Los ministros de Exteriores de la UE presionan a Israel y discuten un plan de paz de dos Estados

Ballet diplomático en Bruselas, donde este lunes se han reunido los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea, que han recibido a un buen grupo de sus homólogos para discutir la situación en Oriente Medio. Han recibido al nuevo ministro israelí, Israel Katz, así como a su homólogo palestino, y también han escuchado a otros actores clave en la crisis entre Tel Aviv y Hamás, los ministros de Exteriores de Egipto, Jordania y Arabia Saudí, además de al secretario general de la Liga Árabe. "Creo que debemos parar de hablar del proceso de paz y empezar a hablar más concreto del proceso de dos Estados", ha explicado antes del encuentro Josep Borrell, Alto Representante de la Unión para Política Exterior y de Seguridad, que ha llevado a los ministros un plan de doce puntos elaborado por el Servicio Europeo de Acción Exterior.

"No existe otra solución global creíble que un Estado palestino independiente que coexista con Israel, en paz y seguridad, con una plena normalización y un desarrollo sustancial de la seguridad y la cooperación económica entre Israel, Palestina y la región, incluidos todos los principales Estados árabes", señala uno de los principales puntos del plan de paz compartido por Borrell con los ministros, que en su mayoría han respaldado la iniciativa. El plan también señala que Jordania, Arabia Saudí, Egipto y la Liga Árabe, es decir, los invitados al Consejo de este lunes, y "si es posible con la participación de Estados Unidos (...) deberían organizar lo antes posible una Conferencia de Paz Preparatoria".

El plan que Borrell ha presentado es algo general, una pista de aterrizaje que busca poco a poco lograr una convergencia entre los Estados miembros, reflejando doce puntos que el SEAE veía con opción de obtener el apoyo mayoritario de los Estados miembros. La manera de construir ese consenso a nivel europeo es un proceso deductivo: se van encontrando los terrenos comunes y se va avanzando y acotando cada vez más el espacio de acuerdo. Este texto se encuentra todavía en la primera parte de ese proceso.

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"La paz puede ser de muchas formas, vamos a hablar de lo que queremos hacer que es construir dos", ha explicado Borrell a su llegada a la reunión. Cada vez son más los ministros irritados con la negativa a israelí a hablar de una solución de dos Estados, que desde Bruselas se señala una y otra vez como la única garantía de seguridad real para Tel Aviv. Esa irritación se ha notado en las palabras del jefe de la diplomacia europea. "No están de acuerdo, pero tenemos que discutir y veremos que otras soluciones tienen en mente: ¿expulsar a todos los palestinos?, ¿matarlos a todos?", ha señalado Borrell antes de la celebración del Consejo.

Borrell se ha quejado del poco número de camiones con ayuda humanitaria que entran en Gaza. "Esto es inaceptable y muchos Estados miembros se lo han dicho directamente al ministro israelí", ha explicado el jefe de la diplomacia europea, que ha señalado que "no hemos hablado solamente de la solución de los dos Estados (...) sino de la situación de Oriente Medio en general" y ha explicado que el ministro israelí ha presentado "un par de vídeos que poco o nada tenían que ver con lo que estábamos hablando", uno sobre una "isla artificial" a modo de puerto y un ferrocarril que conecte Oriente Medio con India. "Nos ha parecido muy interesante", ha bromeado el Alto Representante. "Pero creo que el ministro podría haber aprovechado la situación para interesarse por la seguridad de su país y los muertos en Gaza", ha añadido.

"Estamos hablando de la paz, sí, pero a través de un proceso", ha señalado el Alto Representante, que ha explicado que es "una manera de conseguir la paz". "Es evidente que el actual Gobierno de Israel está en contra, nada nuevo, lleva estando en contra treinta años", ha subrayado.

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Más presión

Krisjanis Karins, ministro de Asuntos Exteriores letón, ha llamado incluso a "empujar" a Israel hacia aceptar la solución de los dos Estados, incluso si hay que hacerlo utilizando instrumentos financieros. "La mayor influencia de la UE siempre ha sido su cartera, la UE tiene un increíble apoyo financiero en todo el mundo. En las políticas internas, los fondos europeos ayudan a enfocar las mentes y tenemos que empezar a pensar así internacionalmente", ha señalado el letón. "Sin solución de dos Estados no habrá paz duradera en la región", ha señalado Elina Valtonen, ministra de Asuntos Exteriores de Finlandia, que ha señalado que hay que "convencer al Gobierno de Israel de que es la salida y deben entender que va en su interés". "Es la única salida a la crisis", ha señalado la finlandesa. En la misma dirección se han expresado ministros de países como Bélgica o Luxemburgo. También España.

José Manuel Albares, ministro de Asuntos Exteriores, ha vuelto a defender la idea de la Conferencia de Paz que propuso el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. "Es el momento de hablar de la materialización de los dos Estados y de la materialización de un Estado palestino", ha añadido Albares a su llegada al Consejo de Asuntos Exteriores.

El español ha señalado la necesidad de que exista un Estado palestino "con una continuidad territorial, conectados por un corredor y salida al mar", además de su capital en Jerusalén este. "Si ha sido acordado ya en tres ocasiones, ¿por qué no puede ponerse en marcha, por qué no puede implementarse?", ha añadido Albares. En Bruselas hace meses que se insiste en que los atentados del 7 de octubre han hecho que la única salida posible a la crisis sea relanzar el proceso político para construir una solución de dos Estados que excluya a Hamás.

Es una idea que comparte también la administración americana. Nada se hace en Oriente Medio sin el plácet de Washington y su implicación directa. El pasado viernes, Joe Biden, presidente americano, llamó al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, e insistió en la necesidad de avanzar en la solución de los dos Estados, algo que el líder hebreo rechazó abiertamente horas después de forma pública. "Mi insistencia es lo que impidió durante años el establecimiento de un Estado palestino que habría supuesto un peligro existencial para Israel. Mientras sea primer ministro, lo seguiré defendiendo firmemente", aseguró Netanyahu en una publicación en redes sociales.