Alonso sigue con su 'vía crucis' en Bakú; Red Bull mete el susto a Ferrari y Mercedes

"Problema de motor". Ahí se acabó el mensaje de Fernando Alonso. Sencillo, escueto y claro. La misma rutina de siempre, pero ahora entre los edificios y los castillos de Bakú. Hace dos semanas fue entre las ardillas y los bosques de Montreal. Hace un mes, junto al parque olímpico de Sochi y al calor de la afición española en Barcelona. La situación sigue igual que al inicio de temporada, lo único que cambia es el paisaje que presencia el humo de su coche.

El gran problema no es ver a Fernando Alonso viendo los toros desde la barrera, sino que semejante imagen empiece a ser una rutina para un piloto acostumbrado a la gloria que mantuvo a raya a un motor Mercedes en Canadá con casi 30km/h de déficit en las rectas. Algo podía saber Alonso cuando dijo a la prensa que el mercado de 2018 va a deparar algunas sorpresas: nunca antes se mostró tan relajado y optimista, quizá sabedor de que el año que viene volverá a ser un piloto profesional, y no alguien resignado que mira los coches como cualquier aficionado en la grada. A día de hoy, es la realidad con la que convive carrera tras carrera.

TE PUEDE INTERESAR

¿Qué sabe Alonso que los demás no sabemos? "No todo está claro para 2018"

Javier Rubio

Resulta paradójico, pero Honda traía mejoras a este Gran Premio precisamente para garantizar la fiabilidad, antes de centrarse en mejorar el rendimiento a partir de Inglaterra y Hungría, dentro de un mes. ¿El resultado? Una densa capa de humo que ponía fin a una jornada donde Alonso estaba perdiendo casi 1,5 segundos en la recta del tercer sector. Se estima que ahí arrastraba unos 40km/h de desventaja. Y para colmo, el expiloto Martin Brundle afirmaba en la retransmisión de 'Sky' que el McLaren era el segundo coche que mejor traccionaba en la primera curva, detrás del Red Bull. Son contrastes que invitan más a la escisión que la unión.

Pese a que Alonso hablara de problemas de motor y así lo escenificara la capa de humo que salía desde la parte trasera del MCL32, Eric Boullier ha salido al paso de la situación y ha confirmado posteriormente desde Bakú que se trataba de una avería en la caja de cambios. Se desconoce aún si el problema ha afectado de algún modo al propulsor, pero de ser así y tener que montar una unidad nueva, Alonso puede sumar otras 25 posiciones a las 15 que ya acumula de penalización para la carrera del domingo. Sean o no finalmente 40 puestos, su presencia en la cola de la parrilla está garantizada.

Red Bull lidera: ¿avance o cortina de humo?

Quién le hubiera dicho a los pilotos de Red Bull que llegarían a Bakú como el equipo más rápido en pista. En los Libres 1 han conseguido hasta un 'doblete' que nadie parecía creerse del todo, pero en la sesión verspetina, cuando todos han sacado sus cartas, Max Verstappen ha terminado primero por delante de Valtteri Bottas y su compañero Daniel Ricciardo, que también ha marcado vueltas muy consistentes durante todo el día. Son pequeñas pistas, pero los coches austriacos son los que más cómodos rodaban bajo unas condiciones de la pista que han traicionando a los grandes cuando menos se lo esperaban.

Por esta vía se explican los 'problemas' de Mercedes y Ferrari, desalojadas de lo más alto durante todo el día y cernidas ante el interrogante de si mañana impondrán su autoridad en la decisiva Q3. Nada sugiere lo contrario, pero Sebastian Vettel apenas ha pasado del quinto lugar y Lewis Hamilton, décimo, ni siquiera ha hecho una vuelta lanzada con los neumáticos superblandos. Las banderas rojas y las constantes interrupciones han influído en que el orden esté tan alterado, pero mañana tendrán solamente una hora en los Libres 3 para saber si pueden batir a Red Bull con toda la carne en el asador. Ahí está la incógnita del día.

Pirelli, en el punto de mira

Resultados aparte, la gran protagonista de la jornada es Pirelli y la elección de neumáticos tan conservadora que ha incorporado en esta carrera. Ni siquiera las gomas superblandas -que en teoría tienen un buen agarre en la pista- han impedido que absolutamente todos los pilotos se salieran en varias curvas del circuito. Desde Lewis Hamilton hasta Fernando Alonso, todos ellos han provocado distintas banderas amarillas durante los Libres 2, hasta el punto de ver imágenes rocambolescas como dos coches saliéndose a la vez en la misma curva por falta de agarre. La solución, de momento, es incierta.

Hay quien apunta a que los nuevos coches, que generan mucha más carga aerodinámica en las curvas, no se comportan tan bien sobre un circuito lleno de zonas reviradas. Que en Mónaco rodaran sin problemas parece disipar esta teoría. Por otro frente, y al parecer el más atinado, se apunta a que las presiones tan altas de los neumáticos Pirelli son la causa de que los pilotos no puedan traccionar lo suficiente. El remedio más sensato pasa por reducir las presiones en la clasificación de mañana, algo que la marca italiana ya ha hecho en el pasado con resultados satisfactorios. Será probablemente un tema de debate esta tarde en la reunión de pilotos.

Sainz, lejos de la Q3

Si Carlos Sainz esperaba que Bakú fuera "probablemente el fin de semana más difícil del año", la tabla de tiempos parece darle la razón. Es cierto que su 13º posición en los Libres 2 maquilla el panorama desolador que dibujaba la sesión matutina, cuando finalizó 16º, pero el margen respecto a los diez primeros parece demasiado grande para soñar con un buen resultado en la clasificación de mañana. Williams y Force India están fuera de órbita gracias a su motor Mercedes, y su batalla particular se perfila con los Renault y especialmente su compañero Daniil Kvyat, que le ha batido en ambas sesiones.

La cara negativa de la jornada la ha dejado Jolyon Palmer, que ha impactado su coche contra el vértice de la curva 8. En ese mismo punto sufría un accidente por la mañana Sergio Pérez, que sin embargo conseguía reponerse luego con la séptima posición. A final de los Libres 2, Max Verstappen también ha impactado contra las barreras de la primera curva tras perder el control de su monoplaza, con daños importantes en la parte izquierda y los pontones.