'Anatomía de una caída', el drama procesal de Justine Triet, gana la 76 edición del Festival de Cannes

Justine Triet se convierte con Anatomía de una caída en la tercera mujer ganadora de la Palma de Oro en la historia de Cannes y la tercera vez que una película francesa se hace con el máximo galardón del festival de cine más prestigioso. Acaba la 76 edición de un Festival de Cannes que ha desplegado a lo largo de doce días el mejor cine de autor de todo el mundo. Podría criticársele al festival esa apariencia de club privado al que solo acceden los de siempre —Scorsese, Wenders, Kore-eda, Loach, Kaurismaki—, pero Cannes es innegablemente la muestra del cine de más alto nivel que llegará a las salas en los próximos meses y que marca el camino y las tendencias de los próximos años. Más allá de la presencia mayoritaria de cine francés y europeo, este 2023 Cannes también ha intentado dar espacio a cinematografías más periféricas, como las africanas, con dos películas en la competición oficial por la Palma de Oro: Les filles d'Olfa, el documental de la tunecina Kaouther Ben Hania, y Banel e Adama, el drama amoroso con tintes de realismo mágico de la franco-senegalesa Ramata-Toulaye Sy, que además es ópera prima.

Desde la mañana del sábado empezaron a circular los rumores sobre qué directores seguían en la ciudad francesa, lo que suele significar que han sido avisados para acudir a la ceremonia de clausura para recoger algún premio: se habló de Triet, Ceylan, Kaurismaki, Kore-eda, Wenders y Glazer. Pero ha habido que esperar a las siete de la tarde para empezar a ver el goteo de estrellas por la alfombra roja, por la que también han aparecido Roger Corman, en plena forma a tres años de cumplir los cien, y Quentin Tarantino, que ofreció una clase maestra durante el festival y apadrinó la proyección de El ex-preso de Corea (1977), de John Flynn.

Que el jurado estuviese presidido por Ruben Östlund, ganador de la Palma de Oro el año pasado con El triángulo de la tristeza, apuntaba a La zona de interés de Jonathan Glazer y Anatomía de una caída de Justine Triet como las posibles favoritas al gusto del sueco, y descartaba Fallen Leaves, de Kaurismaki, ya que Östlund ha calificado en alguna entrevista el cine del finlandés como "inútil". A Östlund lo ha acompañado en la alfombra roja el resto del jurado, compuesto por Brie Larson, Julia Ducournau, Maryam Touzani, Rungano Nyoni, Paul Dano, Denis Ménochet, Atiq Rahimi y Damián Szifrón.

El rumor de que Anatomía de una caída podía llevarse la Palma de Oro llevaba sonando desde el comienzo del festival. Con su sexto largometraje, Justine Triet se corona en la cúspide del cine de autor, una película centrada en la violencia sistémica que sufre su protagonista, interpretada por Sandra Huller, cuando su marido muere en una caída doméstica y durante la investigación policial y el juicio se pone en cuestión la relación y la intimidad de la pareja. "Es la película más íntima que he escrito", ha admitido Triet. "Solo quiero decir que estoy feliz de haber hecho una película, porque fui a ver a mis productores para hacer una serie y me insistieron en que fuera una película". La cineasta francesa también ha hablado de las protestas sociales que viene viviendo Francia en el último año a raíz del retraso en la edad de jubilación. "Hemos vivido protestas históricas, extremadamente poderosas, que han sido reprimidas de forma chocante", ha lamentado. "El neoliberalismo está rompiendo la excepción cultural francesa, esta excepción sin la que yo no estaría aquí delante de vosotros, así que querría animar a las jóvenes cineastas, aunque el sitio en el que comencé mi carrera hace quince años era un mundo menos hostil en el que incluso nos podíamos equivocar".

