Los diez trucos para adelgazar en enero y comenzar el año perdiendo peso

Con la llegada de los Reyes Magos se pone punto y final a las Navidades y, por tanto, también a los excesos. Atrás quedan demasiada comida, muchísima bebida y una media de más de dos kilos en nuestro cuerpo. Por eso, no es extraño que uno de los primeros propósitos que hacemos en el año nuevo sea comer sano y adelgazar para perder esos kilos de más que hemos ganado.

Pero, ¿cómo hacerlo? Lo mejor es no fiarnos de las dietas milagro que prometen perder muchos kilos en pocos días, ya que lo más normal es que suframos el temido efecto rebote. Pero si introducimos algunos hábitos saludables en nuestro día a día, perder peso será más sencillo. Estos son los diez trucos para adelgazar en el mes de enero.

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1. Beber agua. Es un clásico y está presente en casi todas las dietas que se precien, pero eso no significa que todo el mundo sepa lo necesario que es. Beber dos litros de agua al día es la opción más recomendada por los expertos pero, además, sustituye zumos, bebidas azucaradas o energéticas por agua. Para hacerlo perfectamente, bebe dos vasos de agua unos minutos antes de cada comida: te sentirás lleno más rápidamente y comerás menos.

Trucos para adelgazar en el mes de enero

2. Deja el alcohol. Hablando de beber, uno de los mayores problemas a la hora de adelgazar es el alcohol, ya que aporta calorías vacías y boicotea nuestros intentos por perder peso. Por eso, trata de no beber alcohol al menos durante un mes y verás cómo te sientes mejor. No solo eso: también ahorrarás y tendrás otros beneficios como dormir mejor o la mejora de tu piel.

Hacer un poco de deporte es primordial para que nuestro cuerpo se acostumbre a quemar calorías a diario

3. Apuesta por los podcasts. ¿Tienes algún programa favorito que no puedes escuchar en directo o que se cuelga directamente en internet? Pues lo mejor es descargártelo en el móvil y salir a caminar, a andar con tu mascota, etc. Es una forma sencilla de no volver a casa de paseo hasta completar el podcast, así que trata de que dure al menos 45 minutos o una hora para que sea lo más efectivo posible.

4. Amigos, sí; comidas, no. Casi todas las quedadas con amigos suelen ser alrededor de una mesa en la que se come más de lo normal. Por eso, intenta que vuestras próximas citas sean después de comer o antes de cenar, de tal manera que no os veáis arrastrados hasta el restaurante de turno y vuestros intentos de comer alimentos sanos se queden en el camino.

5. Aprende a cocinar. Comer en casa es mucho más saludable que hacerlo en restaurantes (y no nos referimos a comprar comida precocinada y meterla en el microondas). Con algunas nociones básicas, un poco de ayuda o muchas ganas podrás dar tus primeros pasos en la cocina y eso te ayudará a comer más sano, ahorrándote de paso unos buenos euros.

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6. Planifica tus comidas. Uno de los grandes problemas de hoy en día es que pasamos muchas horas fuera de casa, comiendo de menú, o apenas tenemos tiempo para cocinar. Por eso, aprovecha los fines de semana para planificar qué comerás de lunes a viernes y llévate el túper a la oficina: seguro que muchos compañeros ya lo hacen y es mucho más sano que bajar todos los días al bar de la esquina o comprar algo congelado en el súper según volvemos a casa.

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7. Haz la lista de la compra. Los supermercados están lleno de trampas: además de las que nos hacemos nosotros mismos comprando lo que nos entra por los ojos están aquellas que nos colocan los propios especialistas en marketing de las cadenas de alimentación. Por eso es fundamental ir con una lista de la compra y ceñirse todo lo posible a ella. ¿Un truco? Intenta no pasar por todos los pasillos: los alimentos más sanos y necesarios como leche, huevos, frutas, verduras, la carnicería o la pescadería, suelen estar en los pasillos exteriores.

8. Guerra a los aperitivos. Los expertos siempre señalan algunos alimentos prohibidos cuando se trata de adelgazar y uno de ellos son las patatas fritas, aunque se puede ampliar a todos los aperitivos fritos de bolsa. Son hipercalóricos y una bomba para nuestro plan de adelgazamiento, por lo que lo mejor es sustituirlos por frutos secos, hortalizas, verduras, frutas o yogures.

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9. Encuentra el deporte que te gusta. Ir al gimnasio no es algo que guste a todo el mundo y eso suele provocar que renunciemos al deporte aunque hayamos pagado por adelantado todo el año de gimnasio. Por eso, busca cuál es el ejercicio que más te gusta y prueba varios hasta que te decantes por uno: nadar, caminar, correr, bailar, spinning… las opciones son muchas y seguro que alguna te gusta de verdad y consigues disfrutar mientras haces deporte.

10. El desayuno y las raciones. El último truco para adelgazar es doble: por un lado, no renuncies al desayuno, ya que de lo contrario tienes muchas papeletas para tener hambre a media mañana y comer alimentos poco sanos. Y, además, cuida el tamaño de las raciones: adelgazar es posible comiendo de todo, pero comerse un kilo de carne no es muy aconsejable si lo que queremos es perder peso.