetta dello Sport', que ya confesó el interés de la Scuderia por ficharle en 2018. Pero Helmut Marko tendrá la última palabra, y ahí Verstappen no las tiene todas consigo.
¿Cómo puede evitar Red Bull su marcha?
"Ricciardo tiene contrato hasta 2018 y Verstappen, mediante cláusulas, hasta más allá de ese año", avisaba hace poco Marko. Pero a la vista de que su entorno ya tensa la cuerda y Renault puede no salir del atolladero hasta 2018, ¿cómo evitar el adiós de Max? Sin saberlo, él mismo pudo dejar la clave. "El coche empieza a ir bien: estamos cerca de Ferrari o incluso por delante". En la Q3 acabó pegado a Vettel aún con una avería en el coche. Si Red Bull sigue mejorando con su nuevo chasis y la suerte le acompaña, las cartas pueden ser distintas en unos meses.
A promising start, but gutted by once again a technical problem. A podium was in reach today, so I'm very disappointed with this outcome. pic.twitter.com/y3hjIrVuFr
— Max Verstappen (@Max33Verstappen) 25 de junio de 2017
Será a partir de septiembre cuando se ponga todo en su sitio. Sólo un adiós de Kimi Raikkonen a Ferrari abriría la puerta a Verstappen, pero llegado el caso, Marko ejecutará esas cláusulas tan restrictivas para ponerle el freno. Además, con Carlos Sainz enfilando la puerta de Renault, Red Bull no podrá permitirse la marcha de otro piloto tan importante. Tampoco se descarta que aparezca Mercedes si no renueva a Bottas o Hamilton decide retirarse. Alonso hablaba de que en el mercado de 2018 "ocurrirán cosas que nadie imagina", y Verstappen puede ser un actor en la partida.
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Junto a Verstappen, Lance Stroll es el piloto más joven de la parrilla. Se subió al podio en Azerbaiyán y contó que las celebraciones de esa noche le hicieron sentirse "muy mal" al día siguiente. Verstappen pudo tener envidia al ver al canadiense en un podio donde pudo haber ocupado el primer cajón. No obstante, su único festejo aquel día se limitó a ver las cervezas de Heineken a través de una pantalla del ordenador.
Si existiera un premio a la cadena más innovadora que emite la Fórmula 1, se lo llevaría la holandesa 'Ziggo Sport'. El lugar donde retransmiten las carreras no es el típico plató, sino un escenario que simula un bar. Ahí montan una barra y los aficionados acuden a ver un distendido programa donde los contertulios beben cerveza Heineken y toman frutos secos. Todo es muy particular, hasta el punto de que hablan con Max Verstappen desde su casa a través de Skype. Este lunes, dejó un polémico mensaje. "El miércoles voy al simulador: allá al menos no se romperá el motor".