El Premio del Jurado ha ido a manos de Aki Kaurismaki, que no ha asistido a la gala, por su comedia romántica atípica Fallen Leaves

"Es un honor y es un sueño", ha agradecido el británico Jonathan Glazer al recoger su Gran Premio por su película La zona de interés, la adaptación de la novela homónima del recientemente fallecido Martin Amis, que reproduce el día a día del alto cargo del nazismo Rudolf Höss, quien fue el funcionario que estuvo durante el mayor periodo de tiempo al frente de Auschwitz, y que vivía en una casa adosada al campo de exterminio con toda su familia. La película de Glazer, director de la icónica Under the Skin (2013), deja colarse el horror por los bordes de sus fotogramas, conteniendo en ellos la banalidad del mal de la que habló Hannah Arendt.

El Premio del Jurado ha ido a manos de Aki Kaurismaki, que no ha asistido a la gala, por su comedia romántica atípica Fallen Leaves, una vuelta al cine finlandés de los años noventa, con una profunda carga crítica y política revestida de mucho humor. Sus actores protagonistas, Alma Pöysti y Jussi Vatanen, han sido los encargados de recoger el premio. "Hemos tenido una semana muy cálida en Cannes y traemos un mensaje de parte de Aki Kaurismaki. Estoy profundamente honrado de haber formado parte de este festival que mantiene vivo el espíritu del cine. Muchas gracias y twist and shout", han leído.

Una de las sorpresas ha sido el premio a Mejor Dirección para el francovietnamita Trần Anh Hùng por La passion de Dodin Bouffant, un drama romántico protagonizado por Juliette Binoche y Benoit Magimel ambientado en 1885, la relación entre una cocinera y su cliente gourmet. El cineasta se lleva el galardón tres décadas después de que su ópera prima, El olor de la papaya verde, se llevase la Cámara de Oro y se convirtiese en una película de culto del cine asiático.

El premio a Mejor Interpretación masculina ha sido para el japonés Koji Yakusho, protagonista de Perfect Days, de Wim Wenders. Yakusho ha subido a recoger su premio visiblemente emocionado. Yakusho interpreta a un trabajador de los aseos públicos de Tokio en una película que bebe de Ozu y que retrata la evolución de la sociedad japonesa en los últimos años. En Perfect Days, Yakusho se ha entregado a una interpretación con muy pocos diálogos, de un limpiador que ni siquiera cuenta con aseo en su casa, pero que vive de forma humilde y sencilla comprando libros de segunda mano. Yakusho participó también en la película La anguila, de Shohei Imamura, que ganó la Palma de Oro en 1974.

Aunque la prensa especializada daba por hecho el premio a Mejor Actriz para la alemana Sandra Huller, el galardón se lo ha llevado la turca Merve Dizdar, la protagonista de About Dry Glasses, de Nuri Bylge Ceylan. La actriz ha reconocido que el haber nacido en una geografía como la de la Anatolia Oriental, una zona remota y aislada de Turquía, le ha ayudado a interpretar a su personaje, Nuray, una maestra en un colegio situado en esta región nevada e infinita, que es otra protagonista de esta bellísima película de más de tres horas del director que ya ganó la Palma de Oro en 2014 por Winter Sleep.

El premio a Mejor guion ha ido a manos del japonés Yûji Sakamoto, guionista de Monster, la última película de Kore-eda, un drama protagonizado por dos niños y que toca temas de actualidad como el bullying y el despertar sexual desde una perspectiva LGTBI. La razón por la que Roger Corman se encontraba en el Palais des Festivals ha sido para recoger el premio de honor a toda una carrera. "Qué alegría compartir el escenario con Tarantino —que ha sido el encargado de entregárselo—. Es el festival de cine más interesante del mundo", ha agradecido.

La Cámara de Oro que reconoce la mejor ópera prima entre todas las presentadas en cualquiera de las secciones del festival, ha ido a parar a la película vietnamita Inside The Yellow Cocoon, de Pham Thiên Ân, que participó en la Quincena de Realizadores. La mención especial del jurado de la Sección Oficial de cortometraje ha sido para la islandesa Fár, de Gunnur Martinsdóttir Schlüter, mientras que la Palma de Oro ha sido para el cortometraje de animación 27, de Flora Ana Buda, que cuenta las aventuras y desventuras de la joven Alice, que acaba de cumplir 27 años y que, después de sufrir un accidente con una bicicleta, se replantea su vida.

Así acaba la gran cita del cine mundial. La próxima, Venecia.