Es noticia
Por qué tu corazón necesita un chequeo si tienes pensado correr una maratón
  1. Alma, Corazón, Vida
  2. La salud del deporte
recomendaciones previas

Por qué tu corazón necesita un chequeo si tienes pensado correr una maratón

Ante una prueba de gran intensidad, no solo hay que vigilar las articulaciones: un estudio cardiológico es una herramienta fundamental para descartar patologías cardiovasculares

Foto: Foto: iStock.
Foto: iStock.

Si estás pensando en participar en una maratón, o realizas un ejercicio de tan alta intensidad como este tipo de carreras, es fundamental que conozcas la importancia de realizar algunas pruebas cardiológicas previas para descartar patologías que puedan conllevar algún problema de salud.

La preparación antes de correr un maratón es esencial para hacer de esta práctica deportiva un ejercicio cardiosaludable. Correr es bueno para la salud y para el corazón, pero, en el caso de un esfuerzo tan intenso como el que requiere una maratón, la Fundación Española del Corazón (FEC) recuerda que hace falta tomar una serie de precauciones, puesto que una mala preparación puede tener efectos irreversibles en el corazón y en la salud de los corredores.

Foto: Foto: iStock.

El deporte de resistencia intenso y a largo plazo, explica el doctor Javier Alameda, especialista en cardiología del Hospital Quirónsalud Zaragoza, healthcare partner del Maratón de Zaragoza, “sí podría producir daños al corazón si no se realiza de manera controlada. De ahí que los atletas que lo practican, y en los que no hay constancia de patología cardiaca previa, tengan que someterse a un chequeo anual para descartar enfermedad. Aunque el riesgo de infarto es muy bajo (un caso por cada 185.000 corredores), la mayoría de las muertes producidas por este motivo se podrían haber evitado si los participantes se hubieran sometido a una valoración cardiológica previa".

Este reconocimiento médico, continua el especialista, "consiste en realizar un screening de las patologías cardiovasculares más relevantes que pueden poner en riesgo la vida del deportista durante la actividad física. De tal forma que, descartando estas enfermedades, consideramos la idoneidad de la persona para hacer deporte”, continúa el especialista.

placeholder Foto: Freepik.
Foto: Freepik.

En este sentido, el estudio debe aportar información desde diferentes puntos de vista: clínico, eléctrico, estructural y funcional. Por ello, debe constar de una exploración física, un electrocardiograma, un ecocardiograma para valorar estructuralmente el corazón y una prueba de esfuerzo. Esta última, aclara el doctor Alameda, “también conocida como ergometría, se tiene que realizar con la máxima carga posible de actividad, ya que se trata de aumentar la sensibilidad del diagnóstico de idoneidad deportiva y determinar que es apto con garantías. El objetivo global del chequeo cardiaco es claro: descartar cardiopatías. Asimismo, estas pruebas nos darán una idea de la adaptación deportiva cardiovascular que tiene el deportista”.

En cuanto a las personas a las que se les debe realizar este estudio, se puede distinguir entre dos tipos de pacientes: los deportistas de competición profesionales y los aficionados de alta intensidad. “Es difícil valorar a todos los participantes antes de una actividad tan exigente, pero debemos concienciar a la población de la necesidad de la evaluación preventiva en nuestros deportistas”. En este sentido, hay que señalar que un nuevo corredor debe ser valorado antes de someterse a este tipo de carreras —que se han popularizado tanto en los últimos años—, aunque el beneficio clínico lo encontremos en todos los pacientes de una u otra forma.

Las 'red flags'

Si hablamos de los factores de riesgo, hay ciertos signos de alarma que deberían preocuparnos, como el dolor torácico, la disnea, las palpitaciones o el síncope de esfuerzo, entre otros. “Si una persona presenta algunos de estos síntomas, lo que llamamos red flags, debe ser evaluada por un especialista en cardiología”.

Finalmente, en cuanto a las alteraciones que pueden predisponer a complicaciones cardiacas durante una maratón, “podemos distinguir dos grupos de patologías en función de la edad de los deportistas”, explica el especialista: “En los menores de 35 años, fundamentalmente nos referimos a las del músculo cardíaco (miocardiopatías), cardiopatías congénitas (como, por ejemplo, las anomalías coronarias) y las cardiopatías arritmogénicas, o enfermedades puramente eléctricas por trastornos de canales iónicos. Por otro lado, en los corredores mayores de 35 años, la enfermedad del flujo sanguíneo de las arterias coronarias (cardiopatía isquémica) es la principal a descartar. Aunque son más comunes en estas franjas, igualmente podemos detectar los problemas descritos en el grupo de edad contrario”.

En conclusión, si eres una persona que realiza deporte con frecuencia, que corre maratones, medias maratones, o simplemente suele correr varias veces por semana, lo mejor es hacer una prueba de esfuerzo al año o cada dos años. Esto dependerá del nivel de deporte que hagamos. “Si corremos de manera amateur y no somos profesionales, con realizarla cada dos años sería suficiente. Pero, si corremos varios maratones, es necesario tener un seguimiento mayor”, concluye el especialista.

*El Confidencial, en colaboración con Quirónsalud, presenta una serie de artículos con información práctica, consejos y recomendaciones para practicar deporte que mejore nuestra salud y bienestar. Si tienes alguna duda sobre esta temática o quieres más información, puedes contactar con el Hospital Quirónsalud Zaragoza​.

Si estás pensando en participar en una maratón, o realizas un ejercicio de tan alta intensidad como este tipo de carreras, es fundamental que conozcas la importancia de realizar algunas pruebas cardiológicas previas para descartar patologías que puedan conllevar algún problema de salud.

Salud Quirónsalud La salud del deporte Brands Salud ECBrands
El redactor recomienda